Manifestantes antifascistas contra mitin neonazi en Pikeville, Kentucky

1° de mayo de 2017 | Periódico Revolución | revcom.us

 

El sábado 29 de abril, decenas de neonazis y supremacistas blancos, muchos de ellos armados, organizaron un mitin en Pikeville, Kentucky. Los confrontaron al menos un número igual de antifascistas desafiantes que se oponían a las maniobras de las autoridades para intimidarlos y reprimirlos. Y denunciaron los llamados de algunas fuerzas de la localidad para retroceder ante las amenazas nazis.

Pikeville es una ciudad de 7.000 habitantes, cerca del límite entre los estados de Kentucky y Virginia del Oeste. Se encuentra en la región principalmente rural de los montes Apalaches a horas de distancia de cualquier gran ciudad. La población es 98% blanca, y votó el 80% por Trump. En respuesta al plan nazi de reunirse en Pikeville, algunas fuerzas de la localidad convocaron a un “Mitin por la Igualdad y los Valores Estadounidenses — Una Manifestación Pacífica Contra una Ideología Odiosa”. Pero cuando los fascistas armados amenazaron al “Mitin por la Igualdad...”, los organizadores de la manifestación antifascista, en virtud de la recomendación de la policía de la localidad, canceló su acto. El rector de la Universidad de Pikeville emitió una declaración que equiparó a los nazis con los antinazis. Canceló las clases, animó a los estudiantes a salir de la ciudad y les dijo que no fueran al centro. Las autoridades de la localidad aprobaron una ley especial que prohibiera las máscaras y las capuchas: explícitamente singularizaban a los manifestantes antinazis, y para justificarlo, invocaron las protestas del 20 de enero en Washington, D.C.

Frente a esta intimidación, y la capitulación de algunas fuerzas, unos activistas antifascistas volantearon la ciudad de Pikeville. Retaron a la gente a enfrentarse a los nazis. Su declaración dice, en parte:

“A la gente de los montes Apalaches, no podemos dejar que triunfen el odio y el miedo. No dejaremos que el miedo impida que protejamos a nuestra comunidad contra estos nazis. Aún estaremos en el centro de Pikeville el sábado para mostrarles a estos supremacistas blancos que su odiosa y violenta ideología no es bienvenida aquí. Les pedimos que se unan a nosotros en las calles de Pikeville el sábado para tomar una posición contra estos nazis que hacen presa de nuestra comunidad. Juntos, tenemos más fuerza. Ellos se reunirán en las escalinatas del palacio de justicia a las 2 p.m., y nosotros estaremos ahí, por favor únanse a nosotros. No les mentiremos. Estos grupos representan una verdadera amenaza de violencia, pero la historia nos ha enseñado que no es posible contrarrestar el ascenso del fascismo con meras palabras corteses de desaprobación”.

Y su declaración concluye: “Juntos, podemos mostrar que los habitantes de los Apalaches están unidos por un mundo donde todos son iguales. Nos veremos en las calles este sábado”.

El día 29, ante el constante hostigamiento de la policía y las maniobras para acorralarlos, más de un centenar de personas, en su inmensa mayoría blancas, enfrentaron desafiante y creativamente a los nazis en el centro de Pikeville. Entre los letreros había: “Nadie los quiere aquí”, “Antifascistas de todo el mundo, uníos”, “La vida de los negros importa”, “Hagan que los racistas vuelvan a tener miedo” y “Rednecks [gente blanca rural] contra el racismo”.

La valiente acción hizo una declaración muy importante en las narices del Estados Unidos de Trump y de los vampiros y golpeadores envalentonados por el régimen.

 

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