La lucha contra el SIDA en los tiempos de Trump

9 de julio de 2017 | Periódico Revolución | revcom.us

De un lector:

Este mes de junio marcó 36 años desde que se registraron los primeros casos de SIDA en la literatura médica. Como resultado del trabajo de profesionales médicos, investigadores, funcionarios de salud pública y activistas valientes y dedicados que lucharon por el tratamiento y contra la estigmatización, se han desarrollado fármacos que salvan vidas, y el VIH / SIDA ya no es una sentencia de muerte (VIH es el nombre del virus que causa el SIDA). De hecho, no hay razón para que el SIDA no se pueda eliminar — excepto por las condiciones sociales y económicas obscenas en Estados Unidos y en todo el mundo. Trump y su administración ampliarán enormemente el ya devastador precio que cobra el VIH / SIDA en Estados Unidos y en todo el mundo, lo que puede causar más de un millón de muertes adicionales y sufrimientos incalculables.

Una epidemia genocida

Si bien se han realizado avances en el tratamiento y la prevención del SIDA en Estados Unidos, el VIH / SIDA causa un impacto devastador entre ciertos sectores de la población, especialmente a los hombres negros gay y bisexuales y la gente en los estados del Sur (Alabama, Florida, Georgia, Luisiana, Misisipí, Carolina del Norte, Carolina del Sur, Tennessee y Texas).

El año pasado, los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades (CDC, por las siglas en inglés) predijeron que si las tasas actuales continúan, uno de cada dos hombres afroamericanos gay o bisexuales resultará infectado con el virus. Comentando al respecto, un artículo en el la Revista del New York Times señaló: “Para dar más perspectiva: Suazilandia, una pequeña nación africana, tiene la tasa más alta del mundo de V.I.H., con un 28,8 por ciento de la población. Si los hombres afroamericanos gay y bisexuales constituyeran un país, su tasa superaría a la de esta empobrecida nación africana — y de todas las demás naciones”. (“America’s Hidden HIV Epidemic” [La ocultada epidemia de VIH en Estados Unidos] por Linda Villarosa, 6 de junio de 2017)

En la ciudad de Jackson en el estado de Misisipí, el 40 por ciento de todos los hombres gay y bisexuales viven con el virus del VIH, según el artículo del Times. En un tiempo en el que existen fármacos que pueden salvar la vida y prevenir casi todas las muertes relacionadas con el SIDA, en 2014 2.952 personas en el Sur Profundo murieron con el VIH como una causa subyacente, según un análisis de la Universidad de Duke. Entre los hombres negros de esta región, la tasa de mortalidad relacionada con el VIH era siete veces mayor que la de la población estadounidense en general.

Greg Millett, científico principal de los CDC durante 14 años, ahora vicepresidente y director de políticas públicas de amfAR, la Fundación para la Investigación del SIDA, describió al New York Times cómo las acciones del gobierno de Estados Unidos, especialmente durante la administración de George W. Bush, contribuyeron a esta nueva etapa de la epidemia: “No es una coincidencia que las nuevas tasas de infección por el VIH entre los hombres gay, especialmente los hombres gay negros, comenzaron a disparar a partir del año 2000, como resultado de una campaña anticientífica que permitía que se hiciera poco o nada por una comunidad calumniada simplemente debido a la ideología y la intolerancia “.

Millett dijo al Times que no es optimista con respecto al pronóstico para los hombres negros que viven con el VIH / SIDA: “Algún día vamos a eliminar el SIDA en Estados Unidos, pero me temo que no vaya a suceder para los negros M.S.M. [Men who have Sex with Men / hombres que tienen relaciones sexuales con hombres]”. Dijo, “Hemos demorado demasiado tiempo. Con tantos hombres negros gay ya infectados, ya es muy tarde para cerrar la puerta del establo cuando el caballo ya se ha escapado”.

“A Trump no le importa el VIH. Nos vamos”.

El 16 de junio, seis miembros del Comité Asesor del Presidente sobre el VIH / SIDA dimitieron públicamente del comité y publicaron un artículo de opinión en la revista Newsweek bajo el título “Trump doesn’t care about HIV. We’re outta here.” [A Trump no le importa el VIH. Nos vamos.]. En el artículo dijeron, “La administración de Trump no tiene una estrategia para abordar la epidemia en curso de VIH / SIDA, no busca en absoluto la aportación de expertos para formular políticas sobre el VIH y —lo más desconcertante— promueve legislación que dañará a las personas que viven con el VIH y detendrá o revertirá importantes avances ya logrados en la lucha contra esta enfermedad”.

Los ex funcionarios señalan el hecho de que el 60 por ciento de las personas que viven con el VIH en Estados Unidos siguen sin poder acceder a los medicamentos que salvan vidas que han estado disponibles por más de 20 años, e indicaron varias de las acciones de Trump que representan un enorme paso atrás en combatir la epidemia:

• Durante su campaña electoral, Trump se negó a reunirse con los defensores de los que viven con VIH.
• El día en que asumió el cargo, Trump cerró el sitio web de la Oficina de Política Nacional sobre el SIDA, y nada lo ha reemplazado.
• Trump no ha nombrado a nadie para encabezar la Oficina de la Casa Blanca de Política Nacional sobre el SIDA, lo que significa que no hay nadie responsable de llamarle la atención al gobierno sobre las cuestiones relacionadas con la crisis del VIH / SIDA.

Empeorando exponencialmente la epidemia

De hecho, no es sólo que a Trump y su administración no les importa. Al fomentar el racismo, las actitudes anti-gay y anti-científicas, al recortar los fondos para la investigación y el tratamiento, están empeorando exponencialmente la epidemia.

* Ya están muy extendidos el estigma y la discriminación contra las personas que viven con el VIH / SIDA y la comunidad LGBT en general, y los promueven con saña Trump y otros. Este estigma contribuye a que no se examine a las personas para ver si tienen el VIH, lo que tiene consecuencias concretas. Más del 20 por ciento de los hombres gay negros infectados con el VIH tienen el SIDA (lo que significa que están muy enfermos) para cuando reciban su diagnóstico. El diagnóstico precoz es un factor clave en el tratamiento eficaz que reduce las cargas virales y reduce la transmisión del VIH.

* Trump y Pence han pedido acciones legales y legislativas que permitirían la discriminación contra las personas LGBT en nombre de “proteger la libertad religiosa”. Antes de convertirse en vicepresidente, a Pence se lo conoció por ser el representante federal más anti-LGBT. En 2006, dijo que la prohibición del matrimonio homosexual es hacer cumplir “la idea de Dios”. Pence apoya también la terapia de conversión, las prácticas peligrosas y desacreditadas destinadas a cambiar la orientación sexual o la identidad de género de una persona.

* En 2002, Pence apoyó las políticas educativas de abstinencia de la administración de Bush que promovieron la mentira de que los condones no eran eficaces para prevenir la transmisión del VIH, y Pence consideraba los condones “demasiado modernos, liberales”.

* El uso de drogas intravenosas es una de las formas en que el VIH se propaga. Parece que Trump favorece un enfoque de “guerra contra las drogas”, la que ha demostrado ser cruel, racista e ineficaz. En mayo, el secretario de Salud y Servicios Humanos, Tom Price, se opuso a la terapia de reemplazo de opiáceos, por ejemplo con la metadona y la buprenorfina, a pesar de la abrumadora evidencia científica de que estos son algunos de los tratamientos más eficaces.

* El presupuesto que Trump ha propuesto recortará $ 186 millones de los fondos destinados al CDC para la prevención, pruebas y servicios de apoyo para el VIH / SIDA. Hablando de estos recortes, Carl Schmid, director ejecutivo adjunto del Instituto de SIDA dijo: “Probablemente tendríamos un millón de pruebas de VIH menos por eso, y no sabemos cuántas personas más se volverán [VIH] positivas y no recibirán el mensaje”.

* Como parte de los enormes recortes a los Institutos Nacionales de Salud, el régimen de Trump pretende reducir la investigación sobre el VIH y SIDA en $ 550 millones.

* El Programa Ryan White de VIH / SIDA proporciona un sistema integral de atención que incluye atención médica primaria y servicios de apoyo esenciales para las personas que viven con el VIH que no tienen seguro o cuentan con seguro insuficiente. El presupuesto de Trump propone un recorte de $ 59 millones al programa.

* Los recortes al Medicaid propuestos por Trump negarían servicios a muchos de los más necesitados: el 40 por ciento de las personas VIH positivas dependen de Medicaid. El Programa de Asistencia de Medicamentos para el SIDA informó que había más de 9.000 personas en Estados Unidos en una lista de espera para obtener medicamentos para tratar el VIH, principalmente hombres negros y gay en el Sur Profundo, donde se bloqueó la expansión de Medicaid. Como dijo un activista de SIDA en Misisipí acerca de la situación si terminaran la expansión de Medicad, “Todo el país se transforma en Misisipí”.

Phill Wilson, presidente ejecutivo y presidente del Instituto Negro de AIDS, dijo al New York Times: “Para los más vulnerables, ¿regresamos a un tiempo cuando la gente sólo tenía atención de emergencia o ninguna atención y literalmente se moría en las calles? Todavía no lo sabemos, pero tenemos que pensarlo”.

¿Puede describirse todo esto como otra cosa que el genocidio (definido por el diccionario Webster como “la destrucción deliberada y sistemática de un grupo racial, político o cultural”)?

La pandemia global

El VIH / SIDA es una pesadilla global, y la negación de abordarla es un gran crimen del sistema capitalista-imperialista en todo el mundo; 35 millones de personas han muerto desde el comienzo de la epidemia. De acuerdo con un artículo publicado en la revista médica británica Lancet (19/07/16), a partir de 2015, 38,8 millones de personas viven con el VIH / SIDA en todo el mundo (y este número va en constante aumento), hay 2,6 millones de nuevas infecciones anualmente, y 1,2 millones de personas murieron en ese año.

De las personas infectadas con el VIH, el 69 por ciento vive en los países pobres de África subsahariana, y el 91 por ciento de los niños VIH positivos está en África. Sólo aproximadamente la mitad de los infectados con VIH en todo el mundo recibe los medicamentos que salvan vidas.

Así eran las condiciones ANTES de Trump. “Al menos un millón de personas morirán en el África subsahariana y en otros lugares, dijeron el martes investigadores y defensores, si se promulgan los recortes de fondos propuestos por la administración de Trump a los programas mundiales de salud pública”, informó recientemente el New York Times (23/5/17).

Trump ha propuesto recortar $ 800 millones del Plan de Emergencia del Presidente para el Alivio del SIDA (PEPFAR, por las siglas en inglés) y la Agencia de Estados Unidos para el Desarrollo Internacional (USAID), programas que abordan la pandemia del SIDA. Según los datos recopilados por el amfAR, entre los efectos de estos recortes en 2018 estarán:

• 62.057 nuevas transmisiones sexuales del VIH
• 836.038 interrupciones de tratamiento de adultos, causando 131.388 muertes y convirtiendo en huérfanos a 258.742 niños
• 57.639 interrupciones de tratamientos para prevenir la transmisión madre-a-niño, por lo que 7,730 niños nacerán con VIH y 3.865 niños morirán antes de cumplir dos años
• 164.649 niños sufrirán interrupciones de tratamiento que resultarán en la muerte de 10.511 de los niños.

Los recortes en la ayuda internacional no son la única manera en que Trump profundizará la crisis mundial del SIDA. Una de las primeras acciones de Trump al asumir el cargo fue volver a instituir y hacer aún más estricta la Regla Mordaza Global que bloquea fondos de Estados Unidos a cualquier organización que aun menciona el aborto a las mujeres que buscan el servicio médico. Esto significa que las clínicas que tratan a las mujeres con VIH perderían todos los fondos si mencionaran el aborto como una opción, a pesar de que casi todos los médicos consideran que tal discusión es necesaria para informar a una mujer de sus opciones.

¿Qué va a hacer USTED?

Reflexione sobre lo que todo esto significa. Hasta un millón de muertes en todo el mundo. En Estados Unidos, hasta el 50 por ciento de los hombres gay negros estando VIH positivos, y muchos privados de tratamiento. ¡Esto es inadmisible! No podemos permanecer en silencio frente a estos horrores. ¡Tenemos que expulsar al régimen de Trump y Pence!

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