De un manifestante de Rechazar el Fascismo:
Por qué resisto
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Mi nombre es Lawrence (Larry) Christie. Soy veterano del combate de Vietnam. Yo tengo experiencia de primera mano sobre lo que las horribles, peligrosas e ilegales políticas de un régimen fascista / capitalista pueden hacer a una población de personas normalmente pacíficas. Ellos eran un pueblo agrario ocupado con alimentar a sus familias mientras intentaban desesperadamente distanciar a los suyos de la guerra, sin éxito. Yo he escuchado a madres gritando. Yo he escuchado a niños llorando de dolor. Cuando regresé a casa, me sentí como un nazi que libraba la guerra contra gente que podía ser mi gente. Madres, padres, primos, abuelos. Ellos han trabajado la tierra para ganarse la vida. Yo vengo de gente rural pobre. Una familia que todavía intentaba ganarse la vida con la tierra que había muerto hace mucho tiempo.
Yo fui radicalizado por mis experiencias ahí y pronto me di cuenta de que no era el único. Yo me uní a un grupo de Hermanos y Hermanas, los Veteranos de Vietnam Contra la Guerra. Todavía soy un miembro, pero como muchos grupos izquierdistas, no estaban haciendo lo suficiente.
Decidí que una forma de equilibrar mi karma, que estaba totalmente fuera de equilibrio, era hacerme un maestro y trabajar con niños que necesitan la ayuda más pero la obtienen menos. Llevé mi revolución al aula. Mientras les enseñaba Historia, yo también enseñé a los niños que pensaran por ellos mismos y que cuestionaran la autoridad y no sucumbieran a las sirenas de capitalismo. Les enseñé a ser conscientes y prestar atención a todo lo que les rodeaba. Les enseñé a hablar en contra de la injusticia. Les enseñe que la Educación, no el militar, era la manera de subir. Yo he escuchado de estos niños muchísimas veces agradeciéndome por ser el maestro que les era.
En el 2011, el Agente Naranja finalmente me alcanzó. Mi cáncer me costó la laringe. Mis pulmones están plagados de la enfermedad pulmonar, Fibrosis Pulmonar. Pero yo estaba determinado a seguir luchando. Yo he estado en al menos una docena de manifestaciones. He sido gaseado varias veces. He sido disparado con balas de goma y bolitas de pimienta. He sido empujado por líneas de policía en caballos. Ahora he sido rociado con repelente de oso. Pero no pararé. Esta es la razón.
En la primavera de 2018, fui al Monumento Nacional de Organ Pipe, ubicado en el desierto del sur de Arizona en la frontera con México; yo fui a un área desolada donde más de 3.000 almas han fallecido tratando de encontrar una vida mejor para ellos y su familia en tierra que les fue robada por los fascistas, fuerzas expansionistas. Yo pude sentir su presencia. Yo pude escucharlos en el viento llorando por justicia. Cuando se les dejaban agua y comida en el desierto, miembros del “Arizona Posse” [Patrulla de Arizona, miembros de la Patrulla Fronteriza] vendrían y rajarían las jarras de agua y destruirían las barras de nutrición. ¡Esto es equivalente al asesinato! Esto tiene que parar. Yo me fui de ahí determinado a pelear. Después yo conocí a la gente de Fuera Ya de Rechazar el Fascismo y supe que ya finalmente encontré un hogar. Ya no necesitaba trabajar solo, aunque me gustaba el apodo de “agitador externo”.
Yo no estoy haciendo esto para mí mismo. Lo estoy haciendo para mis hijos, mis nietos y por la posteridad. Lo hago por todos los niños, nietos y la posteridad. Yo no quiero que crezcan y sean abusados por este brutal régimen fascista. Pero sobre todo, yo estoy haciendo esto por las almas perdidas llorando en el desierto del sur de Arizona. La gente no debería morir o ser asesinada por el deseo de mejorar su vida.
Recibido de Rechazar el Fascismo (refusefascism.org).
1999 – 2011 MUERTES REGISTRADAS DE MIGRANTES
Mapa del sur del estado de Arizona. 2.269 muertes entre 1 de octubre de 1999 y 28 de marzo de 2012.