Tras escuchar a BA… Pensamientos y una respuesta

28 de febrero de 2013 | Periódico Revolución | revcom.us

 

Queremos compartir con los lectores unos pensamientos y comentarios de una persona que vio un corte borrador de la película: Habla BA: REVOLUCIÓN — ¡NADA MENOS! y la reacción de un maestro tras escuchar la entrevista que hizo Cornel West con BA.

 

Porque los que no somos comunistas (tú y yo) debemos ver la película Habla BA: REVOLUCIÓN — ¡NADA MENOS!

Ahí les va lo que yo tengo para decir. Siéntanse libres de usarlo si les sirve.

Acabo de ver las primeras dos horas, de seis, de Habla BA: REVOLUCIÓN — ¡NADA MENOS! Fue como zambullirse en un estanque muy azul, muy helado. Salí temblando, triste, enojado, y bien preocupado. Sobre mi vida y la vida de todos.

Se me ocurrieron dos cosas bien extrañas durante las próximas horas. La primera es de Juan 8:32: “y conoceréis la verdad, y la verdad os hará libres.” La segunda es la alegoría de Platón sobre la cueva, en la cual Sócrates describe un grupo de personas que han pasado toda la vida encadenadas a la pared de una cueva, mirando hacia la pared. Ven las sombras que se proyectan sobre la pared cuando cosas pasan en frente de una fogata que queda atrás de las personas. Sócrates nos dice que el filósofo es como un preso que se ha liberado de la cueva, que puede salir, por fin, a la frescura de la verdad, del mundo real.

El análisis de Bob Avakian rompe el estrecho marco en el cual nos manipulan. Presenta el panorama general de la Civilización Occidental y el Capitalismo — vaya qué historia más corrupta y trágica. El señor Avakian nos dice la verdad, nos despierta a la realidad. Nos insta a darnos cuenta de que la cultura, a la cual respiramos como el aire, en la realidad sirve para cegarnos, adormecernos, amarrarnos y usarnos, por medio de sus diversiones, distracciones y coacciones. Qué espantoso reconocer cómo nos hemos cautivado con el adquirir y el gastar. Cómo nos hacen pelear entre nosotros en vez de pelear contra la matriz monstruosa que encierra a todos por igual.

Así que, el primer paso hacia la libertad es de conocer la realidad. Y la realidad nos duele, porque empezamos a captar cómo nos han engañado, cómo nos hemos dejado embaucar y manipular. Pero, ahí está. Primero hay la satisfacción adulta de enfrentar la realidad. Eso es bueno en la política, el arte y la vida personal. El vivir de verdad y la libertad verdadera tienen que empezar con lo real.

¿Qué sigue? Bueno, faltan cuatro horas más de Bob Avakian en vivo que todavía no he visto. Me interesa mucho pero mucho ver qué es lo que él piensa que se puede hacer, una vez que se haya captado la realidad. Por mí, no tengo la menor idea. Confieso que mi temperamento no cuadra con “las masas”. Las masas me dan miedo, me preocupo de que el individuo se encoja hasta volverse nada allí. No sé qué significa una “revolución”, ni cómo lograrla sin la anarquía. Pero, como dice el señor Avakian (y estoy de acuerdo con él): el mundo no está escrito en piedra; las cosas pueden ser diferentes a lo que han estado; la historia y el futuro no son la voluntad de Dios.

Al final, estoy abierto para escuchar y considerar. Me parece crucial. Todos saldremos ganando que nos salpique el agua clara y fría de la realidad.

 

Pensamientos de un maestro tras escuchar la entrevista de Cornel West a BA:

Cada persona que trabaja debe indignarse, a toda persona que quiera una vida digna debe ser obvio, y debe indignarse. [BA] está llamando la atención a lo obvio. A las personas no tenemos que contarles de los bancos, las ejecuciones hipotecarias, la brutalidad policial, el sistema educativo, la distribución desigual de la riqueza, el desempleo en las zonas urbanas marginadas, todo eso debe ser obvio. No solamente ocurre en Estados Unidos — miren a España, Portugal, Grecia, Italia: 50% de los jóvenes están desempleados, se les está quitando el seguro social y se está desmantelando toda la red de apoyo social y económico. Es un fenómeno global. No es un “error” sino un plan bien organizado de paralizar esas economías. No está ocurriendo espontáneamente nada más, y no es que se haya fracasado el capitalismo, sino que posiblemente el capitalismo esté entrando en una nueva fase, que incluya la destrucción de la clase media, el despojar a la clase media de su poder por todo el mundo. Se dirige por un rumbo diferente que encierra el control y la privatización de la educación pública y de los servicios de salud.

Este sistema nos enseña a “servir al imperio”, de que está bien matar a gente en nombre de la seguridad estadounidense. ¿Y que de la seguridad de las personas muertas? Pregunten a los niños en Palestina. Nos han enseñado a conformarnos con eso, el embargo económico de Irán que está estrangulando al pueblo iraní, la política genocida que resultó en la muerte de un millón de iraquíes. Bombardeamos, después invadimos, y la mayoría de los estadounidenses dicen, “Tengo muchos problemas míos, tengo que poner atención en mis propios recursos”. Esto es un fenómeno mundial bien organizado, y un aspecto de lo más importante es el miedo. Estamos perdiendo nuestros empleos, nuestro sustento, nuestros beneficios. Esto ocurre por todo el mundo. Nos han lavado el coco, debemos ser indignados.

Miren cómo hemos justificado la encarcelación en masa, la manera en que ponen en la mira y declaran “culpable” a los negros y latinos. Miren la educación, cómo ponen a los maestros a enseñar a ser “más productivos”, a servir al sistema económico; miren el papel de la religión, cómo ha enajenado a las personas. Tienen la magia a su disposición, la promesa celestial. Tratan de enseñarnos a vivir en un futuro imaginario, y no nos enseñan a cuestionar la experiencia vivida en la tierra: el cuestionar ese juego de creencias es revolucionario (a ver, ¡trata de entender cómo la violación es la voluntad de dios!).

[BA] está señalando que esta revolución comunista se basa en la ciencia, se opone a la fe y el dogma, y que las cosas no tienen que ser así como son. ¡Qué pasó con lo de la igualdad y de cuidarse y quererse unos a otros, no “que voy a cuidar de lo mío”! El mensaje central de BA es de educar a las personas sobre lo que está pasando y qué hacer al respecto. Como Frederick Douglass y Che, estaban exigiendo una sociedad justa. Las personas sí necesitan que se les dirijan: eso significa “enseñar” el camino adelante. [BA] está diciendo que si no te despiertas, te vas a quedar encadenado. Han adoctrinado tanto a los estadounidenses con propaganda anticomunista y antisocialista — es un obstáculo grande para la forja de un movimiento. Una emisión de este tipo hace mucha falta, puede contribuir a cambiar la atmósfera. Necesitamos una revolución. Nada menos que una revolución puede ponerle fin al camino por el cual se dirigen los capitalistas. ¿Cómo lograrla? Necesitamos más detalles concretos, más conocimientos de cómo se va a hacer.

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