Revolución #248, 23 de octubre de 2011


De un prisionero

"….no habrá revolución sin la participación de la juventud…"

La siguiente carta de un prisionero fue enviada al Fondo de Literatura Revolucionaria para Presas y Presos (Fondo):

Pelican Bay, 24-06-2011

¡Saludos: Mi puño en alto para todos ustedes!

Hace poco recibí un libro nuevo, llamado Lo BAsico y de verdad que me gustó su contenido. A través de los años mientras he estado leyendo el periódico Revolución he ido construyendo poco a poco un conocimiento de la sociedad en que vivimos aquí en Estados Unidos. Mientras uno crece en el barrio, todo lo que uno sabe es que ser bien pobre y con hambre es "eso es lo que hay", pelear entre pandillas es una salida de la furia que consume aquellos del ghetto, a lo último, caemos en prisión y no sabemos realmente por qué. La verdad es que esta sociedad no está diseñada para satisfacer nuestros intereses y no tiene que ser así, la sociedad es así porque demasiada gente se dedica a "superarse", a andar en las esquinas o buscando el viaje ese en vez de tener el premio en la mira y crear un ambiente Revolucionario, ¡dondequiera que se encuentren!

Yo emplazo a la juventud a imaginar un ambiente en que en sus casas al cenar, en familia, se discuten los aportes de Lenin a las luchas de hoy. Imagínense ir a la escuela y estudiar la economía de Karl Marx y aprender a aplicar el análisis marxista a la crisis económica actual. Imagínense después de clases esos sitios, esquinas de la calle, parques y estacionamientos donde los jóvenes pasan sus ratos, que se transformen en aulas en las que se discutan la historia y puntos de vista de los grupos históricos como los Young Lords, los Panteras Negras y los Brown Berets ("Boinas Cafés"), grupos que estaban compuestos de jóvenes del barrio que crecieron exactamente como tú y pero dieron ese salto para combatir contra la sociedad opresiva y transformar sus barrios en zonas Revolucionarias. Imagínate que toda una generación del barrio se juntan para estudiar acerca de la Revolución y ser constructores de la Revolución hoy. Nadie te va a obligar a hacer suya la Revolución. Esa decisión tiene que ser un compromiso propio, de dar ese salto, pero ya es hora de tener la segunda ola de Revolucionarios formados en casa, una ola tal como la que vimos o sobre la cual leímos allá en los años 60. Hoy día , las jóvenes tienen muchos más recursos que no existieron en los años sesenta, tales como el Internet, y es necesario usar la tecnología para ayudar a la juventud a capturar su momento en la historia.

Muchas personas se juntan por puras razones equivocadas que no representan sino relaciones o conductas negativas pero los jóvenes deberían estar juntándose para la Revolución y demostrar a la generación mayor ¡cómo se puede hacer hoy!

La misma Furia y Determinación dedicada a representar a su barrio o territorio debería dedicarse a representar la revolución.

El mismo ingenio para decirle perra a esa mujer u hombre, debería dedicarse a atraer a más gente hacia la revolución, las mismas energías y facilidad del verbo que tal vez usted creía que tenía para "sacarle ventaja" y "andar en la chiripa" en la calle debería dedicarse a recaudar dinero y crear proyectos para desarrollar la Revolución. La juventud tiene tantos talentos y habilidades naturales aprendidos y desarrollados por la necesidad de nacer en una sociedad que les dice "o nadas o te ahogas" y esas herramientas de supervivencia son las que contribuirán y harán posible que avance la Revolución en Estados Unidos. Pues, para decir con sinceridad qué tan importantes son los jóvenes, yo digo que ¡no habrá revolución sin la participación de la juventud!

Los jóvenes que están en los campus de la universidad entrarán en todos los niveles de la fuerza laboral y es con esa energía y contribución que se construirá la nueva sociedad socialista en beneficio de los intereses del pueblo. Los estudiantes universitarios siempre han estado en la vanguardia. El propio Mao vino del movimiento estudiantil y Floreció hasta llegar a ser un Revolucionario. Los campus universitarios al igual que las prisiones son lugares donde la gente a menudo está expuesta a ideas que rebasan el ámbito de las ideas normales del Imperialismo Estadounidense por primera vez en sus vidas, por eso, los colegios al igual que las prisiones son terreno fértil para la Revolución. En los colegios al igual que las prisiones las personas empiezan a prestar atención a los acontecimientos en el Mundo y que todo lo que les han dicho, de que este país [Estados Unidos] es la patria de los libres, etc., es mentira. Pero los estudiantes universitarios no deben simplemente "ir con la corriente" sino que deberían hacer todo a su alcance para elevar la conciencia de su campus y no esperar que los demás se vuelvan líderes, pues a veces eso depende de quiénes se pongan de pie primero en una situación.

Los estudiantes universitarios, hoy día, enfrentan los efectos del Imperialismo, tienen que pagar una fortuna por sus estudios. Algunos estarán pagando los préstamos estudiantiles por décadas después de su graduación, lo que obliga a algunos de ellos a tener dos trabajos para sobrevivir y tener una educación en Estados Unidos. ¿Qué clase de sistema es éste en que es casi imposible estudiar, que elimina los estudios étnicos que en esencia son clases que enseñan la historia de las minorías en Estados Unidos tal como se hace en el Sudoeste, y que además despide a profesores que enseñan la verdadera historia de Estados Unidos, tal como le hizo a Ward Churchill, el Profesor Indígena?

Este sistema fue construido y opera solamente para avalar el futuro de la clase dominante blanca, ese puñado de ricos que dicta la agenda para Estados Unidos en el frente nacional así como la agenda internacional. Aparte de no aceptar esa sangrienta política, precisamente por eso los estudiantes universitarios y jóvenes deberían conseguir literatura Revolucionaria, estudiarla, discutirla con otros y contribuir a desarrollar un movimiento para que una sociedad Revolucionaria eche raíces en Estados Unidos.

Todo esto lo hago desde la penitenciaría y el "hoyo" en que me metieron hace años por mis actividades Revolucionarias mientras estaba en la población general, por ello me sacaron y desataron la represión que seguro existió en la Alemania nazi pero no obstante me levanto de nuevo. Por tanto, si puedo continuar mis esfuerzos incluso estando encadenado cada vez que dejo mi celda y me mantienen en el osario (un depósito de los huesos de los muertos) las 23 horas al día, si puedo continuar, le pido a la juventud que ¡demuestre que existe ese oído receptivo allá afuera, y que nuestros esfuerzos no fuesen en vano!

¡Libera tu mente y engánchate a la Revolución! ¡Todo el poder al pueblo!

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