Samantha Bee no tiene que pedir disculpas para NADA
6 de junio de 2018 | Periódico Revolución | revcom.us
Samantha Bee: No tienes que pedir disculpas para nada.
Si de veras te sentiste tan conmovida, podrías haber dicho algo como: “Puedo ver por qué algunas personas que sinceramente se oponen a la opresión de las mujeres pueden recular ante el lenguaje que usé. Pero alguien debe decir algo que desnormaliza los crímenes horribles y verdaderamente genocidas cometidos por el régimen de Trump y Pence, crímenes que normaliza gente como Ivanka Trump. Ella es una criminal a escala gigantesca. Usé un epíteto feo para mostrar una fea verdad. Lo que es realmente vil y malicioso es sostener en alto a los bebés blancos como objeto de aprecio mientras la administración para la que usted trabaja arrebata bebés de color a sus padres, los mete en las fauces de los ‘centros de detención’ y hace cosas peores. ¿Mis palabras te sacudieron? Bueno, estos crímenes de Trump y Pence DEBERÍAN sacudir la conciencia de una manera mucho, mucho mayor, y ¿dónde está la protesta por ESO?
“Así que, no, NO pediré disculpas por agitar el ambiente, y de hecho usaré mi plataforma, mientras la tenga, y créenme, lucharé por cada centímetro de ella, para obligar a la gente a mirar la fea verdad, cuya realidad es mucho más fea que cualquier cosa que expresé en lo que dije sobre Ivanka Trump. NO está en contra de la ley gritar “¡FUEGO!” en un teatro lleno cuando el teatro está en llamas. ¡Y ahora el maldito teatro es un gigantesco infierno!
“Finalmente, la hipocresía de la administración de Trump de Pence —cuyas políticas realmente tratan a las mujeres como nada más que ‘putas’, nada más que el canal para un bebé o algo que gente como Degenerado-en-Jefe agarra para mostrar su dominio— al fingir indignación por esto, ni valdría la pena mencionar, si no fuera por el hecho de que pocas personas lo han hecho”.
Así que, Samantha Bee: aprende de Kathy Griffin y retira tu disculpa.
Cuentas con nuestro apoyo.
Se necesitan: Voluntarios para revcom.us y Revolución
Si le gusta este artículo, suscríbase, done y contribuya regularmente al periódico Revolución.