“Hay que entrarle a este movimiento”
L.A.: Miles de estudiantes de prepa se salen de clases
Revolución #023, 20 de noviembre de 2005, posted at revcom.us
El 2 de noviembre, los estudiantes de más de 30 prepas de Los Ángeles se salieron de clases y se lanzaron a la calle, con muchos otros de la ciudad y del país, para dar el primer paso importante del movimiento para sacar corriendo al gobierno de Bush.
En la década pasada, los estudiantes de prepa protestaron contra la proposición antiinmigrante 187 y en los años 60 participaron en protestas contra la guerra de Vietnam. Pero lo del 2 de noviembre alcanzó un nivel superior. En respuesta a la convocatoria de El Mundo no Puede Esperar, miles de jóvenes, especialmente de los barrios proletarios, abandonaron la escuela para emprender acción política y hacerse oír. En la prepa Los Ángeles High, unos 1000 estudiantes se salieron y unos 500 fueron a la protesta en el bulevar Wilshire.
Una organizadora estudiantil de El Mundo no Puede Esperar dice que sus parientes en México la llamaron para decirle que la protesta salió en la tele.
En muchos casos los estudiantes protestaron a pesar de represión y amenazas de castigo. A un organizador lo detuvieron bajo arresto domiciliario y le entablaron cargos penales. Muchos se brincaron la cerca y esquivaron radiopatrullas para ir a la protesta. Cientos, y nadie sabe exactamente cuántos, intentaron salirse pero no pudieron porque las autoridades cerraron las puertas con candado y mandaron policías a vigilar. A los maestros les dijeron que cerraran las puertas y no dejaran salir a nadie.
Todo esto es una violación de las directrices del Distrito Unificado Escolar, que el 26 de octubre notificó a todos los directores que: "No deben impedir que los estudiantes se vayan de la escuela".
Además de no dejarlos salir, desde el 2 de noviembre han atacado a los que se salieron y especialmente a los líderes. Ha empezado una importante lucha para defenderlos.
Resistencia y represión
En la prepa Locke High, de Sur Centro, las autoridades regañaron a unas estudiantes porque colocaron un afiche de Revolución que pinta a William Bennett como nazi, porque dijo que una manera de reducir el crimen sería conseguir que las negras embarazadas se hicieran un aborto. El director confiscó todos los afiches y amenazó con expulsarlas.
En la prepa Lynwood High, casi 50 estudiantes se salieron de la escuela. La policía bloqueó unas entradas y las otras estaban con candado. Cuatro estudiantes realizaron una protesta de brazos caídos cerca de la oficina de administración. A todos los acusaron de ausentismo escolar. Una persona de la oficina, que se enteró de que los estudiantes brincaron la cerca, les dijo a los estudiantes chicanos: "Los mexicanos tienen que dejar de brincar las fronteras". Los guardias de seguridad no han dejado de hostigarlos y amenazan con suspender a los organizadores.
El director de la prepa Van Nuys High advirtió antes del 2 que no iban a permitirles salirse. Cuando unos estudiantes intentaron, los detuvieron a la fuerza y un decano hasta jaló del cabello a una joven. Así y todo, dos brincaron la cerca y hablaron en la protesta de Westwood. Se informa que a 20 estudiantes los suspendieron un día; que es posible que a dos los trasladen a otra escuela; y que a otros la policía les puso multas de hasta $250. Los policías escribieron que eran por "ausentismo, protestar contra Bush… y distribuir volantes que ofenden a ciertas personas".
En la prepa Granada Hills High, a un estudiante le mandaron a la oficina de la dirección porque tenía una calcomanía de El Mundo no Puede Esperar pegada en la playera. El decano le dijo que se la quitara porque la escuela no es un lugar para expresar creencias políticas. (Un día antes, un grupo de estudiantes cristianos se reunieron a la hora del almuerzo y sacaron una cruz de casi tres metros para rezar en grupo). Un policía de la escuela lo agarró del brazo y le dijo que se quitara la calcomanía. El joven contestó: "Si quieren que me lo quite, tendré que quitarme todo", y se quitó toda la ropa menos los calzoncillos. Luego les dijo: "Me pueden quitar la ropa y la calcomanía, pero no me pueden arrebatar lo que llevo en el corazón". El decano lo calificó de "desequilibrado" y le ordenó ir a ver a la enfermera, quien le dijo que estaba de acuerdo con lo que él había hecho.
En la prepa Jefferson High, los estudiantes se reunieron para salirse, pero a la salida les esperaba un pelotón de reclutadores militares.
El caso de Geovany Serrano es completamente indignante. Geovany está en el 10º grado en la prepa Belmont High, pero ahora se encuentra bajo arresto domiciliario por distribuir volantes y organizar. La policía le roció gas pimienta y lo detuvo. Primero lo llevaron a la delegación Rampart (famosa por su salvajismo y corrupción) y de ahí a un centro de detención para menores, donde le tomaron las huellas digitales. Lo acusaron de delitos serios, tiene que usar una pulsera en el tobillo que vigila sus movimientos y el teléfono está interceptado. Lo han trasladado a otra escuela, donde el director le advirtió que no se permite distribuir volantes.
El Comité Directriz de El Mundo No Puede Esperar envió una carta de apoyo a los estudiantes de Los Ángeles que dice: "Estos estudiantes han tomado una posición hoy que se honrará en el futuro. Los millones que detestamos el gobierno de Bush tenemos que honrarlos HOY MISMO. Hay que repudiar a todo administrador que permita que se castigue a estos jóvenes. Como dice nuestra convocatoria: ‘Si decimos la verdad, nos van a querer callar. Si nos movilizamos, nos van a querer parar. Pero nosotros hablamos en nombre de la mayoría de este país y del mundo, vamos a tenderles la mano a los que ha embaucado el gobierno de Bush y NO vamos a parar’".
Si bien las autoridades escolares se han portado como alcaides sofocando una rebelión de presos, los estudiantes no se rajan y están luchando contra la represión como parte del movimiento para sacar corriendo a Bush.
En la prepa Belmont High, docenas de estudiantes se salieron coreando: "¡Que se largue Bush! ¡Que se quede Geovany!". De ahí fueron a otra escuela, donde también se salieron estudiantes. Después, se reunieron en un restaurante donde les cayó encima la policía, que les puso multas y se los llevó a la escuela en radiopatrullas.
En la prepa Reseda High, cientos de indignadas llamadas telefónicas de parte de estudiantes, padres, maestros y partidarios lograron conseguir que no trasladaran a Sara Escuerdo, una organizadora. A Sara la suspendieron dos días y han amenazado con arrestarla por tener calcomanías.
Las represalias son graves, pero los estudiantes están motivados porque saben que el futuro del planeta está en juego y que lo que hagan o no hagan afectará mucho.
Sara Escuerdo y L.J. de la prepa Los Ángeles High mandaron una carta a worldcantwait.org, que dice:
"Lo que hacemos lo hacemos por los millones, por todo el mundo, que son torturados, asesinados y que sufren. Resistencia o muerte… esa es la neta… Hoy mismo el futuro está en manos de todos. Nos toca a nosotros. Lo que hay que preguntar es, ¿en qué mundo quieres vivir? ¿Aceptarás todo lo que este gobierno representa? Si la respuesta es no, entonces tienes que entrarle a este movimiento…".
Geovany dice:
"Hoy tenemos la guerra de Irak. Hay cárceles donde el gobierno simplemente desaparece a la gente; ahí los torturan o los tienen encadenados. Sus bombardeos están haciendo añicos las casas. Quieren imponer el fascismo cristiano y conseguir que la Biblia sea la ley, y que la mujer no controle su propio cuerpo. No quieren dejar en paz a los homosexuales o las lesbianas. La sociedad se encamina hacia un punto donde si no te conformas, te eliminan.
"Cuando me enteré de esto, me afectó mucho. Ya no puedo vivir como antes, hasta dormir es difícil sabiendo que este sistema está matando y maltratando. ¿Será ese el mundo que quiero?
"No. No quiero nada de eso".