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Revolución #64, 8 de octubre de 2006
Con motivo del 40 aniversario de la rebelión de Hunters Point
Un llamado a la comunidad para luchar y sacar al gobierno de Bush
Nota de la Redacción: Leyeron y distribuyeron esta carta en una protesta con motivo del 40 aniversario de la rebelión de Hunters Point; también salió en el periódico The Bayview.
Aún recuerdo aquel día de septiembre de 1966. Tenía 32 años y trabajaba en MUNI [servicio de transporte público]. Cuando salí del trabajo iba rumbo a la tienda de la calle Third antes de llegar a mi casa en Doublerock. Me topé con unos policías y uno de ellos me preguntó hacia dónde iba. Le dije que iba a la tienda y después a casa. Me dijo: “No puedes ir más allá, lárgate de aquí, pinche negro”. Entonces llamaron al sargento y después de que vio mi uniforme de MUNI me dijo que podía ir a la tienda siempre y cuando me fuera derecho a mi casa y no me uniera a la gente que estaba en la calle Third. En cuanto me di la vuelta, uno de ellos me pegó en la espalda y caí sobre el carro. El sargento le dijo que me dejara ir y me subí al carro y me fui.
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Fui donde estaba toda la gente y me enteré de que la policía le había disparado en la espalda y matado a Matthew Johnson, un joven de 16 años del barrio. Había cientos de personas en la calle, sobre todo jóvenes. Todos estaban muy enojados con la policía y les gritaban: “váyanse a la chingada”. Exigían que se le impusieran cargos por asesinato al policía que le había disparado.
Todos decían la verdad con furia. Toda la situación era muy represiva en esos tiempos, particularmente con los jóvenes. Incluso el hecho de ir a jugar básquetbol en los proyectos implicaba mucho riesgo y acoso por parte de la policía. Igual que ahora, el sistema no ofrecía mucha esperanza para la juventud. Al rebelarse, se estaban manifestando contra el tratamiento que recibían y contra la hipocresía de esta sociedad, que tanto hace alarde de los derechos civiles, pero no nos los ofrecía. Nuestra furia era incontenible.
El Bayview escribió: “El alcalde mandó llamar a francotiradores para que se formaran en la calle Third, tipo ejecución, y dispararan contra Bay View Opera House, donde había niños aterrados buscando refugio”. Trajeron la Guardia Nacional, tanques y vehículos armados con artillería, y aún así la rebelión siguió por varios días. Tenían razón de rebelarse y si no hubiera sido por la lucha de esos días posiblemente no habría negros en San Francisco ahora. Pero de cualquier forma la rebelión no llegó al centro del poder y todavía tenemos el mismo sistema opresivo. Solo la revolución puede parar esto desde el fondo.
Miren cómo fueron tratados los negros con lo de Katrina. “A George Bush no le importan los negros”, como dijo Kanye West. Abandonaron a la gente pobre para que se muriera en sus casas y dejaron a los negros muertos flotando en las calles. Las familias se separaron y esparcieron por todo el país de la misma forma en que las separaban durante la esclavitud. Y un año después todavía no se les ha ayudado y parece que cada vez más y más Nueva Orleáns se está limpiando de negros. Pero Kanye West no dijo lo suficiente. El hecho es que el racismo y la opresión nacional surgen desde el fondo del sistema.
Los inmigrantes vienen a este país y les quitan todos sus derechos. Producen dinero para la burguesía y ni siquiera pueden mandarles dinero a sus familias. Tienen que vivir seis o siete en un solo cuarto. Los negros han vivido en el infierno durante gran parte de su vida. Todos los que estamos hasta abajo en esta sociedad tenemos una conciencia profunda de por qué el gobierno de Bush tiene que parar y esto tiene que ser visible. Cuando tomamos las calles de esta manera, inspira a gente de todos los sectores.
Hemos estado en la defensiva por mucho tiempo mientras nos patean el trasero. El gobierno de Bush nos está matando, literalmente, a nosotros y a muchos alrededor del mundo. Tenemos que ponernos, políticamente hablando, a la ofensiva en contra del sistema. Y entre más pronto mejor.
He hablado con muchas personas en las calles de acá, y para ser honestos, a pesar de que es muy común la actitud de “chingue su madre Bush”, muchos solo maldicen la televisión o confían en los salvadores del Partido Demócrata pero no salen a las calles.
Todo esto tiene que cambiar. El 5 de octubre en más de 80 ciudades del país docenas de miles de personas no irán a la escuela o al trabajo y saldrán a las calles a marchar firmes de que no pararán hasta que salga Bush y su gobierno. Todo tipo de personas estarán ahí: desde estudiantes universitarios y de prepa, activistas en contra de la guerra, inmigrantes, gente de los suburbios, de las iglesias, académicos y especialmente jóvenes. Bayview Hunters Point tiene que ser parte de todo esto.
¿Existen obstáculos que vencer? Sí. En mi caso, me ha ayudado mucho escuchar las siete charlas de Bob Avakian. Me han mostrado de modo más profundo cómo llegamos hasta esta situación y la posibilidad de un futuro comunismo revolucionario por el que debemos luchar. Me han ayudado a imaginar todo un mundo nuevo. Si ustedes también sueñan con esto, pueden obtener las charlas en revcom.us o bobavakian.net.
Otro obstáculo por vencer es que muchos nos sentimos aislados y solos. Hay que unirnos y hablar de cómo podemos hacer que muchos otros se unan ese día. Todo esto requiere de tiempo y organización. Hay que formar comités para organizar contingentes que representen a Hunters Point y otras comunidades.
El futuro no está escrito. ¡El futuro que nos toque depende de nosotros!
¡Fuera Bush y su gobierno porque el mundo no puede esperar!
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