El quemador de la bandera, Gregory Johnson: "Las revelaciones evidencian que las acusaciones de la fiscalía que resultaron de la protesta ante la Convención Nacional Republicana son falsas y deben ser retiradas de inmediato"

10 de agosto de 2016 | Periódico Revolución | revcom.us

Gregory “Joey” Johnson —cuya batalla exitosa en el caso ante la Corte Suprema Texas v. Johnson estableció que la quema de una bandera de Estados Unidos en protesta constituye la expresión protegida— dice que son falsas las acusaciones de que él hubiera agredido a dos “periodistas” cuando quemó una bandera fuera de la Convención Nacional Republicana el 20 de julio de 2016. Johnson dijo que Kimberly Barnett, la Asistente Mayor Interino de la Fiscalía, División Criminal, no tiene más remedio que retirar los cargos de asalto presentados en su contra.

Burning the U.S. flag outside the Republican convention
Johnson con el apoyo del Club Revolución quemó la bandera de Estados Unidos fuera de la Convención Nacional Republicana en protesta por el chovinismo tóxico y las ideas reaccionarias de todo tipo que acompañaban la candidatura de Trump.

Johnson con el apoyo del Club Revolución quemó la bandera de Estados Unidos fuera de la Convención Nacional Republicana en protesta por el chovinismo tóxico y las ideas reaccionarias de todo tipo que acompañaban el nombramiento de Trump. La policía de Cleveland y otras fuerzas de la ley atacaron de inmediato la quema de la bandera, agarraron en una llave de estrangulación a Johnson y luego arrestaron brutalmente a otros 16 manifestantes que realizaban una protesta pacífica.

Johnson declaró que los fiscales están inventando, después de lo sucedido, una justificación del ataque policial contra él y los otros manifestantes durante esta quema de la bandera porque según lo establecido por Texas v. Johnson, no podían arrestar a nadie legalmente ni presentar cargos por quemar la bandera.

La acusación afirma que Johnson agredió a dos periodistas que supuestamente sufrieron quemaduras por las brasas de la bandera. Se ha confirmado a partir de informes de la policía que estos dos “periodistas” de ninguna manera eran periodistas, sino partidarios de Trump que pretendían impedir la quema de la bandera porque lo consideraba “anti-estadounidense”.

En un video publicado el 20 de julio de 2016 por Infowars, un sitio web dirigido por Alex Jones, los “periodistas” se jactan de haber agredido a Johnson en un intento violento de impedir que quemara la bandera: “Le rasgamos la camisa [a Gregory Johnson] y le dimos puñetazos y patadas, hombre... hicimos todo lo que pudimos”.

Todo esto demuestra que los cargos contra Johnson carecen de fundamento fáctico. Los cargos se derivan de las alegaciones de personas que admiten ellas mismas que intentaron impedir lo que se supone que es la expresión protegida por la ley, que es un acto ilegal de su parte. Encima se jactan de haber cometido asalto con agresión contra Johnson, otro acto ilegal. ¡Sin embargo es a Johnson que le acusan de agredir a estos dos!

Ahora, Johnson y los RNC16 (en su gran mayoría militantes del Club Revolución detenidos durante la quema de la bandera) se encuentran frente a cargos graves. Johnson y sus partidarios exigen que los cargos contra él y los RNC16 sean retirados inmediatamente.

La detención de Johnson por otra quema de la bandera, fuera de la Convención Nacional Republicana de 1984, resultó en la decisión de la Corte Suprema de Estados Unidos que en Texas v. Johnson en 1989 creó jurisprudencia cuando la Corte dictaminó que la quema de la bandera en protesta constituye la expresión protegida por la Primera Enmienda. Está bien establecido legalmente que alguien que no está de acuerdo con el contenido de dicha expresión no puede impedir esa expresión legalmente.

Los partidarios están circulando una declaración que exige que las autoridades de Cleveland retiren los cargos contra Johnson y los RNC16.

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