Día de Sudadera con Capucha

El Área de la Bahía de San Francisco

17 de junio de 2013 | Periódico Revolución | revcom.us

 

De unos lectores:

Cincuenta personas se reunieron en la estación de tren de Fruitvale BART de Oakland para un mitin y otros 25 en la calle 14 y Broadway en el centro de Oakland. Miles de pegatinas salieron en las escuelas secundarias de la zona y en el concierto Jams de KMEL y otras excusiones culminándose el Día de Sudadera con Capucha.

En un barrio

El Club Revolución en un barrio celebró un "Día de fotos de Sudadera con Capucha para Trayvon" en un parque en la comunidad el 9 de junio.

Día de Sudadera con Capucha, Oakland, California, en la estación Fruitvale del metro BART donde la policía asesinó a Oscar Grant. Foto: Especial para Revolución.

La tarde comenzó con la fabricación de una pancarta que decía: "Todos somos Trayvon, todo el maldito sistema es culpable". Esta bandera fue destinada para utilizarse en el programa al día siguiente. Un grupo de chamacos aceptó esta tarea con entusiasmo, pintando la bandera con las consignas pero también agregando sus nombres. Esto atrajo a otros jóvenes y adultos a participar en su actividad, "para supervisar" el trabajo de pintar y añadir sus nombres. Y muy pronto se veía a grupos de jóvenes juntos en pie, sosteniendo varias exhibiciones de las páginas centrales de Lo BAsico 1:13 de Revolución, y en un par de ocasiones leyeron en voz alta la cita de BA, que ha producido tanta resonancia en tanta gente. Una hora más tarde, la misma escena sucedió otra vez con otra ola de chamacos y adultos.

Las tarjetas de mano de Lo BAsico 1:13 se distribuyeron ampliamente junto con cientos de pegatinas y carteles de Trayvon. Los clips de Habla BA: ¡REVOLUCIÓN — NADA MENOS! se mostraron a varias personas en el sitio también.

Por la tarde, seis miembros de un club social en la comunidad aparecieron, vestidos de sudadera con capucha negra, listos para una producción de video de justicia para Trayvon que se había negociado desde la semana anterior. Un rapero del Club Revolución se acercó para rapear al ritmo de un grupo de rap local en el barrio, mientras el club social se movía al ritmo, hablando del sentimiento profundo de los del vecindario de que "Todos somos Trayvon Martin".

Después, el club social y otros se pasaron de unos a otros sus teléfonos para tomar fotos para sus amigos de hashtags, Instagram, Twitter y Facebook. Esas personas estaban orgullosas de lo que habían hecho, queriendo hacer más; y de ahí el club social organizó una presentación y discusión del dvd Habla BA: ¡REVOLUCIÓN — NADA MENOS! específicamente para su próxima reunión.

En la secundaria Castlemont

En la secundaria Castlemont en el este de Oakland, un grupo de diversas razas de unos 60 alumnos recibieron saludos al salir del campus el 7 de junio, el último día de clases (antes de exámenes finales) de parte de un pequeño contingente de miembros del Club Revolución y otros con pancartas "Todos todavía somos Trayvon Martin". Una pista de ritmo de una reproductora de cidís con grandes bocinas coreaba el nombre de Trayvon una y otra vez al acercarse los estudiantes individualmente a sostener la manta que fue firmada por muchos estudiantes de su escuela durante la semana.

Fue todo un reto ir contra la presión de sus grupos de amigos y ponerse al frente, mientras unos 20 estudiantes se turnaron para sostener la manta, si bien sin llegar a tener una masa crítica de estudiantes para voltear el estado de ánimo de la banda. Algunos estudiantes que sostenían la manta se acercaron a otros alumnos de al lado y les retaron para que se incorporaran. Luego, unos alumnos se trasladaron al frente de la escuela para que otros se tomaran la foto. Todo esto sucedía, mientras otra gente en la calle se unía de vez en cuando, incluyendo a una mujer mayor en silla de ruedas, y se distribuyeron rápidamente los carteles y pegatinas de Trayvon, mientras que al mismo tiempo, algunos otros estudiantes efectivamente se colaron por la entrada trasera.

De ahí, un miembro del Club Revolución comenzó un rap mientras se distribuyeron más de 30 silbatos. Al principio había una cacofonía, pero cuando el rapero coreó "Trayvon Martin no tenía que morir; todos sabemos por qué, todo el maldito sistema es culpable" (al ritmo de Too Short "Blow the Whistle") [A sonar el silbato], la gente comenzó a cambiar de coro de "Al carajo la policía" a "¡Sí, todo el maldito sistema es culpable!" ¡Y luego sonaban los silbatos al ritmo!

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