El informe del Departamento de Justicia

Encubren el asesinato de Michael Brown a manos de la policía

6 de abril de 2015, introducción nueva 18 de marzo de 2017 | Periódico Revolución | revcom.us

 

Nota de la redacción: Hace dos años y medio, un policía blanco en Ferguson, Misuri asesinó a sangre fría a Michael Brown, un joven negro de 18 años de edad. En Ferguson y en todo Estados Unidos mucha gente se levantó expresando su veredicto sobre este brutal asesinato policial de un hombre negro que no tenía un arma. No obstante, el fiscal del condado de St. Louis y luego el Departamento de Justicia de Estados Unidos se negaron a presentar cargos contra el cerdo policial que cometió este crimen atroz, Darren Wilson. Recientemente se estrenó un nuevo documental sobre Mike Brown y su asesinato, Stranger Fruit. No hemos visto la película, pero según se informa, los sucesos que precedieron el asesinato de Mike Brown son más complicados que lo que se sabía anteriormente. Se ha salido un clip de video inédito de una cámara de vigilancia que muestra a Mike Brown en una tienda unas horas antes de su asesinato. Muchos medios de comunicación han presentado e informado sobre este clip. Después del asesinato se había emitido otro clip de video de vigilancia de la misma tienda como parte de la campaña para satanizar a Mike Brown y justificar la absolución del policía. El fiscal del condado de St. Louis descartó de manera arrogante el nuevo video, llamándolo “no relevante”, y siguió satanizando a Michael Brown. A la luz de estos acontecimientos, volvemos a postear el siguiente artículo que salió en revcom.us después de que el Departamento de Justicia publicó su informe que sostuvo descaradamente que no existía una base para presentar cargos contra el policía asesino Wilson.

 

Hace poco el Departamento de Justicia (DOJ, por sus siglas en inglés) hizo público un informe que concluye de manera ultrajante que no había ninguna base para levantar cargos federales contra Darren Wilson, el policía que asesinó a Michael Brown en Ferguson, Misuri. Otro informe sobre Ferguson que el DOJ hizo público más o menos al mismo tiempo reconoce que el Departamento de Policía de Ferguson lleva años maltratando y ensañándose con los negros, y que existe un odio racista muy arraigado entre los policías de Ferguson y los funcionarios de la ciudad en general, y un sistema de robo y extorsión legalizados que mantenía empobrecida a gran parte de la población negra de Ferguson y las ciudades circundantes, además de hacer que las personas pasaran la vida entrando y saliendo de la cárcel.

Pero nos dicen que ese odio racista omnipresente no tuvo nada que ver con la muerte de Michael Brown. El informe sobre Michael Brown dice que Brown, que no traía arma, intentó agarrar el arma de Wilson y luego se abalanzó contra él, lo que hizo que Wilson “temiera que le iba a matar”.  Ahora, racistas, reaccionarios, idiotas y cobardes de toda calaña han aprovechado para sembrar confusión y desmoralización acerca de lo que ocurrió en Ferguson y para desmovilizar el poderoso movimiento contra el asesinato policial que surgió durante el verano y el otoño de 2014. Un titular reciente del Washington Post chilló: “’Manos arriba, no disparen’ se basó en una mentira”.

¡Mentiras! Wilson disparó contra Michael Brown y lo persiguió por la calle. Michael tenía las manos arriba y le suplicó a Wilson que no le disparara. Wilson le metió varias balas a Michael, y una le clavó en el cerebro.

¡Las personas que estaban en el lugar vieron eso y así lo dijeron al mundo! ¡Por más que los informes del gobierno o las audiencias de un gran jurado aleguen y “legitimen” la confusión, por más que el noticiero Fox o la CNN repitan mentiras en un bucle mediático incesante, no pueden cambiar esta verdad!

Dorian Johnson, el amigo de Michael que estuvo con él cuando Wilson los paró, dijo que vio que Michael Brown se detuvo y se volteó con las manos en el aire. Dijo oír que Brown dijo “No traigo pistola” o “No tengo arma” antes de que Wilson le abriera fuego. En el momento del asesinato de Brown, dos trabajadores blancos de la construcción se levantaron los brazos al aire para demostrar lo que Brown hacía y una persona los grabó mientras decían: “No era ninguna amenaza” y “Tenía las manos en el aire, carajo”.

El Departamento de INjusticia, al igual que el gran jurado en Ferguson, decidió hacer caso omiso de todo eso en nombre de lo que, según éstos, fuera “plausible” entre la cadena de mentiras y justificaciones del asesinato que Darren Wilson les ofreció. El informe afirma que Michael Brown era de alguna manera el “agresor” contra el policía armado que le perseguía, y que Wilson actuó de forma “razonable” cuando disparó 12 veces contra Michael, pegándole 6 ó 8 veces.

Se descartó el testimonio de todas las personas que vieron a Michael con las manos arriba. Se descartó el testimonio de una mujer que dijo que le oyó a Michael Brown decir una y otra vez: “No hice nada”. Según el informe, una mujer que comenta que Michael “parecía tener miedo” no podría ser “creíble”. Las personas que vieron a Michael Brown con las manos arriba, y con las manos extendidas, y que dijeron que Michael estaba “caminando” o “tambaleándose” hacia Wilson, y no abalanzándose hacia Wilson como éste afirmó: esos testimonios también se descartaron.

Sí, hay una conspiración para que siempre salgan impunes los policías.

Un corto de la charla filmada de Bob Avakian, Revolución: por qué es necesaria, por qué es posible, qué es, pronunciada en 2003. Bob Avakian es el presidente del Partido Comunista Revolucionario, Estados Unidos. Vea la película completa en http://revolutiontalk.net. Éntrele a Bob Avakian aquí.

Dorian Johnson, acribillado de preguntas sin fin y amenazado con cargos de perjurio, puso la decisión del DOJ en una buena perspectiva: “No acusarle significa no justicia. Duele pensar que se puede matar a una persona y, fíjese, el asesino luego sale libre. La lucha no termina aquí. No apruebo la violencia en ningún nivel, pero como dije, comprendo la ira. Siento la misma ira que ellos sienten”.

He aquí la verdad de lo que ocurrió. Wilson le disparó a Michael Brown en la mano cuando Michael se le acercó a su patrullero. Con el arma encañonada, Wilson se abalanzó hacia Michael y Dorian. Cuando Michael Brown se volvió hacia Wilson, con los brazos y las manos arriba, Wilson disparó varias balas de alto calibre. Dos balas le penetraron el pulmón derecho; otra le destrozó la mandíbula. Luego Wilson le metió un tiro fríamente en el cerebro de Michael y lo mató.

El asesinato de Michael Brown fue lisa y llanamente un homicidio cometido por la policía, y las decididas protestas eran más que justas. “¡MANOS ARRIBA, NO DISPARE!” es de hecho una consigna muy apropiada y poderosa para la resistencia de masas que hay que movilizar en contra del ultraje de la brutalidad y asesinato policiales y todas las respectivas consecuencias.

La versión de Wilson, o el cuento del cerdo

La versión que Darren Wilson le dio al gran jurado estaba llena de lagunas obvias, incompatibilidades y mentiras descaradas. Pero éste no solamente no cuestionó a Wilson, sino que aceptó su versión como la verdad con la cual toda otra versión se comparaba.

• “Los moretones” en la cara de Wilson, por los supuestos golpes que Michael Brown le dio, resultaron ser solo un pequeño corte en el labio y, al parecer, un grano o un verdugón en el cuello por atrás.

• No se encontró ninguna huella digital de Michael Brown en el arma de Wilson, aunque supuestamente hubo una “pelea de vida o muerte” por agarrarla. No se encontró ninguna huella digital de Brown en ninguna parte de la puerta del SUV de Wilson, ni en el cinturón de herramientas que incluye la funda del revólver de Wilson. Hasta el informe del DOJ dice: “Ningún testigo ocular corrobora [confirma] directamente la versión de Wilson de que Brown intentó conseguir el control del revólver...”

• Wilson afirmó que pidió refuerzos por radio al salir del vehículo, con el arma desenfundada, para empezar su persecución mortal a Michael Brown. No existe ninguna documentación de eso. Wilson afirma que en un descuido cambió su radio a un canal que solo recibe mensajes, pero “no respondió” a las llamadas urgentes del despachador policial. El informe del DOJ dice que la coartada de Wilson para este intervalo de dos minutos cuando baleó a Michael Brown “carece de pruebas definitivas… pero es plausible”.

• Wilson afirmó (y el informe del DOJ repite) que no disparó contra Michael desde atrás, pero el informe dice también que Brown sufrió dos heridas en el brazo derecho posterior. El informe dice que como el brazo puede girar, es posible que un disparo contra Michael Brown desde el frente le hubiera entrado por el lado posterior del brazo.

• Wilson afirma que Brown “se abalanzó” contra él, y eso le hizo temer que le iba a matar. Michael Brown, al acercarse a Wilson, tenía dos heridas de bala en el pecho derecho; y esas balas penetraron el pulmón y rompieron varios huesos. Brown sangraba profusamente y sufría dolores intensos por otras heridas, inclusive por una bala que le penetró la frente y salió por la mandíbula derecha.

Éstas son algunas de las incompatibilidades más flagrantes a las cuales Wilson nunca tuvo que responder. Pero ni siquiera se trata de lo peor. Wilson dejó el lugar del asesinato contra el asesoramiento de su sargento mientras otros policías llegaban, unos momentos después de balearlo. Fue al Departamento de Policía de Ferguson, donde sabía que su prometida, Barbara Spradling, estaba de turno. Se lavó las manos y él mismo colocó su revólver en la bolsa de evidencia.

David Klinger, de la Universidad de Misuri-San Luis, le dijo al Washington Post: “¿Un oficial de la policía que conduce a sí mismo de regreso a la comisaría? Equivocado. ¿Un oficial de la policía que registra su propia arma como evidencia? Equivocado. No siguieron los procedimientos de investigación adecuados”. Un manual de 2013 del DOJ dice que cuando procesan las escenas de un crimen, los investigadores “no permiten que el sospechoso utilice las instalaciones del sanitario ni cambie su apariencia, lo que incluye cepillarse el cabello o lavarse las manos”. La realidad es que desde el principio, nunca consideraban a Wilson como un sospechoso.

Aunque Wilson, su oficial superior ni su prometida siguieron las normas más básicas de investigación policial, el informe oficial del DOJ dice que las explicaciones de Wilson son “creíbles”.

Wilson le contó su versión a Spradling antes de que llegaran otros policías. El que los dos agentes se decidieran entre sí en ese momento fue la versión que Wilson repitió en los interrogatorios posteriores. Según el dicho: “Ésa es su versión y él la acata”. El DOJ admite que Spradling tiene un “posible sesgo” en este caso (qué eufemismo si lo hubiera), pero todavía considera como “creíble” su testimonio aunque se basa totalmente en lo que Wilson le dijo cuando estaban juntos justo después de que Wilson mató a balazos a Michael Brown y a pesar de su negligencia al permitir que Wilson se lavara las manos y así eliminara la evidencia.

Todo esto es lo que se conoce como “salir impune después de matar”. Y lo aprobó el “Departamento de Justicia” del gobierno federal de Estados Unidos. ¿Cómo es posible que alguien crea esas tonterías? ¡Que nadie acepte el veredicto de ese informe!

El tiro de gracia

El informe del DOJ dice que las pruebas tienen que demostrar que Darren Wilson actuó de manera “deliberada” y “poco razonable” cuando baleó y mató a Michael Brown. Dice que hay que justificar cada ocasión en que Wilson accione su arma.

El disparo que mató a Michael Brown entró por el vértice (la coronilla) del cráneo. Michael Brown era de la misma estatura aproximadamente que la de Wilson, 1.93 m, lo que significa que Brown o se agachaba de dolor por las múltiples heridas de bala y extenso sangrado o estaba a gatas —hay testimonio que confirma ambas posibilidades— cuando Brown le dio “el tiro de gracia” en la nuca a Michael Brown.

Si no es “deliberado” y “poco razonable” el acto pegarle una bala en la coronilla a un hombre mal herido y agachado o a cuatro patas, pues ¿qué carajos es? Esta decisión del DOJ no sólo deja que Wilson salga impune por el asesinato de Michael Brown, sino que es una licencia para matar para todos los cerdos policías en Estados Unidos.

“Manos arriba, no disparen” es una consigna acertada y justa. Que la defendamos y sigamos coreando a voz en cuello y con orgullo. Se concentra lo que le pasó a Michael Brown y lo que ha pasado en cada ciudad grande y pequeña de Estados Unidos. Y que aquellos que se dejan embaucar o influenciar por la línea de argumentación del informe del DOJ se pregunten: en el caso altamente improbable de que cada palabra que Darren Wilson les dijo a los “investigadores” fuera acertada, pues ¿eso justificaría el asesinato de Michael Brown?

Si alguien supuestamente roba un paquete de cigarrillos, según dicen Wilson y el DOJ que lo hizo Mike Brown, ¿eso significa que él se merece morir a balazos en la calle? Si a un policía no le gusta cómo se ve la cara de alguien, sobre todo si, digamos, es una cara negra, ¿es aceptable, es razonable, que el policía tema por su vida y pueda usar ese supuesto miedo como justificación para matar a la persona negra? Si un joven está agachado o está a gatas y sangra profusamente por múltiples heridas de bala, ¿se justifica el que la persona le dispare en la cabeza y afirme que el joven “se abalanzaba” en su contra? ¿Justifican el asesinato policial de un joven con las manos arriba las declaraciones odiosas, racistas y obviamente interesadas de Wilson acerca del supuesto estado de ánimo y apariencia de Michael Brown, de que Brown “se parecía a un demonio”, que hacía “la mueca más agresiva e intensa” que Wilson jamás hubiera visto, etc., declaraciones el informe del DOJ acepta sin cuestionamiento ni comentario?

He aquí una cuestión básica de la moral. Es inmoral e injusto el que la policía siga matando a balazos a los jóvenes negros y latinos. Es inmoral e injusto el que cualquier lastimera “justificación” que inventan los policías asesinos, de que “se movió la mano hacia la cintura”; “llevaba un objeto brillante en la mano”; “hizo un movimiento repentino”; “intentó agarrar mi arma”, sea suficiente para impedir que se les acuse de todo cargo. Es inmoral y vergonzoso el que cualquiera se deje influenciar o acepte en todo sentido estas excusas gastadas y trilladas.

Un sistema jurídico que justifica esos asesinatos y permite que no se aplique el castigo respectivo es ilegítimo y no merece ningún respeto.

No habrá ninguna justicia de parte del Departamento de Justicia

Como escribimos cuando se público el informe del DOJ:

En esencia, el Departamento de Justicia dijo que Michael Brown era culpable de causar su propia muerte. ¡¡¡NO!!! Una vez más, no hubo ningún juicio para encontrar y corroborar en concreto la verdad. Una vez más, intentó pasar por alto el hecho básico de que Michael Brown no traía ningún arma. Una vez más, hizo caso omiso del racista testimonio de Wilson ante el gran jurado que comparó a Michael Brown con un "demonio". Una vez más, tomó como cierto el argumento altamente dudoso de que Michael Brown, al que el policía Wilson ya le había pegado varios tiros, de alguna manera se precipitó sobre el policía que lo mató.

¿Por qué lo habrían encubierto? Bueno, piense en lo siguiente: si el Departamento de Justicia en efecto hubiera dicho que la privación de la vida a un joven hombre negro sin el debido proceso fuera un delito, por el que Darren Wilson tuviera que ser juzgado, ¿no es cierto que eso habría armado un escandalazo aún mayor entre los de arriba, mismos que ya se desquitan los unos a los otros? ¿Y qué habría hecho eso para todo su programa de reprimir a las comunidades negras y latinas, mismo que se basa en la violencia por parte de la policía? Este informe fue un "acuerdo de compromiso", a fin de hacer que la gente piense que se hará algo, y a la vez que sigue apoyando cien por ciento a la policía... y para poner a la gente a la defensiva.

Éste no es para nada el momento para “calmar” la lucha que estalló tan espléndidamente en 2014. Éste es el momento de que esta resistencia cobre aún más fuerza. Éste es el momento de decir “¡No más que el sistema dé luz verde a los policías asesinos!”

 

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