Se intensifica la confrontación sobre el derecho al aborto: Fin al Patriarcado encabeza protesta desafiante contra la Caminata pro Maternidad Obligatoria

De alguien del Club Revolución y Fin al Patriarcado | Actualizado el 08/02/2014 | Periódico Revolución | revcom.us

 

San Francisco, 25 de enero de 2014.

Ante el auge del movimiento antiaborto encima de una oleada de nuevas leyes que dejan a las mujeres por todo el país desesperadas y atrapadas en embarazos no deseados, el movimiento Fin a la Pornografía y el Patriarcado: La Esclavización y Denigración de la Mujer (StopPatriarchy.org) encabezó una protesta ruidosa, animada y firme contra la décima marcha anual antiaborto en San Francisco. La marcha antiaborto se autodenomina la "Caminata pro Vida de la Costa Oeste" y trae en autobuses a decenas de miles de opositores religiosos al aborto para que desfilen por la calle Market en el centro de San Francisco protestando contra el fallo de la Suprema Corte que despenalizó el aborto en 1973 y exigiendo la abolición absoluta del derecho al aborto a nivel nacional. Esto ocurre además de la Marcha pro "Vida" original en Washington, D.C., para la cual los organizadores principales se empeñaron en "conectarse" y darles la bienvenida, aparte de los católicos de siempre, a los participantes y oradores fascistas cristianos, como Troy Newman de la organización brutal antiaborto Operation Rescue y James Dobson de Focus on the Family, el paladín de los valores opresivos de la familia "tradicional".

Fin al Patriarcado, tras un año de luchar a nivel nacional por la moralidad, la política y la consigna "¡Aborto a solicitud y sin disculpas!", pasó dos semanas movilizando en el Área de la Bahía de San Francisco en planteles universitarios, vecindarios y reuniones con activistas en pro de los derechos reproductivos y la justicia social. Convocamos a las personas a ponerse de pie y a oponerse abiertamente a la "Caminata pro Maternidad Obligatoria" el 25 de enero de 2014. Hablamos con centenares de personas —las que conocimos por medio del Viaje por la Libertad pro Derecho al Aborto en el verano de 2013 y también muchas personas que hace poco se están despertando a la situación intolerable en la que nos encontramos— respecto al estado de emergencia actual sobre el derecho al aborto. Explicamos la naturaleza concreta del movimiento antiaborto y el sistema patriarcal y el programa que le da credibilidad, la guerra general contra la mujer que arde en el mundo, la resistencia nacional que hace mucha falta que se apoye en la acción política independiente y proyecte claridad moral diciendo la verdad sobre el aborto y la verdadera revolución que hace falta para poner fin a la opresión de la mujer.

Nos enteramos que los universitarios, activistas y otros vienen reconociendo que está en marcha una embestida contra el derecho al aborto y que algunas de las personas, al captar más plenamente el alcance y la profundidad de la emergencia concreta, se horrorizan y se indignan. Para fines de 2013, ya se habían aprobado 70 restricciones al derecho al aborto a nivel estatal, cinco estados cuentan con una sola clínica quirúrgica del aborto, en Texas se aprobó todo un paquete de restricciones y la Suprema Corte lo ratificó, y muchísimas mujeres de las zonas rurales —y con mayor frecuencia en zonas más amplias del país— están orilladas a ser madres o tratar de abortarse con métodos ilegales y peligrosos. Denunciamos que se está volviendo a afirmar agresivamente un papel casi de esclava a la mujer, y que el futuro de la mujer está en juego. Afirmamos que confiar en el proceso político oficial —tales como los "representantes" demócratas y el sistema electoral— que está empapado del patriarcado, no sólo ha sido ineficaz sino que ha tenido un efecto desmovilizador y nocivo en el movimiento pro derecho a decidir.

El 22 de enero de 2014, con motivo del aniversario de Roe v Wade, Fin al Patriarcado del Área de la Bahía celebró una rueda de prensa y se paró codo con codo con la presidenta de NOW (Organización Nacional de la Mujer) de San Francisco, un(a) abogado(a) pro justicia civil y ambiental y representantes de Ocupar San Francisco, El Mundo No Puede Esperar y el periódico Revolución para denunciar las mantas de la Caminata pro "Vida" de la Costa Oeste que aún cuelgan de los postes del alumbrado municipales, la misma Caminata pro "Vida" y el movimiento antiaborto en conjunto. Las banderas declaran que "El aborto le hace daño a la mujer". Representantes de Fin al Patriarcado respondieron:

"Esta no es hora de quedarnos callados. La maternidad obligatoria es la esclavización femenina, lisa y llanamente. En realidad, la cuestión es: ¿La mujer debe tener la posibilidad de participar concreta y plenamente en la sociedad al lado del hombre, o la sofocarán, la amenazarán, la avergonzarán y la subyugarán al estado y a la dominación masculina?"

Y:

"El movimiento antiaborto nunca se ha tratado de salvar a bebés según dicen, pero se ha opuesto sistemáticamente al control de la natalidad y a la educación sexual concreta… porque siempre, en lo fundamental, se ha tratado de controlar a la mujer. Es mortífera la idea de que la mujer no es más que una paridera y de que es egoísta, inmoral o irresponsable si decide que no… Fin al Patriarcado convoca a toda persona que crea que la mujer debe contar con el derecho al aborto, que se sume a la lucha apoyando Aborto a Solicitud y Sin Disculpas. Fin al Patriarcado convoca a TI a que te pongas de pie, sin tregua, CONTRA la Caminata pro 'Vida' este sábado y más allá, con el mensaje de que esta generación más necesita oír: El feto no es un bebé, la mujer no es una incubadora y el aborto no es homicidio. Porque es la verdad".

¿¿"Resguardarnos"?? ¡Necedades!

El viernes 24 de enero, un día antes de la Caminata pro "Vida", una organizadora prominente pro derecho a decidir aconsejó, en la emisora radial KPFA, a los defensores del derecho al aborto que se quedaran en casa ese día. "Dado que esas gentes son fuereñas y no representan a los de aquí," dijo, "estamos recomendando, básicamente, a que no les hagan más caso de lo que haríamos por lo normal… Vendrán y gastarán su dinerito y después se irán. Y de ahí lo que nosotros tenemos que hacer en realidad es resguardarnos — entre los que captamos lo que esto implica concretamente para la mujer, y comunicar lo que sí creemos nosotros aquí en el Área de la Bahía".

Este modo de pensar es tan mezquino y tan elitista que debe dar vergüenza; sin embargo esa declaración concentra la posición inaceptable y la estrategia perdedora de muchas importantes organizaciones pro derecho a decidir en este momento. La estrategia de "resguardarnos" (o más bien, "agacharnos") y sus defensores se desentienden completamente el hecho de que la influencia del mensaje antiaborto está cobrando fuerza, en la cabeza de la gente y definitivamente en su efecto concreto sobre la vida de las mujeres y su acceso al aborto a nivel nacional. Varias generaciones han crecido creyendo que el aborto es algo negativo, incluso entre los que apoyan a este derecho. Solamente han oído hablar del aborto como asesinato (de parte de los republicanos y otros antiabortistas) o una decisión trágica aunque a veces necesaria (de parte de los demócratas como los Clinton); casi nadie capta concretamente el programa antimujer general del movimiento antiaborto.

Es falso y al mismo tiempo necio afirmar que nadie en el "Área de la Bahía ilustrada" se oponga al aborto. Necedades. Pónganse a platicar con unas gentes en la calle y encontrarás otra verdad. Vayan a la clínica del aborto en Bernal Heights y hablen con los círculos de oración católicos o los fascistas cristianos que estacionan su camioneta afuera con esos fetos ensangrentados. Visiten las clínicas falsas del aborto en Nob Hill u Oakland, que pagan a las personas que rechazan la ciencia básica para que den consejos médicos falsos sobre el aborto. Entren a las iglesias en Berkeley y Oakland que durante el pasado fin de semana patrocinaron muy a gusto al reverendo Childress de BlackGenocide.org [Genocidio Negro], el hombre que dice: "El lugar más peligroso para un afroamericano es la vientre de su madre". Los ataques contra el aborto desde todos lados están influenciando a la gente del Área de la Bahía.

Además, de plano es inmoral negarse a tomar posición por algo en que uno cree y que se necesita desesperadamente (una oposición al movimiento y las ideologías antiaborto) simplemente porque no le afecta a uno directamente. Ahora mismo, hay mujeres en las zonas rurales y en muchas ciudades importantes por todo Estados Unidos que están desesperadas porque el aborto es prácticamente ilegal en kilómetro tras kilómetro a sus alrededores.

En conclusión, quien sustrae una sola zona al contexto nacional es víctima en engaño propio. Si se permite a este monstruoso movimiento antiaborto decidir el papel de la mujer en la sociedad, ¿eso no afectará a San Francisco y a todas partes? Lo que necesitamos no son pequeños baluartes u oasis donde la mujer pueda decidir su futuro, pero sí que ese derecho sea la realidad y la cultura básica, garantizada y codificada para la mujer en todas partes. Necesitamos una sociedad en la que la mujer se libere, donde ¡ni siquiera se le haga caso a la "opinión" antiaborto y todo su veneno contra la mujer independiente y su odio a la ciencia!

25 de enero: Un hermoso torrente de furia

El día de la Caminata pro "Vida", 200 personas, en su gran mayoría jóvenes, acudieron a la esquina de las calles Market y Powell para confrontar poderosamente a la marcha antiaborto al pasar ésta por ahí. Cerca de 100 personas que andaban en lo suyo por el centro de San Francisco se le sumaron, cuando les dijimos que una marcha antiaborto de 50.000 personas pronto se volcaría por ahí, y por qué importa tanto en este momento una oposición pública a todo ese programa odiamujer. Llegó un contingente de revolucionarios y feministas de Los Ángeles con una enorme bandera en español que decía: "El feto NO es un bebé. El aborto NO es homicidio. La mujer NO es una incubadora". Cientos de personas tomaron pancartas y pegatinas o compraron playeras que decían: "¡Aborto a solicitud y sin disculpas!" Una docena de estudiantes de Mills College en Oakland hicieron sentir su impacto, agarraron megáfonos y corrieron a confrontar la pancarta "Generación Pro Vida", coreando: "¡Cada generación tiene un compromiso con la liberación de la mujer!" Tal como declaró una universitaria: "Hoy, ellos son más que nosotros, pero nosotros tenemos la autoridad moral". Cuando la marcha antiaborto tocó sus tambores, bailamos a su ritmo y coreamos: "¡A romper! ¡Las cadenas! ¡A romper, a romper las cadenas! ¡Si la mujer no tiene derechos, no es  más que una esclava!" y "¡Jamás! ¡Jamás! ¡No volveremos atrás!" Los manifestantes apuntaron a la marcha antiaborto y corearon juntos: "¡Esa marcha odia a la mujer!" y "¡Sin este derecho básico, la mujer no es libre! ¡Aborto a solicitud y sin disculpas!" Era un hermoso torrente de furia en la dirección acertada, de una movilización de personas y la elevación de las aspiraciones hacia las posibilidades de la liberación de la mujer, alzando las voces al unísono y exigiendo lo justo.

Es imprescindible el haberles opuesto resistencia ese día y oponérsele día tras día de aquí en adelante. Hay que desmentir públicamente todas esas falsedades de que el aborto haga daño a las mujeres y a los bebés. Hay que denunciar el programa total del movimiento antiaborto como una campaña aferrada de imponer de nuevo el patriarcado arcaico en Estados Unidos y a través del mundo. La gente en todas partes necesita ver que existe una fuerza en aumento a la cual puede y debe unirse para luchar contra esa guerra contra la mujer y derrotarla en la única manera posible: apoyándonos en nosotros mismos.

La contra-protesta persiguió a la marcha antiaborto un kilómetro y medio por la calle Market, retándolos por todo el camino y haciéndoles saber que no estaba bien recibida su mentalidad al estilo de la Edad de las Tinieblas. De ahí nos desviamos por una calle lateral e hicimos una reunión con muchos de los que habían tomado posición con el derecho al aborto. Varias personas que pasaban por ahí, camino a hacer otra cosa, quedaron tan asqueadas por la enorme protesta antiaborto que se animaron a sumarse. Durante toda la reunión, los discursos recibieron aplausos y gritos de aprobación por parte de una multitud que sabía muy bien que había tomado la posición correcta ese día. Una joven había comprado unos zapatos, y se indignó tanto por lo que estaba pasando que convirtió la caja de los zapatos en un letrero que decía: "Mi cuerpo, mi derecho a decidir" y se sumó. Una mujer negra de edad mediana dijo que había asistido para oponerse a la primera Caminata pro "Vida" en 2005 y nunca permitirá que quiten este derecho. Dijo que ese primer año cuando los confrontó, tuvo que preguntarles: "¿Son pro vida? ¿Son pro-vida para los bebés que se mueren en Irak? No se oponen a que maten a niños en Afganistán. ¿Son pro-vida de verdad? Porque eso es lo que significa pro-vida; ser pro-vida para ellos también. Ustedes no son pro-vida, son para controlar el cuerpo de la mujer… y de eso estoy pero harta".

Una universitaria de primer año comentó: "Tardé para encontrar a este grupo. Pensé: '¡Estoy sola!' Esta cuestión ni siquiera debe suscitar debate. ¿¿En qué años estamos??" Varios otros jóvenes comentaron que nunca habían hecho algo parecido, que se sorprendieron de sentir tan "aceptados", "fortalecidos", como que habían encontrado su lugar en esta protesta y con Fin al Patriarcado. Otra joven señaló las etiquetas de Fin al Patriarcado que muchos se habían pegado ese día, que decía que "Somos la Generación de la Liberación", y dijo: "¿Vieron a ese grupo que se decía 'Generación pro-vida'? ¿A ver, qué onda? ¿Qué queremos representar, en realidad? Aquel es un movimiento que quiere llevarnos hacia atrás, y ¡nuestra generación no puede permitir que eso ocurra! Tenemos que luchar con todas las ganas del mundo para asegurar que no ocurra". Otra dijo: "Yo sí creo que todos nacemos iguales. ¡Uno tiene que nacer para tener derechos! ¡Yo debo tener más derechos que algo sin cerebro!". Una latina joven de Los Ángeles dijo: "¡Voy a llevar todo eso a Los Ángeles!" e invocó a otros a difundir y movilizar a base de los mensajes centrales y programa para la liberación de la mujer que Fin al Patriarcado representa en el mundo.

Una joven dijo que en 2012 participó en la Caminata pro "Vida", en el lado equivocado de la contienda. Dijo que al pasar marchando vio una contra-protesta que le hizo cuestionar e indagar. De ahí que ella acudió a nuestra contra-protesta con un letrero que dijo: "Me mintieron para que fuera pro-vida" y otro que dijo: "Ni la iglesia ni el estado, la mujer decidirá su destino". Otra joven dijo: "Díganme cuál iglesia da la educación sexual. ¿Dónde están? En ninguna parte". De ahí contó la historia de su prima católica en México que se suicidó por no poder alimentar a sus tres hijos. Esta historia es una de la larga letanía de situaciones devastadoras que se deben a la prohibición y el estigmatización del aborto, y ya es más que hora de ponerle fin a la saga de muertes innecesarias y sueños abandonados a los cuales el movimiento antiaborto pretende multiplicar y perpetuar.

Varias personas expresaron gran frustración por que siga dándose una batalla sobre el derecho al aborto. De que estemos en esta situación, 41 años después de Roe v Wade, y todavía hay una necesidad tan urgente de "pelear a todo trance" por este derecho más básico. Otros se pararon a decir que si queremos ver el día cuando se haya ganado esta batalla, cuando podamos avanzar más allá de toda esta opresión de la mujer a una sociedad donde la mujer participe concretamente como un ser igual en toda esfera, hace falta la revolución y el socialismo con el objetivo final del comunismo. A todas y todos los que lucharon ese día se les recomendó leer y difundir revcom.us y el periódico Revolución, y forjar activamente el movimiento para el tipo de revolución que tenga el potencial de liberar a la mujer y emancipar a la humanidad concretamente; necesitamos arrebatar a la humanidad al sistema opresivo y explotador el que por su misma naturaleza esclaviza a la mujer, convierte todo en mercancía, enajena a las personas de sí mismas y de las demás y refuerza roles de género imposibles e inaceptables.

Este día fue un ejemplo en vivo de la furia de la mujer debajo de la superficie la que se puede y se debe desencadenar por toda la sociedad. Es también un ejemplo de lo sofocantes y lo desmovilizadores que son los demócratas. "Grupos femeninos" de la corriente establecida, dizque pro derecho al aborto, pero que constantemente se niegan, debido a sus vínculos con el Partido Demócrata, a denunciar abiertamente ni oponerse resistencia al movimiento antiaborto, tienen que zafarse de esas alas sofocantes. Toda persona que quiera luchar de verdad en contra de la embestida multifacética contra el derecho al aborto y en pro de la liberación de la mujer, tiene que desechar la estrategia de "resguardarnos" por históricamente desacreditada. A toda persona que quiera ponerle fin a la guerra contra la mujer: urge que usted se ponga de pie para desafiar a los que quieren subordinar abiertamente la vida y el futuro de la mujer al estado y a la dominación masculina. Si se es pro derecho a decidir, urge que usted rechace los consejos de tratar de tapar el sol con un dedo y esperar hasta que "se cambien las tornas" políticas o hasta que nos salven "nuestros representantes" en los palacios del poder. Usted y muchos otros pueden y deben unirse a este tipo de despertar y resistencia justa, generalizada y férrea contra el patriarcado, con el fin de cambiar los términos del debate, voltear el rumbo y derrotar la guerra contra la mujer. Acordémonos de este día y construyamos sobre esta base, lo que ocurrió y por qué importa que doscientas personas, sin ni una pizca de miedo, confrontaron a las hordas de mentalidad arcaica, líderes religiosos y legisladores misóginos, y dijeron: "Nosotros tenemos la autoridad moral. ¡Su tiempo [de ellos] ya se acabó!"

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