Marcha contra el asesinato policial por el Sur Centro angelino: “¡Justicia para Terry Laffitte!”

6 de junio de 2013 | Periódico Revolución | revcom.us

 

De un lector:

El sábado 25 de mayo, una poderosa y desafiante marcha nocturna se apoderó de la mitad de la calle Alameda del barrio este del Sur Centro angelino, exigiendo justicia para Terry Laffitte, asesinado por los alguaciles la semana anterior. Decenas de personas marcharon mientras que otras seguían en sus carros y los pasajeros se colgaban de las ventanas con pancartas y muchísimos carros que bajaban por esta calle transitada agitaban la mano en señal de apoyo y sacaba sus celulares para filmar la protesta inspiradora. Al entrar la marcha, con un recorrido de 7 km, al barrio de Watts y acercarse a la tristemente célebre delegación del Sherifato de Lynnwood, las patrulla de los alguaciles empezaban a arrimarse a la protesta, ordenando que los carros se orillaran y luego amenazando por altavoces con arrestar a todo aquel que se negara a dejar al calle. Los furiosos familiares replicaron a gritos: “¿Que van a hacer? ¿Matarnos?” y “¡asesinos!” a la vez que otros coreaban “Al carajo la policía” y “Ellos no pueden arrestar a todos nosotros”, y continuaron la marcha hasta la delegación y de ahí hacia adentro, exigiendo justicia y los nombres de los asesinos.


Terry Laffitte

Los alguaciles atacaron y mataron a Terry Laffitte, de 50 años de edad y el padre de tres hijas, en su propio patio trasero tras haberlo parado por pasearse en su bicicleta de modo errático al salirse de la calle hacia su casa. Los alguaciles le pagaron y lo echaron al suelo. Mientras yacía en el suelo, respirando con dificultad, según lo que su hermana le dijo al noticiero del Canal 9, los alguaciles le pegaron un tiro en la parte de atrás de la nuca. A sus familiares que presenciaron y videofilmaron todo el incidente también los maltrataron y les confiscaron sus celulares. En seguida, los alguaciles arrestaron a todo aquel que estuviera en la casa, tachando en los noticieros a sus familiares de “miembros de pandillas” y diciendo que Terry Laffitte llevaba un arma. La casa había estado llena principalmente de jóvenes mujeres y niños. Además de los adultos, los alguaciles se llevaron a cinco niños menores de seis años de edad, incluso un bebé de tres semanas de edad.

La justa furia de la familia de Terry Laffitte se desbordó en las calles en un momento en que en el sur de California, la policía ha baleado a 21 personas en un mes. Un familiar llevaba una pancarta con las palabras: “El 18 de mayo de 2013, a eso de las 9 p.m., el Departamento del Sherifato del Condado de Los ángeles asesinó a Terry Laffitte. Éste era un hombre no armado inocente quien no oponía resistencia. Al yacer indefenso en el suelo, los policías le dieron una paliza una y otra vez. Poco después, lo asesinaron… otro caso de la fuerza excesiva y la brutalidad policial, ¿Cuándo terminará? Él no era un animal y no merecía que lo trataran y asesinaran como uno. Él era un cariñoso padre, hermano, tío, hijo y amigo…”.

El Club Revolución-Sur Centro se sumó a la marcha con un imagen ampliada de la portada del periódico Revolución “NOSOTROS DECIMOS BASTA YA” y hablaron con la gente acerca de la respuesta a “¿cuándo terminará esto?” — la necesidad de tener una revolución y nada menos y la dirección que tenemos para hacer dicha revolución. Hacia el fin de la protesta en la comisaría del Sherifato, dirigimos a la multitud para hacer un “micro humano” de la cita 1:24 de Lo BAsico de Bob Avakian sobre el papel de la policía, una cita valorada por muchos de los presentes. Durante toda la velada, muchas personas adquirieron el periódico, en especial por la primera plana junto con el afiche de las páginas centrales “BASTA YA”. Además, se interesaron profundamente en el 10 de junio, el día nacional de sudadera con capucha para exigir justicia para Trayvon Martin y el llamado de emergencia a tomarse partido con los prisioneros que hará una huelga nacional de hambre en julio.

Vea también, próximamente, el artículo “El asesinato y brutalidad policial en la región de Los Ángeles: ¡Los perros TODAVÍA están en la maldita calle!”

Envíenos sus comentarios.

Si le gusta este artículo, suscríbase, done y contribuya regularmente al periódico Revolución.