La sórdida historia y los grandes crímenes del FBI
18 de mayo de 2017 | Periódico Revolución | revcom.us
En su declaración sobre el despido del director del FBI James Comey, Trump escribió que “el FBI es una de las instituciones más respetadas y adoradas de esta nación y hoy marcará un nuevo comienzo para la joya en la corona de nuestras fuerzas policiales”. ¿Pero que ha sido la verdadera historia y el verdadero papel de esta institución “respetada y adorada” que Trump hoy busca poner bajo su control?
El FBI —el Buró Federal de Investigación— es la principal fuerza policial del gobierno a nivel nacional y la principal agencia de espionaje interno. Cuenta con casi 35.000 empleados y tiene un presupuesto propuesto para el año fiscal 2017 de $9,5 mil millones.
El FBI fue establecido en 1908, y ha sido un importante instrumento de represión y control violentos de los gobernantes de Estados Unidos para mantener su sistema capitalista-imperialista. El FBI ha jugado un papel —a menudo un papel central— en algunos de los ataques más nefastos contra los que luchan contra las varias formas de explotación, opresión e injusticia del presente sistema. Veamos unos pocos ejemplos.
* Empezando en 1939 y durante la II Guerra Mundial, el FBI jugó un papel central en la recolección de datos y luego la detención de 120.000 personas de ascendencia japonesa, a quienes metieron en campos de concentración (“internamiento”).
*Durante las décadas 1940 y 1950, el FBI jugó un papel clave en la caza de brujas anticomunista y campañas de difamación encabezadas por el senador Joseph McCarthy y su Comité de la Cámara sobre Actividades No Estadounidenses (HUAC, por las siglas en inglés). Perseguían a militantes y partidarios del Partido Comunista de Estados Unidos, así como a otros radicales e intelectuales. Muchas de las víctimas de McCarthy, HUAC y el FBI perdieron el trabajo y fueron condenados al ostracismo social; unos fueron mandados a la prisión y, en el caso de Julius y Ethel Rosenberg, ejecutados. Antes, durante y después de ese período, el FBI espiaba y mantenía enormes archivos sobre artistas, escritores e intelectuales reconocidos como Albert Einstein, Andy Warhol, Leonard Bernstein, Charlie Chaplin, John Lennon y Yoko Ono, James Baldwin y muchos más.
* Durante las décadas 1950 y 1960, el FBI estaba empeñado en debilitar y suprimir a la creciente lucha del pueblo negro por derechos civiles. Cuando en 1955 Emmett Till, un joven negro de 14 años de edad, fue salvajemente linchado en Misisipí, el jefe del FBI, J. Edgar Hoover, dijo que era un “supuesto asesinato” y dedicó más energía investigando a los comunistas que protestaban el linchamiento que al propio linchamiento.
Más tarde, el FBI intentó desacreditar a Martin Luther King Jr. a quien espió y hostigó, regando rumores malévolos y tomando otras “contramedidas”. Hasta le mandó una carta “anónima” amenazándolo con dar a conocer detalles de su vida personal y recomendando que se suicidara para evitar un escándalo. De hecho, en vista de lo vasto que es el aparato de espionaje del FBI y de su política consciente de fomentar escisiones y conflictos violentos entre grupos, es muy probable, a lo mínimo, que el FBI supiera muy bien de los planes para asesinar a Martin Luther King (y a Malcolm X antes en 1965). Entre otras circunstancias sospechosas, el día del asesinato de King estaban entre 12 y 14 agentes federales apiñados en una estación de bomberos a unos 50 metros del lugar del asesinato.
* En la década de 1960 y principios de la de 1970, el FBI —en conjunto con las “unidades rojas” de los departamentos de policía locales— llevó a cabo un enorme operativo secreto contra la oposición política a través del programa COINTELPRO (Programa de Contra Inteligencia). El programa se enfocaba en individuos que luchaban contra los muchos crímenes del gobierno estadounidense en el país y en el extranjero. Y atacó especialmente a quienes se oponían a la opresión del pueblo negro. Un enfoque importante de COINTELPRO era hostigar, entablar cargos falsos, y asesinar a líderes del movimiento de Liberación Negra, y uno de sus blancos específicos era el Partido Pantera Negra, un ejemplo siendo la colaboración con la policía de Chicago en 1969 para asesinar al líder del Partido Pantera Negra, Fred Hampton. El FBI infiltró la rama de Chicago del Partido Pantera Negra y consiguió que uno de sus informantes fuera una guarda espaldas de Fred Hampton. El FBI incluso redactó una carta “anónima” a un líder de la pandilla callejera Black P. Stone Nation con la mentira de que los Panteras le querían matar, con la esperanza de que ellos atacaran a Hampton.
* En 1973, cientos de indígenas norteamericanos y sus partidarios ocuparon la aldea de Wounded Knee en la Reserva de Pine Ridge en Dakota del Sur para exigir que el gobierno federal dejara de suprimir al Movimiento Indígena de Estados Unidos (AIM, por sus siglas en inglés) y a otros en la reserva. El FBI formó parte de las fuerzas federales fuertemente armadas que rodearon Wounded Knee, donde los valientes luchadores indígenas se resistieron a las fuerzas gubernamentales por 73 días. Después del sitio, el FBI y el gobierno federal desataron una oleada de ataques contra la gente de Pine Ridge. Después de que dos agentes del FBI cayeron durante un asalto a un campamento de AIM en 1975, el FBI estaba profundamente involucrado en fabricar cargos falsos al líder de los indígenas, Leonard Peltier, y en su persecución y condena de prisión, donde persiste hasta la fecha como preso político.
* Los expedientes de espionaje del FBI de 1975 incluyen uno del espionaje minuto por minuto a Bob Avakian (BA) y otros de la Unión Revolucionaria, la precursora del Partido Comunista Revolucionario, Estados Unidos, y una foto de la casa de BA. En una nota de 1971 a sus subordinados, el entonces director del FBI escribió sobre BA: “Este es el tipo de extremistas que quiero perseguir CON FUERZA e innovación”. Un agente preparó un croquis de la casa de BA —un diagrama similar al que un informante del FBI le dio a la policía de Chicago para facilitar el asesinato en 1969 del líder del Partido Pantera Negra Fred Hampton. Mucho de esto se documenta en la autobiografía de BA, From Ike to Mao and Beyond (en inglés, con unos pasajes en español en revcom.us).
* El papel del FBI en la represión de la oposición perdura hasta la fecha en diversos frentes. El FBI, junto con la Agencia de Seguridad Nacional (NSA), han recogido en secreto enormes cantidades de datos telefónicos y de la Internet de millones de personas en Estados Unidos, y pretenden ampliar su espionaje. En 2016, el entonces cabeza del FBI James Comey denunció el hecho de que periodistas ciudadanos gravaban en video los asesinatos policiales, afirmando que impedía que los policías ejercieran sus funciones.
No se trata de decir, “¿A quién le importa? Deje que Trump controle el FBI”, sino que a pesar de todo lo que el FBI ha sido y sigue siendo, hay que oponerse al despido de Comey por Trump como parte de exigir que el régimen entero sea expulsado porque el intento de Trump de poner bajo su control al FBI representa un salto hacia la consolidación del poder en manos de este régimen fascista. Si tienen éxito, intensificará enormemente los horrores y crímenes que comete el presente sistema, aún más allá de estos ultrajes del pasado.
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