Revolución #016, 2 de octubre de 2005, posted at revcom.us
Recibimos esta carta de Atlanta, Georgia:
Estimados compañeros de Revolución:
El número especial de Revolución con la declaración “El huracán Katrina: Muertes innecesarias” electrizó el ambiente aquí en Atlanta. La respuesta fue magnífica y muchos pidieron ejemplares para repartir y participaron en los equipos de propaganda.
Un equipo colgó cinco mantas de puentes cerca de los barrios pobres y repartió la declaración en los centros donde están los damnificados de Nueva Orleáns. Hay muchísima rabia y frustración, y todo mundo quiere hacer algo. Muchos lloraban cuando nos platicaron de los horrores, sufrimiento y muertes innecesarias.
La declaración y el número especial tocaron el corazón de las masas. Tenían ganas de platicar sobre el problema fundamental de la sociedad. En una escuela de la comunidad negra, se prendió una discusión con un grupo nutrido y unos se valieron de la declaración para debatir: “Como dice aquí, el problema es el pinche sistema”. Hablamos con varias personas que vieron las mantas con el título de la declaración y el sitio web de Revolución.Se sacaron 2000 carteles con la declaración y los están repartiendo y pegando en las paredes, con una respuesta también muy favorable.
Los damnificados empezaron a llegar el 3 y 4 de septiembre, pero era difícil hablar con ellos porque los centros estaban cerrados al público y solo entraba personal médico y de servicios sociales. Nos fue mejor en los centros de trabajo estatales, donde todo el fin de semana se inscribían para solicitar trabajo y el subsidio de desempleo; repartimos paquetes de volantes y se los llevaron a los centros o casas donde se albergaban (un albergue grande de la Cruz Roja, iglesias y casas de parientes, amigos y otros). También repartimos paquetes de volantes a los que hacían cola para recibir servicios sociales.
En todas partes (en el centro, los barrios, las estaciones del metro, los mercados y tiendas) las masas de oprimidos han recibido la declaración con mucho interés.
Algunas iglesias de la comunidad negra que tienen gente de Nueva Orleáns facilitaron la distribución de nuestra información a sus feligreses. Una gerente de un supermercado grande en una comunidad negra de clase media alta leyó el pliego petitorio y se comprometió a colocar volantes en todas las cajas.
Apenas salieron los primeros ejemplares de la declaración fuimos al desfile anual de Black Gay Pride (gays negros). Lo de Nueva Orleáns estaba en la boca de todos; manifestaron rabia y dolor y dijeron que afectaba todo, hasta las demás cuestiones candentes del día. Los volantes pasaron de mano en mano y los organizadores agradecieron nuestra participación.
Un grupo de estudiantes de la Universidad de Atlanta convocó una marcha para el miércoles 7 de septiembre. Dada la gran preocupación por la situación y el coraje que todo mundo sentía, esperaban que asistieran centenares de estudiantes, pero solo acudieron un par de estudiantes de la universidad (con una petición de la destitución de Bush) y unos cuantos estudiantes de prepa. Luego llegamos con un chingo de declaraciones, ejemplares del número especial de Revolución y carteles. Los estudiantes decidieron repartirlos y marcharon por las escuelas. Se prendió muchísimo debate y lucha sobre qué hacer, y muchos agarraron volantes y periódicos.
Algunos fueron a la escuela de mujeres; varias jóvenes se llevaron paquetes de Revolución y el volante “El mundo no puede esperar”. Se pusieron a debatir cómo se podría sacar corriendo al gobierno de Bush y por qué el sistema es el problema. Se repartieron más de 600 ejemplares del número 13 de Revolución (“Nuevo año académico: Bienvenidos a la revolución”) y conocimos a unos vendedores de camisetas que quieren sacar la camiseta SE BUSCA y surtirla.
A través de todo este trabajo conocimos a muchos que quieren saber más sobre el comunismo, el ateísmo y el programa revolucionario del Partido Comunista Revolucionario (PCR) y su presidente, Bob Avakian.