Un nuevo proyecto de ley en Arizona prohibirá cursos, clases y actividades universitarias que promuevan la justicia social
19 de enero de 2017 | Periódico Revolución | revcom.us
A solo unos días de que el régimen Trump-Pence asuma el poder, en Arizona han entablado un proyecto de ley que prohibiría todo curso, clase, evento o actividad universitaria que promueva la “justicia social hacia una raza, un género, una religión, afiliación política, clase social u otra clase de gente” o que comente sobre “el privilegio de la piel” o igualdad racial. Si este indignante proyecto de ley llega a ser ley, la escuela que no cumpla se sometería a que le recorten hasta 10% de la ayuda estatal que recibe. También prohibirá cursos y eventos “ideados principalmente para alumnos de un grupo étnico en particular”, o que promueva “solidaridad” que se basa en la etnicidad, la raza, la religión o el género. De ser aprobada, departamentos enteros podrían encarar acusaciones de no cumplir con estas nuevas normas.
En el 2010, la legislatura de Arizona aprobó una ley que clausuró las clases en secundarias sobre estudios méxico-americanos — en un estado en el que el 44% de los estudiantes son latinos. Este proyecto de ley intensifica y agrava el ataque. Es una declaración de que la libertad académica y los derechos de la Primera Enmienda —las ideas que los estudiantes y los maestros explorarán lo que debatirán, y promoverán públicamente en las universidades de Arizona— serán subordinadas ante quienes detentan el poder, que también determinarán qué ideas valen la pena y contribuyen a sus metas sociales.
Este proyecto de ley no es un fenómeno aislado sino algo que indica hacia dónde van las cosas. En las universidades a lo largo y ancho del país, grupos reaccionarios han atacado a profesores y a cursos que les parecen que ponen en tela de juicio el excepcionalismo estadounidense y minan los “valores tradicionales” — en particular, el dominio patriarcal y la supremacía blanca. Por ejemplo, una página web que se llama “Professor Watchlist” (vigilar a los profesores), ha publicado los nombres de 160 profesores que ellos acusan de promover “propaganda izquierdista” y de “discriminar” contra estudiantes derechistas. Todo esto cuadra con la agenda que el régimen fascista de Trump-Pence se prepara para desatar. Lo que se está viendo hoy en Arizona —un preludio de lo que será lo normal en este país si se permite que este régimen se consolide en el poder— es que el poder descarado dictará la “narrativa” que se le enseñará a la juventud sobre la historia de este país y la realidad actual.
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