El discurso de Trump al Congreso:
¿“Algo con el cual podemos trabajar…”? ¡PARA NADA, CARAJOS! ¡A expulsar a este fascista!

6 de marzo de 2017 | Periódico Revolución | revcom.us

 

El martes 1º de marzo por la noche, Donald Trump dio su primer discurso como presidente ante el Congreso. Era un momento importante, al estilo de un discurso del “Estado de la nación”, y posteriormente los comentaristas y cabezas parlantes de los medios de comunicación elogiaron el nuevo tono de Trump y su invocación a la esperanza y la unidad. “Presidencial”… “apropiado para el cargo”. Hablando en el “dialecto del optimismo y la reconciliación”, reportó el New York Times. Un discurso profundamente diferente al de la inauguración, dijo CBS, “sin rabiar ni culpar”. Trump entró siendo ganador de una elección contradictoria y salió un presidente, declaró un comentarista de CNN.

¡Ya ni la jodan! ¿Trump suavizó un tanto el tono de sus embestidas y sus campañas de odio? Claro — ¡el tono! — con tal de apaciguar a la gente, volverla al rebaño y pintarse del “presidente de todo el pueblo”.

Pero, ¿qué dijo en realidad? Intensificó los elementos centrales de su programa fascista: su satanización y embestida racista contra inmigrantes; sus amenazas (envueltas en consejos paternalistas al estilo mafioso) contra los negros y otros en las zonas urbanas marginadas; su xenofobia y chovinismo de “America First” “über alles”; el abandono de cualquier pretexto de desacelerar la destrucción carnívora del medio ambiente por el imperialismo; su plan to rehacer radicalmente la sociedad estadounidense en la imagen de un fascismo cristiano horripilante, que incluye arrasar con la educación pública; y más. “Lo más destacado”, declararon todos, era la beatificación de un SEAL (militar de operaciones especiales) de la armada estadounidense, que murió cometiendo crímenes de guerra — que va de la mano con la escalada militar monstruosa y asesina de Trump. En breve, era una gran mentira fascista tras otra, lo de siempre, pero envueltas en un paquete más “unificador”, más “optimista” — pues al estilo del optimismo de Hitler cuando habló de un Reich que duraría mil años y de la gloria de la raza aria.

No es más que un truco favorito del libro de jugadas fascistas caga-mente de alternar entre amenazar y tranquilizar, diseñado para el propósito específico de incorporar y embaucar a los que siguen ilusionándose de que todo lo que pasa sea una pesadilla de la cual se despertarán, y de Trump vaya a reaccionar y dejar de ser, pues, un fascista.

¡Ni locos! ¡Trump lo ha puesto más claro que el agua para cualquier persona que no tenga los oídos tapados! Incluso con ese supuesto “tono”, Trump seguía lleno de arrogancia engreído y amenazante — como algún tipo de mutante mezcla monstruoso de Adolph Hitler, Tony Soprano, y un gran mago del KKK.

Odio, intolerancia, y belicismo

Trump empezó condenando los recientes ataques contra centros comunitarios y cementerios judíos y el asesinato de un inmigrante de India en Kansas. “Somos un país que se mantiene unido al condenar el odio y el mal en todas sus formas muy feas,” declaró. Unos segunditos de retórica, sin ninguna acción específica, ¡seguidos por una hora de ataques odiosos, descarados o apenas ocultos, contra sectores enteros del pueblo, y del mundo!

“Mi cargo no es de representar el mundo. Mi cargo es de representar los Estados Unidos de América,” fanfarroneó. Echó una mentira de las más peludas de que Estados Unidos “ha exportado nuestros empleos y nuestra riqueza a países extranjeros”, siendo en realidad el predador número uno del mundo entero, que se ceba de explotar y saquear países por todo el mundo. De ahí juró violencia contra los que se resistan a que Estados Unidos se ponga a robar el planeta aún más agresivamente —con uno de los mayores aumentos en el presupuesto militar en la historia estadounidense— por el valor de $54 mil millones. Su promesa de aniquilar al “terrorismo islámico radical” era una amenaza directa a muchísimos millones de personas en el Medio Oriente y más allá,

Y, en uno de los momentos más repugnantes de muchos momentos repugnantes, en un tributo al estilo Núremberg* a Ryan Owens, el SEAL de la armada, Trump beatificó a ese asesino de operaciones especiales que fue muerto en una misión-masacre en Yemen que masacró a 25 civiles, entre ellos nueve niños de menos de 13 años… glorificándolo como un “guerrero y héroe” cuyo “legado es grabado en la eternidad”. Que se olviden de que la violencia apoyada por el imperialismo yanqui ha dejado a más de 14 millones de personas en Yemen al borde de la inanición. El rito de Trump consagró MÁS agresión estadounidense contra países que ni siquiera están en guerra con Estados Unidos.

Trump también reafirmó el mello de su prohibición a musulmanes: “No podemos permitir que se forme una cabeza de playa del terrorismo dentro” de Estados Unidos, rugió. Como si todo musulmán que viniera a Estados Unidos fuera un sospechoso de terrorismo.  Además, en el conflicto entre el yihadismo reaccionario fundamentalista islámico y el Occidente, ¿quién es el que tiene la asombrosa mayoría de cabezas de playa? Puerco desgraciado, los imperialistas yanquis tienen cabezas de playa terroristas por todo el mundo. Se llaman bases militares y portaaviones estadounidenses.

Unidad especial “VOICE” de Trump, un calque directamente de la Alemania nazi

Trump intensificó aún más su asalto contra los inmigrantes. Dijo que han robado empleos y se ha aprovechado de Estados Unidos. Qué mentira más peluda, siendo los inmigrantes a los cuales los han explotado, marginado, aprovechado y robado sin piedad para enriquecer a Estados Unidos. “Hemos defendido las fronteras de otras naciones mientras dejamos nuestras propias fronteras muy abiertas para que cruce el que quiera”, dijo, y que necesitamos un “gran, gran muro”. ¿Que qué? ¿Estados Unidos defendió la frontera de México robándole la mitad de su territorio en la guerra de 1848 contra México? ¿La frontera de Irak bombardeando, invadiendo, y matando a millones de iraquíes? ¿Las de Yemen, Paquistán, Libia, Somalia, y docenas de otros países bombardeándolos desde aviones no tripulados y mandando asesinos de las Fuerzas Especiales? Es más, Estados Unidos ya tiene un muro —un muro de más de 20.000 agentes de la Patrulla Fronteriza y la Aduana, vallas, paramilitares— que, como política consciente, obligan a personas desesperadas a cruzar por los desiertos mortíferos en busca de seguridad y sustento. Desde 1994, se han encontrado los cadáveres de más de 7.000 seres humanos en la zona fronteriza, la mayoría en Arizona. Los expertos estiman que de cada cadáver que hallen, dos personas más han muerto y sus restos quedan enterrados en las arenas desérticas.

       

El “muro” de Trump representa tanto una frontera aún más militarizada y mortífera, como una “frontera” ideológica que separa a las personas en Estados Unidos de los demás seres humanos — para justificar una atroz satanización/deshumanización de “encerrarlos y desecharlos”, y asaltos y pogromos contra “el otro, el de color”. 

Trump mostró ante el público nacional televidente cómo se ve esa ideología —azuzando una turba como de linchamiento, tildando a inmigrantes de asesinos, señores del narco, y delincuentes— trayendo a “familias de víctimas” a su discurso como utilerías. De ahí anunció que está estableciendo una unidad especial, VOICE (Voz) —por sus siglas en inglés, “Victims of Immigrant Crime Engagement” (Víctimas de crímenes cometidos por inmigrantes”) —para investigar (es decir, inventar, publicitar, y azuzar turbas linchadoras contra) crímenes cometidos por inmigrantes indocumentados, crímenes los que la prensa supuestamente se niega a cubrir. Esa maniobra hace eco a la práctica nazi de publicitar crímenes, sean reales o alegados, por judíos, en un momento en que los nazis los sacaban de empleos legales y a circunstancias desesperadas.

Intensifica la violencia contra el pueblo negro en nombre de parar la violencia

Trump amenazó de forma ominosa un asalto que se avecina contra el pueblo negro, al hablar de romper el ciclo de pobreza rompiendo el ciclo de violencia —que “no es aceptable”, amenazó.

No es aceptable, en realidad es “descorazonador”. La declaración Del Comité Central del Partido Comunista Revolucionario a TODA la gente: Lo que el régimen de Trump y Pence implicará para el pueblo negro — y lo que hay que hacer al respecto, ¡YA! dice: “No es ningún misterio por qué ocurren estos asesinatos descorazonadores. De mil formas, el sistema le dice a todo un sector de la juventud, a millones, que no valen nada. Viven en comunidades destrozadas sin futuro. Sin manera de ser alguien salvo en la vida pandillera de la calle y el código de venganza. El más reciente eslabón en una cadena que remonta atrás 400 años”.

El programa de Trump hace que esas cadenas sean mucho pero mucho peores. Dice que la solución es celebrar, apoyar, trabajar y colaborar con la misma policía que ya asesina y aterroriza a los negros y que muy a menuda fomenta esa violencia entre el pueblo, tanto directa como indirectamente.

Trump dijo que los agentes de seguridad se preocupan cada día de que si vayan a regresar o ni a casa seguros y sanos (al aplauso de los demócratas, entre ellos John Lewis), pero no dijo ni pio de los jóvenes y los padres que se preocupan cada día —millones y millones de ellos— de que si vayan a regresar a casa con vida por ir a la tienda de la esquina. Y ¿qué de las prisiones repletas hasta desbordarse de los 2.3 millones de presos — con eso de que Trump y su Gran Dragón —ay perdón, el fiscal general— Sessions ahora prometiendo más prisiones, con aún más presos?

Ataca la educación pública… en aras de institucionalizar el fascismo cristiano y sofocar el pensamiento crítico

“La educación es el tema de los derechos civiles de nuestro tiempo”, Trump declaró, al reclamar más “opciones” escolares, incluidas las escuelas religiosas y educación en el hogar. Eso no es más que una demanda de recortar drásticamente las escuelas públicas, atacar los sindicatos de maestros, y canalizar los fondos y el apoyo a las escuelas religiosas como un medio de institucionalizar el fascismo cristiano y sofocar el pensamiento crítico.

Trump presenta una fantasía de escuelas urbanas “bien financiadas”, pero en las zonas urbanas marginadas de Chicago, han cerrado docenas de escuelas, y el gobernador trumpista ha recortado tan feo los fondos a la Universidad del Estado en Chicago (que sirve a muchos estudiantes de color) que sobrevive a duras penas, y ahorita hablan de terminar dos semanas más temprano este año por falta de fondos. Con DeVos como la secretaria de educación bajo Trump, el plan es de canalizar a esos estudiantes a escuelas fundamentalistas cristianas subvencionadas, que son diseñadas para extinguir el espíritu crítico y convertir a los estudiantes en autómatas robóticos. 

¿De ahí qué hicieron los demócratas… el partido de la “resistencia” y el “no”? Muy poco, al parecer…

Bueno, y ¿qué de los demócratas que —recién— andan hablando pesado? ¿La “oposición”? ¿El partido que supuestamente iba a resistirse a Trump con uñas y dientes? Pues una bola de colaboradores llorones maromeros. Bernie Sanders aplaudió las promesas de Trump de reconstruir la infraestructura, aplaudió la construcción de oleoductos con acero estadounidense, y aplaudió aún más entusiasta la mentira de Trump de que no iba a permitir que el capital estadounidense huyera —como si ese capital pudiera hacer otra cosa más que peinar el planeta en busca de la máxima rentabilidad y la ventaja estratégica. Sí, Bernie Sanders criticó otras partes del discurso de Trump, pero ¿qué implica dar “apoyo crítico” a un fascista? ¡¿Hubiera sido correcto expresar dudas acerca de Hitler por exterminar a los judíos, pero unirse con él a la medida que sus obras públicas y militarización de la sociedad crearan empleos para los alemanes?!

A veces los demócratas quedaron impasibles, pero otras veces aplaudieron — especialmente en pro de la OTAN, la alianza militar más grande, más mortífera, y con armas nucleares, del mundo… Todos estaban de acuerdo de que era un momento conmovedor honrar al fallecido SEAL de la Armada (el asesor de campaña de Obama dijo después que sólo un muerto no apreciaría lo especial que era el momento con la viuda del militar. Cabe repetir, hablamos de un participante en una misión que asesinó a nueve niños). Pero todos los demócratas pueden estar de acuerdo con apoyar a las tropas — son parte del mismo sistema con los republicanos, parte del mismo imperio, aspirantes a dirigir a las mismas tropas que masacran. Todos se alborotan con lo más feo del feo chovinismo yanqui. Al fin y al cabo, ¿se acuerdan de lo que dijo su gran líder Obama después del triunfo electoral de Trump? “Tenemos que recordar que, de hecho, todos estamos en un solo equipo”. Y las diferencias entre demócratas y republicanos son un “juego intramural”.

Y ¿a quién escogieron los demócratas para presentar su “refutación”? Un político que se declara un mejor representante de la base social de Trump —cristianos reaccionarios, blancos, rurales— que trata de ser aún más patriotero y de complacer aún más a los intereses económicos de los moradores de la capital del imperialismo mundial.

Y de ahí le entra Van Jones de CNN (y otros comentaristas liberales). Jones declara que, si bien discrepa con Trump sobre políticas, reconoce que sí, era un discurso de maravilla. Que ojalá que Trump fuera así durante cuatro años y no sólo una hora — como si el problema fuera el tono de Trump y ni su fascismo completamente ilegítimo. ¿¿Quién iba a querer eso, caray?? Después aconsejó a los demócratas que tienen que aprender a decir “sí” de vez en cuando; al cabo, habían pedido a Trump que hablara más bonito, y ya lo hizo. Pero para colmo Van Jones dice que el rito con la viuda de la SEAL de la Armada debe servir como un “reinicio” para el movimiento progresista. ¡Cabrón! ¡Eso no es más que capitulación y acomodación cobarde al fascismo! Van Jones se dobló tan exageradamente para acomodarse a esos fascistas que al parecer metió la cabeza en el culo.

¿“Dividido”? ¡A güevo el país está dividido — sobre ser FASCISTA o no!

Trump pidió unidad — sobre sus términos y en torno a su programa: “Demócratas y republicanos deben acompañarse y unirse por el bien de nuestro país y por el bien del pueblo estadounidense”.

Detrás de sus invocaciones estaban las amenazas, la esencia de la retórica fascista de que cualquier crítica, ni hablar de resistencia, al fascismo, “nos divide”.

Pues, fíjate, Señor Aspirante a Führer —efectivamente, SÍ somos “divididos”—en un mundo de explotador y explotado, en opresor y oprimido, y hoy día en los que queremos resistirnos Y DERROCAR ese fascismo, y los que o luchan POR ello o se le rinden. Y los que no quieren ir por ese rumbo que tú estás forjando, deben ser comprometidos a denunciar la mierda por lo que es, y hacer lo imposible para derrocar esa locura antes de que sea tarde.

Fíjense nada más en todo ese salón, en toda esa función. Qué pantano más tóxico, que lejos de ser vaciado (como prometió Trump) se está llenando más, y ¡qué sistema más tóxico y totalmente ilegítimo! Un sistema que no sólo otorga a un demagogo fascista una plataforma nacional para echar sus mentiras, y tratar de popularizar un programa completamente reaccionario, hostil y fascista, sino también el poder del estado para implementar ese programa. Un sistema apropiadamente representado por este salón lleno de monstruos. Un sistema que en este mismo momento está devastando el planeta y poniendo en peligro su misma sobrevivencia como uno de los raros planetas habitables que los astrónomos buscan entre millones de años luz de espacio.

Parecía un mitin de Núremberg, con la asistencia de la supuesta oposición para legitimarlo — no hubo nada en ese salón en ningún lado del pasillo para las masas ni para la humanidad.

Entre todo eso, entre toda la prueba de que eso es fascismo, más razón hay de que es necesario expulsar este régimen, y más se comprueba que no podemos depender de los canales de siempre ni de que lo hagan los líderes del Partido Demócrata.


* Núremberg era la ciudad en Alemania donde Hitler hizo muchos mítines espectaculares nazis, y también la sede de los juicios a líderes nazis por crímenes de guerra después de la Segunda Guerra Mundial. [regresa]

 

 

Se necesitan: Voluntarios para revcom.us y Revolución

Envíenos sus comentarios.

Si le gusta este artículo, suscríbase, done y contribuya regularmente al periódico Revolución.