Revolución en línea, 31 de mayo de 2012


Las primeras 48 horas de la Gira del Autobús Lo BAsico

Nota de la redacción: Se revisó este texto ligeramente para publicarse.

Viajeros del autobús: ya han pasado solo dos días y se siente como que la Gira del Autobús Lo BAsico despegará con un impulso arrasador por toda Atlanta con la dirección de Bob Avakian y la revolución que necesitamos. Muchas cosas han sucedido que son nuevas para todos los que se han hecho parte de todo esto. El autobús se detuvo dos veces en una secundaria, en los multifamiliares, en una comunidad de inmigrantes, en un programa de radio, en un foro sobre el asesinato de hombres negros y en un excelente restaurante caribeño que donó una comida para los voluntarios.

La primera noche que los voluntarios estaban en Atlanta, un simpatizante de la gira nos llevó a un vecindario a donde el autobús aterrizaría por primera vez al día siguiente. Este es un vecindario negro con un complejo multifamiliar destartalado con duras cercas de hierro negras. Hace poco derribaron toda la vivienda pública en Atlanta y algunas personas expulsadas de dicha vivienda viven aquí.

En una soleada tarde calurosa en Atlanta, Georgia, con una penitenciaría federal a un tiro de piedra de distancia, la Gira recorrió el vecindario. Pronto estuvieron en las manos de niños de cuatro a ocho años, y de los adultos con sus bebes en brazos y de los abuelos, el periódico Revolución y las coloridas tarjetas de mano con la cita de Lo BAsico 1:13 "No más generaciones de nuestra juventud, aquí o a través del mundo, cuyas vidas se acaban, cuyo futuro ya está sellado, que han sido condenados a una muerte temprana o a una vida de miseria y brutalidad, que el sistema ha destinado a opresión y al olvido incluso antes de que nazcan. Yo digo no más de eso". La gente mayor las leía con seriedad y algunos tipos treintiañeros nada más cotorreaban antes de nuestra llegada, pero pasaron un rato con nosotros y le entraron a las cosas de manera seria. También se conectaron, sonreían, se reían y platicaban.

Algunos se reían por nerviosismo. Una mujer joven quien se reía tontamente en respuesta a un voluntario, pues dijo que lo hacía porque él se oía muy serio, pero después, cuando captaba más sobre Bob Avakian y el Partido Comunista Revolucionario, Estados Unidos, dio vuelta a su amigo en callada confianza: "Esto es genial". La respuesta de las personas con otro tipo de risa por conmocionadas y divertidas es aceptar escuchar a aquellos que dicen algunas verdades acerca del mundo y denuncian al sistema y a aquellos que lo refuerzan con total desdén y claridad sobre la ilegitimidad de este sistema.

La cita "Tres strikes y fuera" de Bob Avakian (Revolución #247, 9 de octubre de 2011) atrajo a muchos, quienes la leyeron y dieron su aprobación permitiéndose unirse a la conversación en curso o que señalaron la foto al pie de la página con el policía que empuja la cara de un hombre negro contra el suelo y dijeron: "Yo he vivido eso". La gente se abrió y habló del hostigamiento y criminalización, la tortura en las prisiones, la brutalidad contra las mujeres… "Sí. Eso pasa aquí. Todo el tiempo", respondió rápidamente una mujer.

Día Uno: la Gira se inició tempranito cuando el equipo llegó a las 7:30 a.m. en punto, ¡empezando a tiempo! Esta es una secundaria con estudiantes de muchas nacionalidades, principalmente negros; hace semanas que se organizó un día del sudadera con capucha por Trayvon Martin allá. Los jóvenes se acercaron a nuestra pancarta y querían saber de qué hablábamos. Eso desagradó a la dirección de la escuela, la que nos pidió pasarse al otro lado de la calle. De ahí, los alumnos cruzaron la calle para charlar.

La pancarta tenía la cita 1:13 de Lo BAsico en inglés y español y durante la gira la gente la firmó.

El primer día en la escuela fue muy intenso, pero lleno de entusiasmo. El segundo día volvimos y llevamos la discusión a mayor profundidad con las personas y corrimos la voz de que la gente podía reunirse con nosotros el viernes para tomarnos una foto en grupo. Pensando en cómo ellos pueden ser parte de esto, una persona dijo: "Yo no puedo dejar mi trabajo de día para ser parte de esto, pero ¡puedo hacer una donación!" La gente se llevó paquetes de tarjetas de mano y tenía ideas sobre dónde podían distribuirlas en la escuela, como el boletín de acción política.

El segundo día, un padre salió a conocer la revolución, diciendo: “Mi hija los vio acá y vino a casa con la tarjeta. Por eso vine, quería ver si ustedes estaban acá hoy, quería venir nada más para ver qué hacen uds.” Sostenía la posición de que la respuesta era la responsabilidad personal, pero lo debatimos y platicamos un rato, él quiere llevar su esposa e hija a la fiesta de arranque de la gira.

Los que se acercaron a firmar la pancarta eran principalmente negros; había una joven blanca que firmó la pancarta quien tiene un hermano que estuvo preso ocho años por drogas y después un joven blanco quien tenía cierto estilo punk, que al escuchar la palabra "comunismo" se desconcertó/sorprendió; le preguntamos, "¿Qué piensas sobre el comunismo?" Dijo: "Lo que he escuchado sobre el comunismo no me llama la atención”. Un voluntario explicó que eso quiere decir que lo que él ha escuchado no le importa un comino y que está abierto.

La primera noche se terminó viendo la charla Revolución de BA sobre las indemnizaciones bajo el socialismo y discutiendo muy profundamente la cuestión de la opresión nacional y la verdadera liberación con Clyde Young. Las personas forcejearon con la relación de un odio visceral por la opresión del pueblo negro y un análisis teórico de su raíz y la posibilidad de eliminarla. Se esforzaban para entender por qué eliminar esta centenaria opresión tiene que ser parte de ir hasta el final al comunismo y a la vez obtener el mero derecho a la autodeterminación del pueblo negro, por justa que sea, no llevará a la emancipación de toda la humanidad y nos adentramos en eso.

Escribiremos más sobre la visita en la comunidad inmigrante, pero algo que me llamaba la atención sobre las historias de hoy es que, por un lado, los voluntarios comentaban que, en contraste con la comunidad negra, de hecho había poca gente en la calle en este barrio y nos dimos cuenta de que eso se debe a que las personas en esta comunidad trabajaban pero en la comunidad negra la tasa de desempleo tiende a ser más alta, y por eso durante el día hay gente en la calle y por esa razón explícita nuestro guía recomendó que fuéramos por la tarde. Por otro lado, en ambas comunidades escuché conversaciones en que las personas llegaban a conocer que para cambiar el mundo, y no solo tener coraje y frustración o encontrar una manera de sobrellevarlo, no se puede hacerlo solo, las personas tienen que unirse. Esto está relacionado con la nueva tarjeta que distribuimos en esta gira con "Las 12 maneras en que USTED puede ser parte de construir el movimiento para la revolución, ahora mismo" y el hecho de que las personas ya empiezan a tener algún sentido de que todo esto tiene que mucho que ver con el hecho de que los revolucionarios ya empiezan hablarles de qué tanto tienen que ser parte de esto y las formas en que pueden participar en todo un movimiento que tiene por objeto llegar a un mundo mejor. Todo eso, tanto la comunidad inmigrante como las nuevas formas en que las personas se están organizando y haciendo suya la revolución, será parte de futuras entradas.

Ahora mismo estamos escribiendo desde una asamblea municipal titulada "Raza y Justicia: Darles Poder a las Madres para Conservar la Vida de los Hombres Afroamericanos”, patrocinada por la emisora radial de la localidad. Las personas acudieron porque no quieren que sus hijos sigan muriéndose sin necesidad, pero lo que encontraron no fue una discusión seria del problema y la solución pero al contrario un programa que más bien procuraba calmarles los ánimos a las personas y adormecerlas en un mortífero estatus quo y no organizarlas y movilizarlas para ser parte de cambiar la situación. Un público predominantemente negro de muchas edades se congregó en el auditorio de una secundaria de Atlanta, Georgia, para escuchar una discusión de oradores y familias de Ariston Waiters, Robert Champion, Canard Arnold, Erving Jefferson y Trayvon Martin, todos los que son víctimas de la violencia injusta. El equipo del autobús recibió una invitación a entrar al auditorio donde la gente se detuvo para chequear Revolución y conseguir una copia de Lo BAsico. Se generó toda una escena en la mesa al mirar la gente un cartel con la cita de Lo BAsico 1:1 "Sin la esclavitud, Estados Unidos no existiría tal como lo conocemos hoy. Eso es una verdad simple y básica”, abrir el libro para leer más, recibir la tarjeta de mano "No más generaciones…", hablar con los voluntarios, apuntarse, firmar la pancarta, participar de diferentes maneras. La gente contó historias sobre la violencia policial y también historias de ser parte de los levantamientos de los años 60. Vendimos seis copias de Lo BAsico, una a un joven blanco de un grupo de activistas aquí en Atlanta, quien compró el libro y ya lleva casi una hora leyéndolo. La pancarta de la Gira está en exhibición. De lo que escuché acerca del foro, culpaban muchísimo a los jóvenes por la situación en que el sistema los ha metido y también metían muchísima religión, pero muchas personas querían más de lo que escuchaban y había mucha receptividad y ganas para conectarse con el movimiento para la revolución; una mujer, después de escuchar a Sunsara Taylor hablar adentro, salió para platicar: "Estoy de acuerdo con lo que ella dice, porque ¡YO ESTOY REQUETE-HARTA!”

Una persona salió y dijo: "Me encanta esta palabra". Como el voluntario no pudo escucharla, le preguntó: "¿Cuál palabra?" "Revolución". Estaba consternada acerca de la discusión dentro del auditorio. "No sé lo que pasa allá dentro".

Unas cuantas personas, al enterarse del autobús Lo BAsico, nos preguntaron: "¿Sí puedo subir al autobús?"

Puedo comprender el sentimiento.

Así que mis queridos viajeros del autobús, estén en él en el sentido literal o sean aquellos que lo empujan desde atrás con su apoyo y sus esperanzas de un mundo mejor, y sean las muchas formas grandes y pequeñas en que las personas aportan, hoy la Gira del Autobús Lo BAsico se prepara para ponerse en marcha.

Envíenos sus comentarios.

Si le gusta este artículo, suscríbase, done y contribuya regularmente al periódico Revolución.

Basics
Revolución: por qué es necesaria, por qué es posible, qué es
From Ike to Mao and Beyond