Obrero Revolucionario #1236, 11 de abril, 2004,, posted at http://rwor.org
Recibimos la siguiente convocatoria:
¿Qué significa que el presidente de Estados Unidos pueda declarar que un ciudadano estadounidense es "combatiente enemigo" y meterlo en una cárcel militar indefinidamente, sin que lo acusen de ningún delito? Pronto la Suprema Corte federal decidirá si los tribunales tienen el derecho de examinar tal orden.
¿Qué significa que las fuerzas armadas estadounidenses puedan agarrar a individuos en cualquier país del mundo, declararlos "combatientes enemigos" y encarcelarlos fuera del alcance del derecho nacional o internacional? A muchos los llevan a una cárcel bajo el control exclusivo de Estados Unidos, financiada por el Congreso, donde los tienen aislados, indefinidamente, sin acusarlos de ningún delito. A algunos los amenazan con juzgarlos ante una comisión militar que no cumple las normas básicas de la justicia.
Si la Suprema Corte aprueba tales acciones, ratificará los "poderes de tiempo de guerra" que el presidente ya se ha atribuido, sin que el el Congreso declare la guerra y casi sin supervisión judicial o del Congreso.
El 20 de abril la Suprema Corte oirá los argumentos acerca de si el presidente tiene el derecho de establecer una "zona fuera de la ley" en el centro de detención de Guantánamo, Cuba. El 28 de abril, oirá los argumentos acerca de si el presidente tiene el derecho de declarar que un ciudadano estadounidense es "combatiente enemigo", meterlo en la base de la Marina de Charleston, Carolina del Sur, y negarle el derecho de apelar a un tribunal.
Creemos que no se puede permitir que el presidente establezca un "agujero negro jurídico" donde hundir a los arrestados, sin recurso a recurso a los tribunales o al derecho internacional. Representamos una variedad de puntos de vista acerca de por qué y cómo ha surgido tal situación y de lo que se necesitará para alcanzar justicia. Pero estamos de acuerdo en que esta nueva categoría de "combatiente enemigo" por orden presidencial es peligrosa, injusta, ilegal e inmoral, y en que no podemos permitir que exista.
Hay que romper el silencio ante tan peligroso suceso y hacer oír nuestra oposición. ¡Súmate a nosotros frente a la Suprema Corte el 20 de abril y el 28 de abril para decir NO en voz alta y clara!
Nuestro futuro y el futuro de centenares de presos anónimos están pendientes. Estamos ante una encrucijada: lo que está en juego es cuánto poder se podrá atribuir el presidente. Guardar silencio es consentir.
Lista parcial de endosantes:
Amnistía Internacional USA
Comité en Defensa de la Carta de Derechos
Red Triángulo Azul
Fundación Primera Enmienda
Comité Nacional contra las Leyes Represivas (NCARL)
Gremio Nacional de Abogados
¡Rehusar & Resistir!
Elaine Cassel, Ojo a los Derechos Civiles
Stephen Rohde, abogado de derechos civiles
Comisión de Derechos Humanos de Guantánamo