Unir a todos los que sea posible unir,
en Estados Unidos y en el mundo entero

By Bob Avakian, presidente del PCR, EU

Obrero Revolucionario #1145, 7 de abril, 2002, posted at http://rwor.org

En la lucha contra la escalada de represión y contra la ofensiva imperialista, se ponen de relieve tanto la gran importancia de la orientación estratégica de los "dos 90/10" como las muy agudas contradicciones que encierra. Como señala el Borrador del Programa del partido, los "dos 90/10" se refiere a la orientación estratégica de procurar "ganarse al `90%', a quienes, en última instancia, beneficia la revolución proletaria, contra el `10%': la clase dominante y sus lacayos recalcitrantes. Esto se aplica tanto en Estados Unidos como a nivel mundial.Es decir, nos unimos también con el `90%' del mundo: la gran mayoría de los explotados y oprimidos por el imperialismo, sus aliados y títeres".

Desde luego, mantener esta orientación a lo largo del camino tortuoso de la revolución implica una lucha consecuente, tanto en el movimiento popular como en las filas del partido. Por cierto, he leído informes de discusiones de camaradas que han planteado dudas acerca de "cómo aplicar los dos 90/10 ahora cuando tanta gente ondea la bandera y apoya al gobierno", o que han preguntado: "Al parecer no es correcta la orientación de los dos 90/10, o al menos no es posible plasmarla, ¨verdad?".

Es bueno plantear las dudas; para aclararlas es preciso volver al Borrador del Programa y subrayar que en ningún momento habla de un proceso en línea recta ni dice que a cada paso tendremos el 90% del pueblo con nosotros ni que será muy fácil movilizarlo bajo nuestro estandarte. No lo dice y sería erróneo si lo dijera. Por lo contrario, reconoce y recalca que se trata de un proceso agudamente contradictorio porque a mucha gente y fuerzas importantes de la sociedad estadounidense las influyen espontáneamente, y a corto plazo, ideas y tendencias incorrectas; además, ser consecuentes con el internacionalismo proletario y procurar unir a los más amplios sectores con la orientación de ganarse al 90% de la sociedad encierra una contradicción muy aguda. Así que los últimos acontecimientos destacan precisamente lo profunda, correcta y previsora que es la exposición de los dos 90/10 en el Borrador del Programa:

"Es importante ver que la orientación de los `dos 90/10' encierra importantes contradicciones, que en ciertos momentos pueden ser muy agudas. En un país como Estados Unidos, la defensa y aplicación del internacionalismo proletario conforme a los intereses del `90%'de los pueblos del mundo puede crear conflictos entre el proletariado consciente de clase y los intereses estrechos de ciertos sectores de la sociedad, especialmente de los privilegiados.

"Para tratar correctamente estas contradicciones, y las agudas `tensiones' que pueden crear, la vanguardia proletaria en todo momento debe poner en primer lugar los intereses fundamentales del proletariado y de las masas populares del mundo entero y, desde el punto de vista estratégico, perseverar en el objetivo de ganarse a la mayor cantidad de fuerzas de todos los sectores".

De hecho, para forjar el más pujante movimiento de oposición, y ligarlo a los objetivos estratégicos revolucionarios, es preciso comprender que lo más probable es que no tengamos el 90% del pueblo de nuestro lado en un momento dado... en varios sentidos. Hablando primero de nuestro programa fundamental -la revolución proletaria- obviamente no será el caso que el 90% del pueblo (ni una cifra parecida) esté de acuerdo o siquiera tome una posición de neutralidad amistosa antes de que surja una situación revolucionaria. E incluso en "la lucha final", cuando se plantee objetiva y agudamente la posibilidad y la necesidad de alzarse y hacer la revolución, es poco probable que el 90% esté de nuestro lado al comienzo: habrá que ganarse a muchas capas medias en el curso mismo de conquistar el poder revolucionario. Así señala y recalca el Borrador del Programa , y habrá que volver a estudiarlo a cada paso para orientar a las masas, y sobre todo a los más avanzados y conscientes, a luchar eficazmente por la más favorable correlación de fuerzas a lo largo del proceso previo al surgimiento de una situación revolucionaria y en el momento en que maduren las condiciones para ella.

Igualmente, en lo que se refiere al movimiento de resistencia, lo más probable es que mucho menos del 90% del pueblo lo apoye o tome una posición de "neutralidad amistosa" en un momento dado; habrá que perseverar y construir el movimiento "aferrándonos a los principios básicos y a la vez forjando el más amplio frente único; tocará partir de lo que se necesita para parar la ofensiva de guerra y represión, y no caer en el sectarismo ni simplemente dejarnos guiar por intereses estrechos o limitados". (de un documento interno)

Así que nuevamente se destaca el gran reto de cambiar la vida y el terreno político, de reconfigurar las fuerzas de la sociedad y lograr una repolarización más favorable para el movimiento de resistencia, y hacerlo al servicio de los intereses revolucionarios fundamentales de las masas, de Estados Unidos y el mundo entero. Se destaca la crucial importancia de tratar correctamente la contradicción a menudo muy aguda -y en este momento muy aguda- entre unir a todos los que sea posible unir en Estados Unidos y basarse firmemente en el internacionalismo proletario.

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