Del Servicio Noticioso Un Mundo Que Ganar:
Organización de Mujeres 8 de Marzo — Sobre el 27º aniversario de la masacre de presos políticos en Irán
"Un mensaje de vida o muerte de los miles de presos políticos de los años ochenta: ¡Al derrocamiento revolucionario del opresivo régimen de la República Islámica!"
21 de octubre de 2015 | Periódico Revolución | revcom.us
14 de septiembre de 2015. Servicio Noticioso Un Mundo Que Ganar. La siguiente es una declaración de la Organización de Mujeres 8 de Marzo (Irán – Afganistán).
El opresivo régimen antimujer de la República Islámica de Irán ha ejecutado a más de 1.900 presos, incluyendo presos políticos, desde 2014. ¡Una vez más ocupa el primer lugar a nivel mundial! ¡En los últimos seis meses han ahorcado a 570 presos!
Con la presidencia de Rouhaní y con los esfuerzos del régimen por convencer a los imperialistas estadounidenses y europeos de que pueden confiar en éste como un Estado “legitimo” y poderoso que los puede ayudar a salir de la crisis del capitalismo y del Medio Oriente, el régimen ha intensificado los arrestos y las ejecuciones de sus oponentes. A su vez las potencias imperialistas en su afán de salir de los pantanos de la crisis que están enfrentando en Medio Oriente, y para recuperarse de su crisis capitalista, se hacen de la vista gorda y avalan calladamente las ejecuciones, la intensificación de la subordinación de la mujer, el encarcelamiento de la oposición, la represión y el encarcelamiento de trabajadores y obreros por parte del Estado islámico, tal y como lo han hecho desde hace 37 años cuando el Régimen Islámico llegó al poder — especialmente la masacre de presos políticos en los años ochenta y en particular en el verano de 1988.
Desde que el régimen islámico llegó al poder, anunciaron que la mujer debía vestir el hiyab, el símbolo de la esclavitud, e impusieron sus inhumanas y reaccionarias leyes contra la mujer. Impusieron la violencia patriarcal organizada en el hogar, en el trabajo y en la sociedad, y cuando prohibieron todos los partidos revolucionarios y combativos, y cuando a nombre de una “revolución cultural islámica” atacaron las universidades, y cuando arrestaban y encarcelaban a los jóvenes revolucionarios… les dijeron a las masas populares que la subyugación de la mujer, la opresión, la tortura y la ejecución son en su conjunto una parte inseparable de su identidad. Y solo a través de estos medios es que han podido continuar su asquerosa existencia.
Han pasado 27 años desde estos acontecimientos, los más horribles del Irán contemporáneo. Durante estos sucesos miles de presos políticos fueron ejecutados en menos de dos meses. Los mejores hijos e hijas del pueblo fueron ahorcados o ejecutados de otras formas en secreto tras los muros de las prisiones. La magnitud de los crímenes del régimen fue tan enorme que para ocultar la evidencia enterraron en fosas comunes y bajo el velo de la noche a los presos ejecutados. El régimen esperaba que al eliminar físicamente a miles de presos políticos podría eliminarlos de la memoria histórica y ocultarle a la nueva generación la meta de los presos de construir un mundo sin opresión ni explotación. Ellos dieron su vida en la lucha por alcanzar esta meta.
Pero el régimen no pudo ocultarle al pueblo un crimen tan horrendo. Las constantes denuncias de las fuerzas revolucionarias y combativas así como la lucha de las familias de los presos ejecutados no permitieron que se olvidara este crimen. Poner al descubierto este crimen se convirtió en otra poderosa razón para que las masas entendieran la naturaleza antipueblo y antimujer de este opresivo régimen y denunciarlos mucho más.
Una gran parte de estos presos políticos eran mujeres que se rebelaron contra el podrido sistema dominante antimujer. Estas mujeres no solo fueron enjuiciadas por luchar contra la opresión y la explotación sino también torturadas y abusadas sexualmente por ser mujeres, con el objetivo de enseñarles lecciones reaccionarias a las mujeres de toda la sociedad. Pero las mujeres revolucionarias y combativas convirtieron las cárceles en un campo de batalla contra los gobernantes religiosos reaccionarios. La tortura, la violación y la ejecución no lograron doblegarlas.
En los últimos 17 años desde la larga década de masacres logramos establecer la consigna: “¡Ni perdonaremos ni olvidaremos!”, una cruda verdad contra los que deliberadamente hicieron todo lo posible para que este horroroso crimen del régimen de la República Islámica quedara en el olvido. Fue nuestra organización la que puso por primera vez esta consigna en la escena política de Irán, y desde entonces la tendencia reformista ha atacado duramente a los activistas de nuestra organización porque estos reformistas saben muy bien que esta consigna no da pie a transigir con el régimen criminal de la República Islámica. La presentación de esta consigna por parte de las mujeres revolucionarias y radicales expresa la verdad innegable de que las mujeres pueden y deben levantar la bandera del cambio radical y fundamental en la sociedad y la realización de esta consigna debe mantenerse como una de las demandas más importantes de las mujeres y de todo el pueblo de Irán.
Nosotras las mujeres, continuando nuestra lucha, mostraremos que no olvidaremos ni perdonaremos la brutal masacre de miles de mujeres presas políticas que representaron la rebelión y lucharon por la emancipación de la mujer. ¡Este compromiso exige que miles y miles de mujeres rebeldes que ya se hartaron de la actual situación den un paso adelante y pregunten: “¿Por qué ejecutaron a nuestras hermanas?”! Si es un “crimen” exigir la emancipación y rebelarse contra el régimen más bárbaro de nuestros tiempos, entonces todas nosotras las mujeres somos “criminales”, porque todas nosotras exigimos la emancipación y queremos rebelarnos contra regímenes anticuados, atrasados e inhumanos como la República Islámica de Irán.
Hoy las mujeres y los militantes revolucionarios, en particular los jóvenes, no solo valoran el mensaje de vida o muerte de estos miles de presos políticos, sino que están comprometidos con la realización de esta consigna. En este camino no podemos olvidar la masacre de los presos políticos ni perdonar a los responsables de tal crimen.
La nueva generación de luchadores puede convertirse en abanderada de la furia y el odio del pueblo contra el régimen de la República Islámica, y al igual que los mártires de los años ochenta, no aceptarán menos que el derrocamiento revolucionario de todo el régimen antimujer de la República Islámica de Irán.
El Servicio Noticioso Un Mundo Que Ganar es un servicio de Un Mundo Que Ganar, una publicación política y teórica inspirada por la formación del Movimiento Revolucionario Internacionalista, el centro embrionario de los partidos y organizaciones marxista-leninista-maoístas.
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