La policía hiere a soldado al volver de Irak

Revolución #035, 19 de febrero de 2006, posted at revcom.us

El 29 de enero, Elio Carrión, un soldado latino de la Fuerza Aérea de 21 años, que estaba de licencia de Irak, iba de pasajero en un automóvil que chocó con una cerca en Chino, una ciudad a 60 km al este de Los Ángeles.

Carrión y su amigo, el conductor, celebraban su regreso tras pasar seis meses en Irak. No se sabe con precisión qué pasó antes del accidente, pero un vecino grabó lo que pasó después de la llegada de los sheriffs.

Carrión está en el suelo, con la cara iluminada por la linterna de un sheriff, a medio metro sobre él, apuntándole la pistola. Es una imagen que se ve mucho en las ciudades iraquíes, como Faluya o Mosul: los soldados estadounidenses con armas pesadas tumban puertas en medio de la noche y apuntan a iraquíes desarmados.

El Los Angeles Times informó que el sheriff le gritaba obscenidades y le decía "que se callara". Luego lo mandó pararse. En el video se ve que Carrión obedece las órdenes, dice que no está armado y que es militar. Le dice al sheriff: "Estamos del mismo lado". Pero en tal situación no importan un comino las palabras. En Irak Carrión es parte de una fuerza militar de ocupación que trata a las masas como "el enemigo"; ahora que ha regresado a Estados Unidos, lo tratan igual a él.

"Me voy a parar", Carrión dice. Pero cuando lo hace, el sheriff le pega tres tiros. Mariela Carrión, esposa de Elio, dijo que también le dieron patadas en la cabeza, lo esposaron y lo arrastraron.

Pero la cosa no paró ahí. Lo llevaron al hospital con tres heridas de bala; una bala le hizo pedazos el fémur (el hueso que va de la pelvis a la rodilla). Días después, unos detectives llegaron a la casa de sus padres y les preguntaron dónde estaba.

Como en otros casos de brutalidad policial, al vecino cubano que lo grabó, José Luis Valdés, lo arrestaron con una orden de detención de hace ocho años de la Florida. Después lo entregaron a la Migra. El sheriff está de licencia (pagada) y no lo han acusado de nada.

La prensa repitió las excusas de los voceros de la policía: "Estaba nervioso", "Quería decir ‘agáchate’ en vez de ‘párate’", o que temía que Carrión lo matara (a pesar de que él tenía la pistola).

Elio Carrión entró a la Fuerza Aérea directamente después de terminar la secundaria y fue un militar leal en Irak Esa noche hizo todo lo que "se debe hacer" en tal situación: obedeció las órdenes del sheriff, no se movió sin permiso y le informó que se iba a parar para no asustarlo. ¡Pero de todos modos el sheriff le disparó! ¿Qué dice esto sobre el tratamiento de la policía a los negros, latinos y otras nacionalidades oprimidas en este sistema? Es una declaración fría de que "vamos a matar a quienes queramos, por lo que sea y como sea, y no pueden hacer nada para pararnos".

Envíanos tus comentarios.