La verdadera historia de las sociedades socialistas: Los grandes logros y las causas de los reveses

Entrevista a Bob Avakian, Por: Carl Dix

Sobre la guerra y la revolución, Sobre ser revolucionario y cambiar el mundo

Obrero Revolucionario #1159, 21 de julio, 2002, posted at http://rwor.org

Con gran entusiasmo el Obrero Revolucionario brinda a los lectores esta entrevista y diálogo entre Bob Avakian, el presidente del Partido Comunista Revolucionario (PCR), y Carl Dix, vocero nacional del PCR.

Esta es la cuarta parte y en los próximos números publicaremos otras partes de esta importante entrevista, que abarca una gran variedad de temas. En el futuro, la entrevista se publicará en su totalidad y estará disponible en la Internet.

La entrevista tiene leves cambios editoriales.

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En tiempos de grandes retos, el pueblo requiere "armas" extraordinarias que lo preparen para asumir tales retos, y lo que les brindamos aquí es verdaderamente extraordinario: una nueva arma política para los que nos oponemos a la ofensiva de guerra y represión de los imperialistas yanquis, que elevará nuestra conciencia y nos permitirá asumir retos y entrarle de lleno a la lucha por cambiar el mundo. El Obrero Revolucionario brinda a los lectores una importante entrevista con Bob Avakian, el líder del Partido Comunista Revolucionario, EU.

Tuve el gran honor de entrevistar a Avakian. De antemano, sabía que a mucha gente le hubiera gustado plantearle cuestiones muy candentes, pues a mí me las han venido planteando cuando divulgo el Borrador del Programa del partido y cuando platicamos de "la guerra ilimitada" que la clase dominante imperialista de Estados Unidos ha desatado contra el mundo. Así que sabía que iba a tener la responsabilidad y la oportunidad de plantearle esas cuestiones en nombre de todos.

Fue una experiencia fenomenal, difícil y a la vez muy divertida. Hace mucho tiempo que no tenía la oportunidad de platicar así con Bob Avakian, pero lo encontré igual, el mismo camarada "encendido" (para usar una frase de Peter Tosh) que ha dado liderazgo decisivo al movimiento revolucionario en tantas coyunturas cruciales en el pasado. Estaba totalmente al tanto de los acontecimientos en Estados Unidos y el mundo, y le entraba con el mismo entusiasmo inagotable a las cuestiones histórico-mundiales de la revolución proletaria. Pasamos varios días juntos haciendo la entrevista, que abarcó una gran variedad de temas, tales como la situación actual, la religión y lo que lo ha sostenido a lo largo de muchos años como líder revolucionario. Y al terminar "la jornada", lo pasábamos hasta muy noche platicando de básquetbol, cine y más.

Ojalá que los lectores disfruten tanto de la entrevista y aprendan tanto de ella como yo en el proceso de elaborarla.

Carl Dix

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Carl Dix: Está muy bien lo que has planteado sobre la revolución y la necesidad de que exista una vanguardia, pero a esos planteamientos mucha gente responde: "Eso ya lo hemos visto: cuando un partido de vanguardia dirige una revolución, independientemente de las intenciones que tenga, no resulta un sistema en que la mayoría tiene el poder sino que lo detenta el partido; o sea, en lugar de la dictadura del proletariado, el resultado viene siendo simplemente la dictadura del partido. La gente se alza contra el sistema opresor, pero acaba viviendo en otro sistema igual en que una minoría le impone su voluntad a la mayoría".

Bob Avakian: Bueno, por una parte esas afirmaciones las desmiente la realidad concreta de la revolución socialista hasta la fecha, por más que las divulguen los memorandos y las falsedades de la mismísima gente (risas) que ha sido el blanco de la revolución, o sea la clase dominante, los capitalistas. Y este hecho debe hacernos pensar: los que presentan así la "historia" de la revolución "comunista" hasta la fecha son los mismos que esa revolución tumbará; es decir, los que quieren fortalecer la opresión y explotación son los que más popularizan esas nociones que acabas de mencionar. Y vuelvo a repetir, eso debe hacernos pensar. ¡Por algo será! O sea, si los opresores y explotadores pintan algo como totalmente malo, por eso mismo debemos analizarlo críticamente y examinarlo del lado contrario. Bueno, eso en cuanto al enfoque metodológico, por decirlo así. Por otra parte, la realidad de esas sociedades, como China por ejemplo, fue totalmente distinta a lo que dicen.

A diferencia de las sociedades anteriores en la historia de China, del feudalismo, el imperialismo y todo, y más que cualquier sociedad en el mundo, cuando China era un país socialista dirigido por Mao no cabe duda de que la participación y la actividad consciente de las masas en muchas esferas de la sociedad fue algo completamente inaudito. Rebasó totalmente lo que existe en las supuestas "sociedades democráticas" como Estados Unidos u otras que llaman sociedades democráticas. "Servir al pueblo" era la consigna general del partido y las masas, divulgada en todas partes. Además, se movilizó a las masas a ocuparse de los asuntos del estado, a los obreros y campesinos a interesarse en la filosofía y las ciencias. Más que interesarse o simplemente leer sobre esos temas, le entraron de lleno a esos campos junto con los científicos profesionales. Igualmente en la esfera de las artes: la transformaron en aras de los intereses revolucionarios concretos de las masas para que expresara la lucha por transformar la sociedad y la concepción del mundo que corresponde y anima a esa lucha. Y así sucesivamente en las demás esferas. En la esfera de la medicina prepararon a las masas, a millones de campesinos (los "médicos descalzos") que recorrían el campo dando servicios básicos de salud a millones y millones de campesinos por primera vez en la historia de China, algo completamente inaudito. En la esfera de la educación también, y en todas y cada una de las demás esferas.

Es cierto que persistía la contradicción entre los revolucionarios de tiempo completo, concentrados en el partido, y las masas, pero la estaban eliminando y superando paso a paso y por medio de ciertos saltos, tales como la muy calumniada Revolución Cultural, que en realidad se propuso avanzar en la eliminación de la división entre la dirección y los dirigidos. O sea, fue todo lo contrario de las calumnias, tergiversaciones y parodias que divulga la propaganda imperialista. Así que los hechos, si uno los investiga, son todo lo contrario de lo que pintan, porque en realidad en la sociedad china, cuando iba por el camino socialista, como decimos, se estaba eliminando paso a paso la división entre la dirección y los dirigidos, además de las otras disparidades que señalé, tales como la división entre el trabajo intelectual y manual. Estaban eliminando todas esas disparidades mediante la combinación de los esfuerzos y la actividad consciente de las masas con los profesionales de cada esfera.

Ciertamente les faltaba mucho por hacer, y no es que todo eso fracasó sino que las fuerzas que la revolución estaba socavando (la gente que perdía sus privilegios, y sobre todo los individuos que ocupaban posiciones de dirección y no querían que la revolución se profundizara porque les bastaba con que China fuera un país fuerte y moderno, con poderío para imponerse en el mundo e incluso para ser una potencia), esas fuerzas tramaron un golpe para parar la revolución y dar marcha atrás. Y desgraciadamente tuvieron éxito, no porque el partido comunista dominara a las masas sino porque en la sociedad existían distintas fuerzas y los intereses de algunas se oponían a la continuación y profundización de la revolución. También había fuerzas que querían continuar la revolución y que movilizaron a las masas con ese fin. Pero desgraciadamente, debido a las mismas disparidades que hemos señalado y al hecho de que solo las habían superado parcialmente, los que querían preservar y profundizar dichas disparidades tuvieron ventajas concretas a corto plazo, y lograron parar la revolución y dar marcha atrás.


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