NUESTRAS DEMANDAS

18 de noviembre de 2017 | Periódico Revolución | revcom.us

 

El huracán María suscitó una crisis en Puerto Rico. Hay una cascada de múltiples crisis de salud pública; millones viven desesperados como resultado de la pobreza y la pérdida de trabajos; María dañó o destruyó una gran parte de la red de energía eléctrica, el sistema de purificación y suministro de agua potable, los hospitales, las escuelas, la vivienda, las carreteras, los puentes y otros elementos de la infraestructura. Todo esto ha sido agravado inconmensurablemente por la negligencia racista e intencional infligida por el régimen de Trump y Pence. Un desastre natural de proporciones épicas se ha convertido deliberadamente en una catástrofe con implicaciones genocidas. Circulen y discutan estas demandas entre la gente en Puerto Rico y en el continente estadounidense; que sean un eje de protesta y lucha.

NUESTRAS DEMANDAS

  • Que de inmediato se utilicen todos los recursos del gobierno estadounidense para suministrar y distribuir, a expensas de ese gobierno, todos los alimentos y ropa necesarios a la gente de toda la isla. Que se mantengan y continúen los servicios médicos tanto de emergencia como de largo plazo, y se implementen todas las medidas necesarias para evitar epidemias masivas y muertes innecesarias, y que se traten trastornos post traumáticos y otros problemas de salud mental. Que se preste atención especial para garantizar que esa ayuda llegue a las muchas zonas remotas de Puerto Rico.
  • Que el gobierno estadounidense emprenda de inmediato esfuerzos masivos de restaurar el suministro confiable de electricidad en toda la isla, sin la cual a diario la vida y bienestar de millones de personas corre peligro.
  • Que se abastezca a todos de suficiente agua potable. Que se provea a la población servicios gratuitos para comunicarse con familiares, dondequiera que viva. Nadie, bajo ninguna circunstancia, que se lleve los recursos necesarios para su supervivencia, será baleado, arrestado o castigado de ninguna forma. Que se provea SIN COSTO todos los artículos de primera necesidad.
  • Que la provisión de albergue digno y seguro para todos sea una alta prioridad, con la utilización de las estructuras existentes del gobierno y de particulares, o de ser necesario, que se construya albergue nuevo, hasta que sea posible construir vivienda nueva para todos. La nueva vivienda en las zonas urbanas o rurales debe construirse de manera que maximice su capacidad de resistir futuras tormentas.
  • Que los noticieros informen plenamente sobre la situación de la gente y sus puntos de vista, con acceso de la gente misma a los medios informativos y la oportunidad de contar sus propias historias.
  • A expensas del gobierno estadounidense, que se cubran los costos del transporte para la gente que quiere dejar la isla e ir al continente estadounidense. Igualmente, que la gente en el continente estadounidense que quiera ir a la isla para ayudar en la reconstrucción o ayudar a sus familiares, disponga de transporte a Puerto Rico y albergue durante su estancia ahí.
  • Que no especulen ni lucren con la miseria de la gente los tiburones de las empresas de electricidad, compañías de seguros, monopolios petroleros, promotoras inmobiliarias, etc.
  • Que se elimine la Ley Jones, una ley de hace un siglo que requiere que todos los buques que transportan carga comercial entre puertos estadounidenses y Puerto Rico sean buques estadounidenses, lo cual eleva sustancialmente el costo de casi todo en la isla. Que se cancele inmediatamente la deuda de Puerto Rico, la que es el resultado de 120 años de despiadada explotación del pueblo puertorriqueño y de enormes daños al medio ambiente de la hermosa isla por Estados Unidos. Que se reconstruya completamente el sistema educativo, del nivel primario a la universidad. Que se ofrezca trabajo digno a todos los adultos que quieren trabajar.

Que continúen estas medidas por la duración de la crisis.

 

 

 

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