Revolución #004, 29 de mayo de 2005, posted at revcom.us
En mayo se aprobó calladamente una nueva ley federal sumamente peligrosa. La Ley Real ID (que entrará en vigor en mayo de 2008) transformará las licencias de conducir de cada estado en una tarjeta de identificación nacional. Le permitirá al gobierno recolectar y utilizar información sobre millones de personas, y empujará a los inmigrantes indocumentados más a las sombras.
La ley se aprobó (y Bush la firmó) a pesar de la oposición de centenares de grupos de defensa de inmigrantes, grupos de libertades civiles, legislaturas estatales, y hasta muchos senadores y congresistas.
Antes, el gobierno federal no podía dictar a los estados cómo expedir licencias de conducir. Pero la Ley Real ID requiere que los estados cumplan requisitos federales; si no, las licencias no servirán para abordar aviones, solicitar pasaportes o entrar a edificios federales donde se pide una tarjeta de identificación "válida".
Si la ley entra en vigor (se espera que haya oposición de los estados y en los tribunales), los que solicitan licencia de conducir tendrán que presentar acta de nacimiento, número de Seguridad Social, prueba de ciudadanía o residencia legal y prueba de domicilio. Actualmente, ningún estado requiere todas esas formas de identificación. Además, el Departamento de Vehículos Motorizados estatal tendrá que guardar y verificar los documentos.
Así el gobierno tendrá un banco de datos sobre el domicilio, el lugar de nacimiento y la situación migratoria de millones de personas. y copias de todos los documentos. Este banco de datos estará a la disposición de otras dependencias gubernamentales, que lo podrían utilizar para interrogar, espiar o arrestar de una manera nunca antes vista en este país. o incluso por todo el mundo.
La ley también requiere que las tarjetas tengan "una tecnología accesible a las computadoras", o sea, que las podrían solicitar bancos, tiendas o aerolíneas para hacer compras. Así la tarjeta también tendría información sobre actividades, compras y viajes. Barry Steinhardt, director del programa de Tecnología y Libertad de la Unión Americana de Libertades Civiles, le dijo a CNet: "Será una tarjeta de identificación nacional, pero lo que es más, será un banco de datos nacional". La Fundación de la Frontera Electrónica dijo que "le permitirá al gobierno federal obligar a todo estado a colocar chips de radio frecuencia" en las tarjetas de identificación, o sea, que las podrán usar para seguirle la pista a una peraona.
Los solicitantes tienen que pasar por una investigación en los bancos de datos oficiales, así que si existe una orden de arresto podrían terminar en la cárcel. Alabama, que ya lo hace, dice que arresta a 5,000 personas al año de esta manera.
La ley le impide a los trabajadores indocumentados obtener licencia de conducir porque requiere demostrar que son ciudadanos o que tienen tarjeta verde. Hay toda una categoría de inmigrantes que tienen que esperar años hasta que el Departamento de Seguridad de la Patria formalice su situación: los que solicitan asilo, los que han tenido problemas con su solicitud de ciudadanía, los que llegan con una clase de visa y solicitan otra. Al solicitar licencia de conducir checarán un banco de datos de inmigración, así que, por ejemplo, una persona cuya tarjeta verde ha vencido y todavía no ha recibido ciudadanía podría terminar deportada.
Varios estados, como Tennessee y Utah, han empezado a dar "certificados de conducir" a inmigrantes indocumentados. Un vocero de la Coalición de Illinois pro Derechos de Inmigrantes y Refugiados nos dijo que esos certificados solo sirven para manejar, no como identificación. Son como una alarma para la policía y los bancos. Esas licencias "de segunda clase" le dan al gobierno un banco de datos de los "no ciudadanos".
Los partidarios de la Ley Real ID dicen que protegerá a la población de "ataques terroristas". Pero en realidad, le da al gobierno nuevos poderes represivos contra millones de personas.