Así que claro que nos importan y estamos luchando activamente contra el racismo y la opresión en todos los frentes y en todas las esferas sociales.
Nuestro partido publicó un folleto sobre este tema central: LA PURA VERDAD, VERDAD LIBERADORA: Cómo este sistema siempre ha oprimido al pueblo negro, cómo se puede acabar finalmente con toda la opresión. LA PURA VERDAD, VERDAD LIBERADORA, o LPVVL, empieza recalcando que "en gran medida lo que ha enriquecido y dado poder a la clase dominante de este país ha sido la esclavitud y explotación del pueblo negro"; y que "para que triunfe la revolución en este país--una revolución que acabe con toda esta opresión y explotación y transforme la sociedad fundamentalmente--el pueblo negro tiene que desempeñar un papel de gran importancia en ella". LPVVL, plantea el problema fundamental, así como su solución, citando el Programa del partido:
"El Nuevo Programa de nuestro partido habla sobre la vil opresión que han sufrido el pueblo negro y otras nacionalidades a lo largo de la historia de Estados Unidos, y resume la situación actual:
"<|>`La discriminación, la negación de los derechos democráticos, la violenta represión policíaca, la supresión y mutilación de sus culturas e idiomas, explotación y opresión como miembros de la clase obrera, con la posición más baja, el desempleo constantemente alto y los trabajos peor pagados, las peores viviendas, el peor de los servicios sociales ya malos--todo esto y más es la realidad cotidiana para las masas de estas nacionalidades en Estados Unidos actualmente. Y son esas las condiciones que el proletariado en el Poder debe y va a eliminar'<|>" (página 74).
El Programa del partido dice claramente que en cuanto el proletariado conquiste el Poder, tomará medidas inmediatas y decisivas para desarraigar la opresión racista. Aplastará las organizaciones racistas como el KKK y movilizará a las masas. En la lucha armada por el Poder, se derrotará y se aplastará la salvaje y criminal policía del Estado capitalista, para reemplazarla con la milicia armada y organizada de las masas en los barrios y en todas las partes donde las masas viven y trabajan. Las milicias serán organizaciones armadas de las masas respaldadas por el ejército regular del Estado proletario. Ese será el nuevo Poder liberador de la sociedad. Se dejará de promover y tolerar las ideas racistas y en vez se las combatirá. A las masas se les enseñará a reconocer sus verdaderos y fundamentales intereses de clase y se las organizará para librar la lucha ideológica y práctica para continuar la revolución y superar todas las desigualdades sociales. Como dice el Programa del partido: "Los mitos comunes entre el pueblo serán discutidos y desmentidos...y las mentiras de la burguesía serán despiadada y totalmente desenmascaradas".
Cuando el gobierno proletario emprenda la reconstrucción y la transformación revolucionaria de la sociedad, se le dará prioridad a los ghettos y otras zonas donde las masas oprimidas han vivido concentradas y sufrido discriminación bajo el gobierno capitalista. A las masas populares, entre ellas millones que bajo el capitalismo han estado desempleadas o no han tenido trabajo decente, se las pondrá a trabajar para reconstruir las comunidades y participar plenamente en la transformación revolucionaria de todos los aspectos de la sociedad. A la vez, el Estado proletario, movilizando a las masas, prohibirá y eliminará en los hechos, toda manifestación de discriminación y segregación. Eso también lo dice clarito el Programa: "Naturalmente, todo esto no puede hacerse en un minuto. Sin embargo, mucho de ello puede hacerse así, y lo será.... La discriminación, por ejemplo, será inmediata y forzosamente prohibida en el empleo, la vivienda y todas las otras esferas". La lucha para eliminar definitivamente y en todas sus manifestaciones la supremacía blanca y la opresión racista se seguirá librando en la nueva sociedad socialista.
De vez en cuando, los representantes de la clase dominante capitalista balbucean que van a superar el racismo y la discriminación, pero jamás cumplen lo que prometen, y jamás podrán hacerlo. Como señala LA PURA VERDAD, VERDAD LIBERADORA, el sistema capitalista-imperialista es un "sistema que por naturaleza es racista de cabo a rabo. Un sistema que es incapaz de acabar la supremacía blanca y el racismo, porque hacerlo significaría tumbar el sistema y echarlo a la basura. A menos que uno esté dispuesto a eso, a menos que esté trabajando por una revolución que tumbe este sistema y construya uno totalmente diferente" no podrá eliminar la supremacía blanca ni el racismo. Eso es algo que la clase dominante burguesa jamás podrá lograr. Pero es precisamente lo que nosotros nos proponemos. Es algo que el proletariado consciente de clase y su vanguardia revolucionaria tienen que hacer y están resueltos a hacer porque solo desmoronando al sistema y echándolo a la basura, solo tumbando el sistema y eliminando la explotación y las desigualdades sociales podrá el proletariado conseguir su liberación cabal y llegar a la sociedad comunista, un mundo sin discriminación de clase o nacionalidad, sin relaciones antagónicas entre la población. Como dijo Marx, solo emancipando a toda la humanidad podrá el proletariado emanciparse a sí mismo.
Así que del mismo modo que la clase dominante capitalista no puede prosperar sin la discriminación y opresión nacional, NOSOTROS no podemos triunfar (o sea, el proletariado no puede llevar a cabo su histórica misión revolucionaria) sin eliminar toda esa clase de opresión mediante la lucha. Así es de fundamental.
Tal como es necesario tumbar el sistema capitalista e impulsar la revolución proletaria para eliminar definitiva y completamente la supremacía blanca y el racismo, es igualmente necesario librar una lucha hoy mismo contra la supremacía blanca y el racismo. Ese es un frente crucial de la lucha y clave para construir el movimiento revolucionario, unir al proletariado y a las masas populares en torno a sus verdaderos intereses revolucionarios, así como para sentar las bases que hagan posible lanzar y ganar la lucha armada que tumbe el sistema capitalista y establezca el gobierno proletario cuando maduren las condiciones.
Como dice LPVVL, las masas negras están en una posición estratégica y poderosa para librar la lucha contra su opresión y contra toda la opresión: son parte de un pueblo, una nación afroamericana, que siempre ha sufrido y sigue sufriendo una salvaje opresión bajo este sistema; a la vez "son una importante parte de la clase más revolucionaria de todas, el proletariado". Esa es una combinación que tiene gran potencial explosivo, capaz de aportar una gran fuerza a la causa revolucionaria. Lo mismo se puede decir de los latinos y otras nacionalidades oprimidas en Estados Unidos. Pero ese gran potencial solo puede realizarse bajo una consciente dirección revolucionaria y como parte de un movimiento revolucionario que se base en los intereses emancipadores del proletariado y que una a todos los que se pueda unir, con el proletariado revolucionario y su partido de vanguardia a la cabeza. Como dice LPVVL: "En este país, la principal alianza que se debe forjar para la revolución es la alianza entre las luchas de las nacionalidades oprimidas por acabar su opresión nacional, y la lucha del proletariado, de todas las nacionalidades, por acabar toda la opresión y explotación mediante el derrocamiento del capitalismo y el avance del comunismo mundial".
Con eso en mente, nuestro partido lleva a cabo su trabajo fundamental en el seno del proletariado, especialmente sus sectores más explotados, entre los cuales hay millones de negros, latinos y otras nacionalidades oprimidas, así como millones de proletarios blancos. En ese trabajo le dedicamos mucha atención a la lucha contra la supremacía blanca y el racismo, y a la unidad del proletariado de todas las nacionalidades, no solo para impulsar la lucha sino para estar en sus primeras filas. A la vez, hacemos trabajo en todos los sectores de la población, como la clase media, para movilizarlos en esa lucha y conseguir que tomen una posición con las masas y sigan la dirección del proletariado.
Con esa orientación y esas metas desplegamos las fuerzas del partido y nos unimos con otras fuerzas para librar la lucha contra la supremacía blanca y el racismo como parte de la lucha global contra toda la opresión, en todos los frentes y en toda esfera social: contra el salvajismo policial; en defensa de la acción afirmativa y para conseguir que la continúen; para impedir la ejecución de Mumia Abu-Jamal y conseguir su libertad; contra las medidas de la clase dominante de construir cárceles en vez de escuelas, de convertir los proyectos en prisiones y echar más gente a la calle, recortando el welfare y ofreciendo trabajos con pésimos salarios, etc., etc.; en defensa del derecho al aborto y contra la discriminación, degradación y el maltrato de la mujer; contra la Proposición 187 en California y los muchos ataque contra los inmigrantes; en oposición a las campañas chovinistas como la de "English Only" y los ataques contra el idioma y la cultura de los latinos y otros oprimidos; contra la interminable opresión y devastación de los indígenas; para denunciar y desenmascarar la esencia racista de las falsas teorías reaccionarias de la "inferioridad genética" de los negros y otras porquerías supremacistas que promueve la clase dominante; y contra todos los demás ataques que el sistema lanza contra las masas.
En todas esas luchas nuestro objetivo es unir a todos los que se pueda unir; ayudar a que los combatientes de un frente se desarrollen en combatientes dispuestos a luchar contra todas las formas de opresión del sistema, en cualquier frente; llevar al proletariado consciente de clase y su movimiento revolucionario a dirigir, desarrollar sus alianzas claves y crear la unidad más amplia posible bajo su dirección; y hacer que todo eso contribuya a la preparación y luego al derrocamiento de este sistema capitalista-imperialista y a la transformación revolucionaria de la sociedad.
Así--por medio de una revolución como esa y solo de esa manera--se pondrá fin, de una vez por todas, a los centenares de años de espeluznante opresión de los afroamericanos y otros oprimidos, y a los miles de años de una sociedad dividida entre amos y esclavos.