Universidad Hampton: La batalla contra la represión por protesta de El Mundo No Puede Esperar
Revolución #026, 12 de deciembre de 2005, posted at revcom.us
El 2 de noviembre, los estudiantes de la Universidad Hampton, una universidad negra de Virginia de alto nivel, participaron en el lanzamiento nacional de El mundo no puede esperar--Hay que sacar corriendo al gobierno de Bush. Las autoridades los trataron con mano dura: los filmaron, les quitaron la identificación y les confiscaron los materiales que repartían.
En las semanas previas al 2 de noviembre, cuando los estudiantes empezaron a organizar la protesta, la administración mandó a quitar los volantes y despachó tiras a espiar e interrogar a los organizadores.
Los amenazaron con graves castigos. En cartas oficiales, los acusaron de "engatusar", de "hacer proselitismo" y de repartir "material no autorizado" (los volantes), y los amenazaron con el "máximo castigo... expulsión".
Cuando los estudiantes siguieron firmes, las autoridades escalaron el ataque. En una entrevista de la prensa, la policía de la universidad se metió entre los estudiantes y los reporteros para cancelarla y sacó corriendo a la prensa. Cuando empezaron a llegar declaraciones de apoyo a los estudiantes y salió un artículo en el periódico local, Bennie McMorris, el director de asuntos estudiantiles, dijo que "unos grupos de afuera han lanzado amenazas contra el personal de la universidad con este asunto" y que todas las amenazas "se han reportado a las debidas autoridades".
Luego, la víspera de ir a Nueva York para participar en la conferencia nacional de El Mundo No Puede Esperar, la administración giró órdenes de comparecer, al siguiente día laboral, ante una audiencia para considerar la expulsión. Eso les dejó poco tiempo para consultar un abogado y prepararse. Cuando el decano recibió montones de llamadas de protesta, mandó comparecer a otros estudiantes.
La administración de la universidad es predominantemente republicana, y su presidente, el Dr. William R. Harvey, fue nombrado por Bush a la Federal National Mortgage Association.
El director de asuntos estudiantiles, Bennie McMorris, dijo en una declaración: "El asunto en cuestión no es ‘la administración de Bush, el genocidio en Sudán, la conciencia sobre el SIDA y la homofobia’. Es la conformidad con las reglas y procedimientos de la universidad".
Pero el 2 de diciembre, en una entrevista por el programa radial Democracy Now, el estudiante Bryan Ogilvie dijo:
"Como sabes, el 2 de noviembre fue un día de nacional de paros estudiantiles y protestas contra el gobierno de Bush convocado por la organización El Mundo No Puede Esperar. Así que unos estudiantes se comunicaron con los organizadores de Nueva York y decidimos organizar una protesta en la universidad porque el estudiantado de aquí necesita saber lo que está pasando. Queríamos poner esto en el marco de una multitud de asuntos para despertar conciencia sobre el gobierno de Bush. Hablamos de asuntos como el costo de la guerra de Irak, el SIDA, la homofobia, el complejo industrial penal y muchas cosas más".(democracynow.org/article.pl?sid=05/12/02/1451228)
Aumenta el apoyo
El 2 de diciembre, uno por uno los estudiantes fueron a una audiencia a puertas cerradas. Afuera, unos 50 estudiantes expresaban apoyo. Otros estudiantes de las universidades Howard y Old Dominion, a quienes no dejaron entrar a la universidad, y otros partidarios protestaron en un concurrido cruce cercano.
Precisamente un mes después de que miles de personas protestaron en más de 70 ciudades para lanzar el movimiento Hay que Sacar Corriendo al Gobierno de Bush, a cinco estudiantes de Hampton los castigaron con 20 horas de trabajo comunitario.
Es injusto e indignante que los hayan castigado por manifestarse políticamente, pero es una importante victoria que la administración se tuvo que retractar de expulsarlos. Eso se debe a que los estudiantes se mantuvieron firmes y recibieron mucho apoyo.
Los estudiantes de Hampton han recibido apoyo del mundo académico, de importantes voces afroamericanas y de la sociedad en general. Una declaración de apoyo iniciada por El Mundo No Puede Esperar--Hay que Sacar Corriendo al Gobierno de Bush ha recabado más de mil firmas de destacados académicos y escritores, así como de ex alumnos de Hampton. (Ver la declaración).
Al recibir esta declaración, Judy Richardson, productora asociada de la serie "Eyes on the Prize" y otros documentales sobre la esclavitud, le mandó una carta a la administración de Hampton en la que dice:
"Me he enterado de la posible expulsión de siete universitarios de Hampton por medio de páginas informativas de Internet (una sobre Estudios Afroamericanos y del movimiento de ex delegados del Comité Coordinador Estudiantil Contra la Violencia del Movimiento pro Derechos Civiles). Y, como afroamericana cincuentona, me siento obligada a enviar este correo electrónico para expresar mi fuerte apoyo a los estudiantes".
"Hay represión por todo Estados Unidos"
Después de las audiencias del 2 de diciembre, John Robinson, uno de los estudiantes acusados, dijo:
"Quiero decir que esto no tiene que ver solo con que nos exoneraron. Aunque no nos castiguen, las condiciones en la universidad serán peores si toda nuestra actividad política sigue siendo ‘desautorizada’... Aquí hay muchas conexiones, y es más grave y ridículo en la universidad, pero hay represión por todo Estados Unidos".
Todos los que odian el camino que le están imponiendo a este país pueden sacar lecciones de la lucha de los estudiantes de Hampton y emularlos. Estos son tiempos preñados de peligros y de posibilidades. Tomar una posición valiente, decir la verdad, rechazar arreglos y no dejarse intimidar puede despertar a millones de personas a quienes angustia la dirección del país y el mundo.
La lucha para defender a los estudiantes de Hampton contiene una lección importante. En los años 60, el Movimiento pro libertad de expresión y el movimiento estudiantil en general dieron un avance gigantesco cuando lo atacaron y cuando muchos se sumaron a la lucha al ver que las autoridades lo reprimían (ver la sección de la autobiografía de Bob Avakian sobre el Movimiento pro libertad de expresión en la p.7).
Vale mencionar que muchos de los que fueron a apoyar a los estudiantes dijeron que merecen felicitaciones.
Si bien se ha repelido el grave castigo contra los estudiantes, la lucha sigue. Hay que tomar en serio la última frase de la declaración de apoyo a los estudiantes de Hampton de El Mundo No Puede Esperar: "También exhortamos a que los estudiantes de todo el país envíen declaraciones de apoyo, y que apoyen, fortalezcan y se unan al movimiento Hay que sacar corriendo al gobierno de Bush porque El mundo no puede esperar".