El sistema no halla "ninguna evidencia" de que la policía matara a Freddie Gray...
Pero revela un MUNDO DE EVIDENCIA de que ¡TODO EL MALDITO SISTEMA ES CULPABLE, CARAJO!

29 de junio de 2016 | Periódico Revolución | revcom.us

 

El 23 de junio, el presente sistema declaró “no culpable” a Caesar Goodson, uno de los policías que mataron a Freddie Gray en Baltimore. Los fiscales no pudieron o no quisieron presentar pruebas, y el juez no pudo o no quiso encontrar pruebas para comprobar que el cerdo policía que por más de 40 minutos maltrató el cuerpo destrozado de Freddie en lo que llaman un “aventón fuerte”, cometió lo que el presente sistema calificaría como un crimen. Ninguna prueba de que se tipifica como un crimen la detención de un joven hombre sano y de dejarlo casi muerto.

ESO —EN SÍ— es más que SUFICIENTE evidencia de que TODO EL MALDITO SISTEMA ES CULPABLE, CARAJO.

Millones vieron el video de cómo los policías torturaron y maltrataron a Freddie Gray. Retorcieron su cuerpo delgado y frágil como si fuera un pretzel. Se escucharon sus gritos en el multifamiliar Gilmor Homes de vecinos negros que viven como si estuvieran en una prisión. Mientras testigos gritaban “¡no puede mover las piernas!”, lo arrastraron y lo metieron en un furgón, en el cual por 44 minutos su cuerpo destrozado rebotó contra las paredes metálicas, durante lo que todos los negros de Baltimore conocen como la marca registrada de los cerdos policías de Baltimore: el “aventón fuerte”.

NADA de eso salió en el juicio de Goodson. ¿Qué clase de sistema de “justicia” es ese? ¡Se trata de un sistema de “justicia” que sirve para encubrir los asesinatos policiales!

El veredicto en el caso de Goodson y todo lo que sucedió antes, constituyen una contundente denuncia del supuesto sistema de justicia. Por lo tanto… ¿qué es la respuesta al presente sistema? ¿Que hay que volver a reconfigurar la manera en que procesaban el caso entero? ¿Intervino alguna corte o autoridad superior, con promesas de corregirlo?

¡Todo lo contrario! En vez de voces indignadas que pedían justicia, muchos de la estructura del poder de Baltimore, y más allá, piden que la fiscalía cierre los demás casos. Piden que el cerdo policial que supervisó el asesinato de Freddie Gray ni siquiera sea juzgado, y que los que lo retorcieron como un pretzel salgan absueltos sin siquiera encarar la farsa de juicio que montaron para Goodson (y los otros antes de él).

¿Qué nos dice lo anterior sobre la clase de sistema que es este? ¡¿Qué en vez de indignarse ante la injusticia por la falta de condena por el asesinato policial de un negro, los que tienen el poder e influencia dicen, que los dejen salir libres?!

Ante la indignación… traman una IN-justicia

En Estados Unidos, la policía dispara y mata a gente de color sin arma todo el tiempo y casi nunca les levantan cargos (ver por ejemplo “14 Times Cops Walked In 2015 After Shooting People To Death”, Huffington Post, 29-12-2015). Una vez más: aún MÁS EVIDENCIA de que el presente sistema explota y oprime con el respaldo de la violencia y el terror en Estados Unidos — de la mano con su constante injusto terror y guerras por todo el mundo.

Pero después de que los policías asesinaron a Freddie Gray, la juventud de Baltimore se levantó, con furia. Le pusieron una zancadilla al sistema de justicia. Y sus actos hacen ver a todos que el asesino sistema es injusto, y que no es todopoderoso. Cuando la juventud dijo no a las amenazas, a los insultos y al maltrato de parte de los cerdos policías, y alumbró los cielos de Baltimore, el mundo entero tuvo que confrontar el hecho de que el asesinato de Freddie Gray fue un acto racista, injusto, y que hay gente que ya no lo tolerará más.

El sistema contraatacó inmediatamente. Desencadenó a la Guardia Nacional. Abrió cargos gravísimos contra unas personas. Barack Obama mismo tachó de “maleantes” a esos jóvenes, sin decir nada parecido acerca de los policías que asesinaron salvajemente a Freddie Gray.

Pero mucha gente —y no solo aquellos que viven a diario el terror policial— no se tragó esas necedades. Dos días después de la rebelión, miles de estudiantes marcharon por justicia para Freddie Gray, entre ellos estudiantes de la elite Universidad John Hopkins, con un estudiantado principalmente blanco —gente que, si no hubiera sido por la rebelión— probablemente hubieran seguido con su vida sin darse cuenta o no prestar atención a la brutalidad y opresión que viven los vecinos de un multifamiliar a un kilómetro de la universidad.

Voces prominentes y respetadas de la sociedad denunciaron a Obama y se negaron a condenar a la rebelión y tomaron partido con la juventud. En medio del levantamiento, el comentarista de la CNN y profesor en la universidad Morehouse College, Marc Lamont Hill, declaró que el pueblo tenía derecho a la “justa ira, la justa indignación ante la violencia estatal y los asesinatos extrajudiciales”.

Y ahí hubo muestras de algo más: la revolución no es sólo necesaria sino posible. Se vio el potencial —si se cuenta con una dirección revolucionaria— para que los más castigados a diario por el presente sistema sean la columna vertebral de una revolución concreta capaz de atraer y ganarse el apoyo de amplios sectores de la sociedad.

Los que gobiernan todo esto no pudieron ver la “evidencia” para condenar a los asesinos de Freddie Gray. Pero sí pudieron ver la evidencia de que la lealtad de sectores de la población con la que cuentan para que apoyen a su sistema, podría deshilacharse, desenmarañarse o hasta volverse en su contra, y que la indignación de amplios sectores de la población mermara la legitimidad de su monopolio de los gobernantes sobre el uso legítimo de la violencia que mantiene un sistema de explotación y opresión.

POR ESO en este caso decidieron entablar cargos contra esos policías asesinos. Y por eso, desde el momento en que lo hicieron, también tramaron para dejar salir libres a esos cerdos policías.

Un encubrimiento criminal

Hay una sola manera de entender la forma en que procesaron a Goodson: UN ENCUBRIMIENTO CRIMINAL DE PARTE DE UN SISTEMA CRIMINAL.

El juez hizo del caso seis juicios diferentes, dividiendo el crimen en pedacitos y encubriendo la verdad, para permitirles, como dijo Carl Dix, salir bajo un “plan de cuotas”. El fiscal se apoyó en el testimonio de cerdos policías — los que en el primer juicio, una y otra vez, supuestamente al dar testimonio a favor de la fiscalía, en realidad socavaron las pruebas, si es que hubiera, que presentó la fiscalía.

El sistema puso a un juez negro —Barry Williams— al frente del juicio, y lo promovió como alguien que procesó casos de brutalidad policial cuando trabajaba para el Departamento de Justicia de Estados Unidos (DOJ), queriendo aprovechar de la fama nada merecida de que, de vez en cuando, el DOJ se opone a la brutalidad policial.

Al concluir esta repugnante farsa de “juicio”, el juez decidió que “no se presentaron pruebas” de que Goodson “sabía o debiera haber tenido conocimiento de la angustia aguda en la que pudiera haberse encontrado el Sr. Gray en ese momento” y que tampoco se presentaron pruebas de que existe algo como un “aventón fuerte” o que uno ocurrió.

¿Cuál ES la solución?

¿Qué clase de sistema monta un juicio en el cual jamás comparecen en el juzgado la verdad o la justicia, especialmente cuando uno de sus matones de azul mata a un hombre negro? Se trata de un sistema que emprende guerras injustas de terror, que denigra y oprime violentamente a las mujeres, que ha declarado temporada de caza a los inmigrantes y que destruye al medio ambiente a un ritmo frenético. Y se trata de un sistema que los policías RESPALDAN Y REFUERZAN tal como en el caso de Freddie Gray, y un sistema judicial que les da luz verde para hacerlo.

Y es un sistema para el cual EL TIEMPO YA SE ACABÓ. Un sistema que no se puede enderezar. Que requiera UNA REVOLUCIÓN, Y NADA MENOS.

¿Qué quiere decir esto en este momento? Empieza aquí: “El Partido Comunista Revolucionario VIENE ORGANIZANDO AHORA CON EL FIN DE DERROCAR EL PRESENTE SISTEMA A LA MAYOR BREVEDAD POSIBLE. Se prepara para liderar una revolución concreta a fin de hacer nacer una sociedad radicalmente nueva y mejor: la Nueva República Socialista en América del Norte”. Ese mensaje está en esta página web. Éntrele. Métase en eso. Afíliese al Club Revolución.

Lo que hace falta eres TÚ.

 

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