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Revolución #102, 23 de septiembre de 2007
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La historia de los 6 de Jena
Un día de septiembre a finales del verano de 2006, acababa de empezar el nuevo año escolar, en el pequeño pueblo Jena, Louisiana. Un estudiante negro PIDIÓ PERMISO PARA sentarse debajo del árbol en el patio de la prepa. Era un árbol “SOLO PARA BLANCOS”.
El director dijo que lo podían hacer, y así fue.
Al día siguiente, cuando regresaron a clases, había tres DOGALES colgaban del árbol.
Tina Jones, madre de Bryant Purvis, uno de los 6 de Jena, le dijo a Revolución:
“Para los negros esto es muy insultante, porque desde hace mucho tiempo han ahorcado a muchos negros desde los árboles. Nos hizo pensar que los blancos nos decían: ‘Si se sientan debajo de este árbol, vamos a ahorcarlos’. Como negros nos hizo sentirnos así, a pesar de que los blancos decían que solo era una broma. ¿Cómo puede ser una broma cuando eso es lo que les hicieron a los negros por años?”
En respuesta, docenas de estudiantes negros hicieron un valiente plantón de protesta bajo el árbol. El director y el superintendente respondió con una reunión de todos los estudiantes e invitó al fiscal de distrito Reed Walters y a policías. El fiscal les amenaza a los estudiantes negros, diciéndoles que si siguen hablando de los dogales, “tengo el poder de arruinarles la vida de un plumazo”. Los policías vigilaron los corredores de la escuela durante esa semana.
Mientras tanto, no hay ningún castigo serio contra los estudiantes que COLGARON LOS DOGALES. La junta escolar intervino para que no expulsaran a ninguno de ellos y que solo fueran suspendidos por tres días.
El 30 de noviembre, de 2006, un misterioso incendio destruyó el edificio principal de la escuela. Ese fin de semana, Robert Bailey, un estudiante negro de 17 años, fue a un baile escolar donde al entrar lo agredieron sin aviso un grupo de jóvenes blancos. Le pegaron en la cara y lo tumbaron al suelo. Solo arrestaron a uno de los estudiantes blancos y solo lo sentenciaron a libertad condicional con la recomendación de que pidiera disculpas.
La noche siguiente, un joven blanco amenaza con pistola a un grupo de jóvenes negros. Un joven negro le quitó la pistola a jalones para que no les disparara. Y por eso le arrestaron al joven negro y lo acusaron de robo.
El lunes hubo una pelea en la escuela. Un estudiante blanco, Justin Barker, fue a parar al hospital un par de horas y esa noche lo vieron en una función social.
Al día siguiente, el 4 de diciembre, seis estudiantes negros—Robert Bailey Junior, Theo Shaw, Carwin Jones, Bryant Purvis, Mychal Bell y un menor no identificado—son arrestados y acusaron de tentativa de homicidio sin premeditación y tentativa de cometer homicidio de segundo grado. A cada uno les pusieron fianzas indignantes de entre $70,000 a $138,000, por lo cual casi todos permanecieron presos por meses. Y Mychal Bell sigue en la cárcel.
Como una escena de lo tiempos de las leyes Jim Crow, un jurado blanco juzgó a Mychal Bell del 25 al 28 de junio en un tribunal con un juez blanco. El fiscal presentó 16 testigos, casi todo estudiantes blancos. El defensor público que le designaron a Mychal Bell NO PRESENTÓ NI UN SOLO TESTIGO EN SU DEFENSA. El fiscal dijo que los “tenis” de Bell eran “un arma mortal”. A Mychal le condenaron de lesiones agravadas en segundo grado y conspiración.
El 26 de julio, el Departamento de Justicia patrocinó un “foro comunitario” sobre Jena. A cargo estaba Lewis Chapman, el agente a cargo del FBI en Nueva Orleáns; el fiscal federal Donald Washington. Hablando de cómo slas autoridades manejaban el asunto, Washington dijo: “Todos los procedimientos eran ‘normales’ y no ‘anormales’”. O sea que está diciendo que los jóvenes negros deben ir a la cárcel por luchar contra el racismo, que la supremacía blanca es lo NORMAL, que así funciona el sistema.
EN CADA MOMENTO, las autoridades federales, la policía y los tribunales han intervenido para hacer cumplir la supremacía blanca y asegurarse de que le procesaran judicialmente a ese joven negro.
La lucha para liberar a los 6 de Jena
El 31 de julio, día de la sentencia a Mychal Bell, unas 300 personas hicieron un mitin de apoyo a los 6 de Jena frente al tribunal donde iban a sentenciar a Mychal Bell. La semana antes, las autoridades mandan cortar el “árbol solo para blancos”.
En agosto, un grupo de abogados de Monroe, Louisiana, ofreció defender a Bell en su apelación, pro bono. El tribunal aceptó varias peticiones en las que señalan que no recibió un juicio justo, que violaron sus derechos constitucionales, que deberían revocar la condena y que se debería hacer un nuevo juicio o anular todos los cargos.
El 24 de agosto se llevó a cabo una audiencia de fianza de Mychal Bell. Miembros de la comunidad negra se presentaron para testificar en defensa de Bell y asegurarle al juez que él estaría en manos de la comunidad si sale bajo fianza. El juez descartó a la ligera el testimonio de quienes testificaron a favor de Mychal Bell y le negó la fianza; dijo que era un “peligro” a la comunidad y comentó sobre los supuestos “antecedentes penales” de Bell, que consisten de delitos menores. Luego, con un insulto racista, comparó a la comunidad negra a “una cerca que rodea el ganado” y les amonestó por no haber levantado la cerca.
Los estudiantes de la prepa Jena siguen oponiendo resistencia. El 28 de agosto, ocho o nueve estudiantes fueron a la escuela con playeras que decían “Libertad para los 6 de Jena”. Pero otra vez cayó el martillazo. El rector anunció por altoparlante que no se podían poner esas playeras porque “ofenden” a ciertas personas. Así que están prohibidos.
***
Todo esto creó el marco de este mes. El 4 de septiembre, los abogados de Mychal Bell fueron ante la Corte Judicial 28 con una abundancia de pruebas de que violaron los derechos constitucionales de Bell durante su juicio. El juez J.P. Mauffray Jr. rechazó todas las apelaciones de los abogados menos una. Descartó la condena de conspiración porque lo juzgaron indebidamente como adulto. Pero NO descartó la condena, como adulto, por lesionas agravadas en segundo grado. Al cierre de esta edición, todavía podrían sentenciar a Bell a 15 años de cárcel.
Luego, el 14 de septiembre, en respuesta a una apelación de urgencia de los abogados defensores de Mychal Bell y el crecimiento de movimiento por todo el país de libertad para los 6 de Jena, el Tribunal de Apelaciones del Tercer Circuito de Louisiana descartó la condena por lesiones agravadas en segundo grado porque lo juzgaron indebidamente como adulto. Esta es una importante victoria para el pueblo, pero todavía es muy parcial e inicial. Al cierre de esta edición, el fiscal anunció que iba a apelar a los tribunales superiores para que pueda volver a acusarlo como adulto, Bell sigue preso y las muy serias acusaciones contra los demás miembros de los 6 de Jena siguen en vigor. Incluso esta victoria inicial no se hubiera dado sin la valiente postura de la gente de Jena y el creciente movimiento político por todo el país para liberar a los 6 de Jena. La lucha para liberar completamente a los 6 de Jena y obligar al sistema a retirar TODAS las acusaciones dista mucho de haber terminado y tiene que avanzar a pasos agigantados.
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