Reflexiones sobre el ataque al profesor Ward Churchill

¿Quién acredita a quién y con qué propósito?

Chace Sueños

Obrero Revolucionario #1273, 3 de abril, 2005, posted at rwor.org

Hace poco, el experto de seguridad nacional Max Boot, del Consejo de Relaciones Exteriores, puso a un lado los asuntos militares e internacionales para fustigar al profesor de estudios étnicos Ward Churchill, de la Universidad de Colorado, y el tema de la cátedra con titularidad. Boot es un joven derechista "prometedor"; el World Affairs Councils of America lo considera una de las "500 personas de más influencia en el país sobre política exterior". Boot ha presentado ponencias en prestigiosas escuelas militares. Publicó un libro sobre la Infantería de Marina y ahora está escribiendo una historia de las "revoluciones" de los últimos 500 años en asuntos militares. Un ensayo de Boot, publicado el 17 de marzo en el Los Angeles Times,"Cuando la cátedra con titularidad pierde el camino", describe la "patidifusa letanía de acusaciones... contra [el profesor Ward] Churchill. Se le acusa de plagio, falsificación de su ascendencia amerindia y experiencia de combate en Vietnam, de amenazar a profesores y castigar a estudiantes de ideas opuestas, fabricar evidencia histórica y conseguir una cátedra con titularidad en circunstancias sospechosas (no tiene doctorado). Si la décima parte de estas acusaciones resulta ser verdad", continúa Boot, "hay que echar de una vez a Churchill, no por sus comentarios pro terroristas sino por las demás transgresiones". (nuestro énfasis)

Claro, no se sabe a ciencia cierta si alguna de las acusaciones contra Ward Churchill es cierta, porque la gran mayoría viene de la misma gente que quiere destruirlo e intimidar a todo profesor que critique la historia o la política de Estados Unidos. Qué ingenioso, ¿no? Levantar mil calumnias contra una persona y decir luego que basta si solo una es cierta. Entonces, propongamos esto a Boot y sus amigotes: ¿qué tal si aplicamos lo mismo a los grandes mentirosos del país, el presidente Bush y su camarilla? ¿Por qué Boot y sus colegas no hacen eso? El Consejo Rector de la Universidad de Colorado ahora está examinando toda la obra del profesor Churchill para ver si hay notas de pie de la página o algún detalle incorrecto que sirva para despedirlo. Bueno, ¿por qué Boot no aplica su regla de la "décima parte" al presidente, el vicepresidente, los ministros de Relaciones Exteriores Powell y Rice, el ministro de Defensa... y toda su "obra"? ¿Cuál sería el resultado?

¿No cree Boot que en los discursos de esa banda habrá más de un detalle errado o cita incorrecta? Ayudémoslo. Veamos la mentira de George Bush, repetida hasta el cansancio, de que había evidencia convincente de que Irak tenía armas de destrucción masiva y por eso la invasión se justifica. Condoleezza Rice habló del "hongo nuclear" para hacer creer que Irak tenía armas nucleares y se las iba a dar a terroristas. ¿No eran mentiras las repetidas afirmaciones de Cheney de una conexión directa y comprobada entre Saddam Hussein y Osama Bin Laden para vincular la invasión a Irak con la "guerra contra el terrorismo"? O la famosa presentación de Colin Powell en septiembre de 2002, donde ante todo el mundo dio detalles sobre supuestas armas de destrucción masiva y sistemas lanzamisiles en Irak. Rumsfeld mintió (un hecho probado) al decir que no es responsable de la tortura y la muerte de presos en Afganistán e Irak. Las entidades del gobierno falsifican datos e informes científicos para propagar su proyecto político e ideológico y satisfacer las crecientes demandas de su base social, los fascistas cristianos, lo que pone en peligro la salud de miles de millones de personas

¿Qué dijo Boot cuando la gente más poderosa del planeta soltó esas mentiras y perjudicó a esta y futuras generaciones? ¿Por qué no investigó al gobierno con las mismas normas y minuciosidad que quiere que se use contra Ward Churchill? Si lo hubiera hecho, ¿no es cierto que cualquier persona razonable habría llegado a la conclusión de que hay que "echar de una vez" a Bush y su camarilla?

Por eso preguntamos: ¿quién tiene el poder de decidir evaluar, investigar y examinar a quién... y quién no lo tiene? ¿Por qué se permite que grandes mentiras oficiales, que justifican un baño de sangre indecible en pro del avance del imperio, se presenten continuamente como realidad y gente de la calaña de Boot ni lo cuestiona? Y cuando se critica, con la razón y la racionalidad, la historia y el camino del país, amenazan e investigan a los críticos. ¿Por qué las universidades, donde se enseñan verdades sobre la sociedad estadounidense, ahora son el blanco de ataques sistemáticos de los perros rabiosos de la derecha y funcionarios de todo nivel?

¿Quién acredita a quién? ¿Y con qué propósito? Merece reflexión.