El monopolio de los medios y la realidad virtual

Bob Avakian

Obrero Revolucionario #1153, 2 de Junio, 2002, posted at http://rwor.org

Como he mencionado, los imperialistas buscan imponer su dominio de varios modos en la situación actual, y cada vez es más evidente que no admitirán el disentimiento y ni siquiera que se ventilen puntos de vista contrarios que puedan romper el "monopolio de propaganda". Un ejemplo: durante la batalla de Kabul y la toma de esa ciudad por Estados Unidos y sus aliados, la prensa estadounidense (y la prensa internacional al servicio del imperialismo yanqui) hizo escasa mención del hecho de que los aviones de guerra yanquis bombardearon la cadena noticiosa árabe al-Jazeera. Pensé que seguramente saldría una nota para decir que fue accidental, pero que yo sepa eso nunca sucedió. (Desde luego, esa clase de operativo no es ninguna "novedad" para los imperialistas yanquis: cuando el gobierno de Clinton lanzó una guerra unilateral contra Yugoslavia, bombardeó el canal de televisión oficial en Belgrado porque transmitía propaganda a favor del gobierno de Milosevic y no la suya).

Antes del ataque a al-Jazeera , presionaron al emir de Qatar para que la cerrara. En un viaje a Estados Unidos, la prensa le preguntó sobre el particular y él contestó: ¡"Desde luego que tenemos que respetar la libertad de prensa"! ¡Vaya! ¡El autocrático y opresor emir de Qatar instruyó a la prensa estadounidense sobre la importancia de "la libertad de prensa"! ¡Qué cosa más patética y risible!

A los imperialistas yanquis no les conviene que los medios masivos de información los contradigan. Quieren imponer un solo punto de vista, una especie de "realidad virtual" -una gran burbuja de "verdad artificial" que nadie cuestione- y manejarla para que no reviente ni la desmientan los acontecimientos mundiales. Claro, a final de cuentas no será posible, pero es lo que pretenden.

Otro ejemplo: Bush y compañía recomendaron a la prensa no pasar videos (sin "editar") de bin Laden y al Qaeda supuestamente porque contenían comunicaciones cifradas: instrucciones a "células terroristas", etc. Bueno, mucha gente (aunque no de los medios masivos) señaló que eso era un absurdo pues al-Jazeera los pasaba y los "seguidores de bin Laden" los podían ver sin mayor problema; además están disponibles en la Internet. Pero aparte de absurdo, era muy insidioso: fue un pretexto poco disimulado y muy burdo (que la prensa estadounidense aceptó de buena gana) para bloquear un punto de vista opuesto a los imperialistas.

A diferencia de la "gran libertad de prensa" de los medios masivos de comunicación controlados por el capital monopolista estadounidense, al- Jazeera acostumbra entrevistar a altos funcionarios del gobierno israelí (y de Estados Unidos durante esta guerra). ¡Qué verg�enza para la clase dominante de Estados Unidos y la supuesta objetividad de la prensa! Obviamente al-Jazeera tiene su propio punto de vista, que no es el del proletariado revolucionario; sin embargo, el hecho de que permita ventilar diversos puntos de vista pone en evidencia a los medios masivos estadounidenses como serviles lacayos de la clase dominante y demuestra que son una parte de su maquinaria de guerra (el brazo propagandístico de la máquina de guerra imperialista) en la situación actual.

Todo esto va de la mano con los tribunales militares que instituirán. Por un lado, tienen su aspecto represivo, que es muy importante: juzgarán, condenarán y ejecutarán sumariamente a todo aquel que a su juicio represente una amenaza, e inspirarán terror, miedo e intimidación a la oposición. Pero otro aspecto también muy importante es que harán mucho más difícil que se plantee un punto de vista (en el contexto de un juicio) que cuestione las tergiversaciones de los imperialistas y la idea de que ellos son los buenos que luchan contra los "malvados" por todo el mundo. En un juicio abierto al público, es difícil que prohíban completamente que el acusado (o sus abogados o defensores políticos) hablen sobre lo que hizo o no hizo y por qué. Y si el acusado quiere abarcar temas de mayor alcance, es difícil suprimirlo. Es decir, es difícil evitar que se hagan declaraciones políticas por mucho que quieran suprimirlas. Así que los juicios a "presuntos terroristas" pueden dar pie a movimientos y declaraciones políticas que, si bien representarían el punto de vista reaccionario del fundamentalismo islámico, por ejemplo, en todo caso pondrían de relieve muchos aspectos de la realidad que los imperialistas yanquis quieren tapar.

Tengamos presente que lo más probable es que esos tribunales militares no juzguen únicamente a "terroristas extranjeros". Recordemos lo que dijo Martín Niemoeller *: los NAZIs atacaron primero a ciertos grupos y sectores de la sociedad, pero la represión iba abarcando a cada vez más gente, y el empuje y terror de una embestida preparaba el terreno para la próxima. Si bien Bush y compañía mantienen que los tribunales militares no juzgarán a ciudadanos, sus lacayos de la prensa ya están pidiendo que lo hagan; y tienen su lógica, pues de acuerdo a Cheney los acusados de terrorismo o de ayudar a terroristas no deben tener garantías constitucionales. Es natural que eso se aplique a los ciudadanos. ¿A poco no? No hay que ir muy lejos para sacar esa conclusión.

Así que los imperialistas no consentirán otro punto de vista ni nada que ponga al descubierto la realidad y haga reaventar la burbuja de "verdad artificial" que imponen paso por paso; no permitirán que los juicios sean un foro para condenarlos, ¡claro que no! Por lo mismo bombardean a al-Jazeera y por eso la "prensa libre" presionó al emir de Qatar para cerrarla. No les conviene que salga otro punto de vista que ponche esa burbuja de "realidad virtual". Naturalmente, las vastas mayorías del mundo no se tragan el cuento; pero si pueden hacérselo tragar al pueblo estadounidense, será mucho más fácil para los imperialistas seguir cometiendo atrocidades con la esperanza de que los hechos no logren reventar su ficticia "realidad virtual".

* Pie de página: "Primero vinieron a buscar a los comunistas y no dije nada porque yo no era comunista. Luego vinieron por los judíos y no dije nada porque yo no era judío. Luego vinieron por los sindicalistas y no dije nada porque yo no era sindicalista. Luego vinieron por los católicos y no dije nada porque yo era protestante. Luego vinieron por mí pero, para entonces, ya no quedaba nadie a quien decir nada". El pastor Martin Niemoeller, 1945, al hacer un balance del surgimiento de los nazis en Alemania.

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