De nuestra corresponsal frente al hospicio de Terri Schiavo

Encuentros extraños

Sunsara Taylor

Obrero Revolucionario #1274, 10 de abril, 2005, posted at rwor.org

El caso de Terri Schiavo ha sido tan importante en Estados Unidos por una sola razón: los fascistas cristianos, dentro y fuera del gobierno, han aprovechado su vida y su muerte para azuzar una atmósfera de confusión tóxica. En realidad, no es un movimiento que surgió desde abajo sino dirigido desde arriba.

¿Pero quiénes son las fuerzas que esos derechistas lograron movilizar? ¿Cómo respondieron a la intervención de unas comunistas revolucionarias? Este informe es de nuestra corresponsal Sunsara Taylor, que pasó dos días frente al hospicio donde estaba Terri Schiavo.

Del los apuntes de nuestra corresponsal

Dedicado a Michael Schiavo, que defendió la verdad ante una inquisición de ignorancia, crueldad y terror

Domingo, 27 de marzo

Camino a la Florida y al hospicio de Terri Schiavo


Hablando en 1995 de los médicos que practican abortos, Randall Terry dijo: "Cuando yo esté en el poder, o los que comparten mis ideas estén en el poder, ustedes deben huir, porque los perseguiremos, los juzgaremos y los ejecutaremos".

Hoy Terry (y los que comparten sus ideas) andan envalentonados. Con el caso de Terri Schiavo, han pasado por alto la voluntad popular y el estado de derecho, y defienden las normas sociales más crueles, mezquinas y vengativas. Es una conspiración que alcanza los más altos niveles del país, al presidente Bush y al Congreso, que se reunió a medianoche para sacar una ley.

Me da asco oír que los hermanos Bush son "defensores de la vida" porque tienen las manos manchadas de sangre de tantos presos ejecutados (en Texas y Florida) y de tantos iraquíes y estadounidenses muertos en una guerra injusta.

Me da asco ver la palabra "vida" escrita en la cinta roja que cubre la boca de manifestantes irreflexivos y santurrones, que convirtieron la vida de Terri Schiavo en un circo de ignorancia.

Camino a la Florida, mi amiga Debra y yo decidimos ponernos una cinta en la frente con las palabras: "Pensamiento crítico". Lamentablemente, esto es lo que perdió Terri Schiavo cuando se le dañó el cerebro hace 15 años, y es lo que los teócratas quieren abolir hoy.

Randall Terry, y la gente de su calaña, piensan en serio conquistar el poder. "Nuestra meta es una Nación Cristiana. Tenemos un deber bíblico. Dios nos ha llamado a conquistar este país. No queremos igualdad. No queremos pluralismo. La teocracia quiere decir que Dios reina. Óiganlo bien: Dios reina". ¡A este hombre le permiten salir en la televisión quejándose de que Jeb Bush no contesta sus llamadas! Le han dado, y piensa que se merece, una línea directa a los centros del poder. Le dijo al periódico USA Today: "Esto va a costar carísimo".

Hace diez años participé por primera vez en la defensa de la última clínica de aborto en Fargo, Dakota del Norte. La Operación Rescate (un grupo fundado por Randall Terry que ataca las clínicas) estaba bloqueando la clínica, y un puñado de personas fuimos a defender a las pacientes y los médicos.

Randall Terry y Flip Benham estaban ahí. Hablé con ellos. Solo empezaba a captar que no tenemos puntos en común, que esa gente no tiene nada que contribuir al avance de la humanidad. que no les importa un comino la razón o la calidad de vida. que defienden con gusto la más brutal y vengativa interpretación textual de la biblia.

Hoy están manipulando la vida de Terri Schiavo de la misma manera que manipulaban la "santidad de la vida del feto" para subyugar a la mujer. Son las mismísimas gentes. pero ahora andan pavoneándose por los centros del poder. Cada vez tienen más poder.

Y esta vez sé lo que debo llamarlos: fascistas cristianos. Sé que no representan la voluntad del pueblo. Sé que no hay nadie en los centros del poder que les oponga resistencia. Pero también sé que su futuro no es el único.

Hoy soy atea y comunista consciente. Mientras los fascistas cristianos siguen en busca del poder estatal absoluto, y mientras el resto del gobierno les cede terreno, sé que hay una fuerza, un líder y una dirección capaz de crear un futuro donde la humanidad quiera vivir.

Vamos camino a la Florida, donde vamos a deslindar campos para que otra gente se nos una y para librar una batalla por el futuro. Es una batalla que no podemos pasar por alto. una batalla por un futuro comunista.

Lunes, 28 de marzo

El horror frente al hospicio


Frente al hospicio de Terri Schiavo vemos una combinación de asesinos lunáticos que piden una teocracia vengativa y creyentes bienintencionados pero irreflexivos.

Nos damos cuenta de que estamos cerca cuando vemos un camión con fotos pornográficas de fetos ensangrentados y odiosos lemas acerca de "maricones y sodomitas". Al otro lado de la calle, dos mujeres tienen letreros de: "Manden la Guardia Nacional" y "Jeb y George Bush, ¿son hombres o gallinas?".

Nos sentamos solas y empezamos a preparar nuestros letreros. Un niño se nos acerca y dice que quiere jugar. Él se ríe y su madre nos mira con aprobación, pero cuando ve nuestros letreros empieza a gritar que se aleje de nosotras. Dicen: "Que la Edad Media se quede en el pasado, No a la teocracia fascista cristiana. Checa el Partido Comunista Revolucionario, rwor.org" y "Necesitamos moral, pero no la moral tradicional, BobAvakian.net, presidente del Partido Comunista Revolucionario".

Le digo de manera despreocupada: "No somos contagiosas".

Pero ella no está de acuerdo: "¡Sí lo son! ¡Son unas malvadas!".

Toda la experiencia es como viajar en una máquina del tiempo o pasar a otra dimensión. Nuestras calcomanías de "Pensamiento crítico" me parecen más importantes que nunca. En nuestro universo, el mundo existe en realidad, y podemos conocerlo más profundamente con la ciencia y el pensamiento crítico. Preocupados por el futuro de la humanidad, podemos aprender a cambiar el mundo para resolver los problemas actuales, incluso los difíciles problemas éticos.

Pero estamos hablando con gente que cree que la verdad emana de la biblia, que es la "palabra revelada de dios". Para ellos la ciencia y las ideas que no están de acuerdo con la biblia son puras tentaciones de Satanás. La maldad "nos rodea".

La multitud se pone brava cuando Randall Terry habla en una rueda de prensa. El único hombre negro que veo todo el día también es cristiano, pero tiene letreros que dicen: "Dejen a Terri en paz". Durante la rueda de prensa, levanta los letreros al lado de Randall Terry, pero una señora se los arrebata; la multitud lo rodea, le grita insultos y lo empuja. Llama a la policía.

Parece un linchamiento.

CNN.com informó:

"Después de la declaración de Randall Terry (un militante contra el aborto que es vocero de los Schindler, los padres de Terri Schiavo), unas militantes de un grupo que se llama Brigada de la Juventud Comunista Revolucionaria se apoderaron del micrófono y tildaron a Randall Terry de 'matón fascista cristiano' que se entromete en 'los asuntos más íntimos de vida y muerte'".

"'El cerebro de Terri Schiavo no funciona y no se va a recuperar. Que muera en paz', dijo Sunsara Taylor, militante del grupo".

Un agnóstico del Pinellas Park


Un señor de mediana edad me dice que Pinellas Park, donde está el hospicio, se conoce como "el parque de los que no tienen un céntimo". Se nos acerca porque le encanta ver gente con la que está de acuerdo.

No cree que el gobierno deba entrometerse como ha hecho en el caso de Terri Schiavo. Dice que abandonó la religión cuando era universitario porque vio un letrero que decía: "Necesitamos agnósticos". No sabía qué quería decir, pero cuando investigó decidió en el acto que eso es lo que era.

Le pregunté si sabía mucho de Randall Terry y su grupo. Me contestó: "Es el tipo que pone dinamita en las clínicas, ¿no?".

Examina nuestros letreros para ver con qué grupo militamos. Lee las palabras "Partido Comunista Revolucionario" y dice: "De pronto voy con ustedes". Dice que está checando los sitios web de todos los grupos para entender lo que está pasando en el país y lo que se puede hacer.

Durante los dos días que pasamos en Pinellas Park, varios vecinos se nos acercaron para hablar. Una señora responde con entusiasmo al ver las palabras "Partido Comunista Revolucionario" y nos dice que vio militantes del PCR en una protesta contra Bush en Washington, D.C.

Una multitud de contradicciones


En cierto momento, Debra y yo tenemos en alto nuestros letreros y una multitud nos rodea. Nos gritan y tratan de hacernos desaparecer detrás de un mar de letreros. Les contestamos y hablamos con los jóvenes (lo que enfurece a los padres, porque estos se ríen y quieren platicar con nosotras). Mantenemos nuestros letreros en alto para que sean visibles.

De repente se oye una voz con acento de Alabama por sobre la multitud. Al comienzo solo oigo que dice que tiene una relación personal con Jesucristo. Habla del cristianismo auténtico, de lo magnífico que es este país y de los letreros. Parece una voz más de oposición a lo que nosotras decimos.

Pero me doy cuenta de que está gritando a las señoras que nos tienen rodeadas. Las llama hipócritas. Les pregunta si este es un país libre o no.

Una señora grita con voz estridente: "¡Dime un solo país donde el comunismo ha tenido éxito!".

En medio de todo el ruido es imposible oír, y muchos menos contestar, pero se oye una voz que le contesta: "Funciona bien en Cuba".

Me doy la vuelta. No creo que Cuba sea un país socialista, pero me gusta que haya alguien que piensa en la revolución. Veo a un estudiante de prepa negro, que parece fuera de lugar, y su amiga blanca.

Son vecinos también y la joven se maravilla de nuestra valentía. El joven me pregunta qué tipo de comunista soy y por quién voté. Cuando le digo que no voté por nadie pero me uní con la oposición a Bush, dice que eso es interesante. Es miembro del Partido Verde y apoyó a Howard Dean porque "era el candidato más radical".

Los dos saben mucho del caso de Terri Schiavo. Saben que no puede sentir ni pensar y que una parte del cerebro es líquido. Dicen que la mayoría de los estudiantes piensan que se debe permitirle morir, pero se quejan de que hay mucha apatía.

La joven dice muy bajo: "Lo espantoso es que hace tres años hubiera estado con ellos debido a la influencia de la iglesia en mi vida". Cuando le pregunto cómo cambiaron sus ideas, mira a su alrededor lentamente y me dice: "Situaciones como esta. Hay tanto odio e hipocresía".

Hablamos con los corresponsales y nos damos cuenta de que muchos quieren entender por qué el caso ha llegado a ser tan importante. Muchas veces cuando uno nos entrevista, los demás nos escuchan, y a veces asienten con la cabeza. Les interesa especialmente cuando trazamos los vínculos con las luchas en torno a la evolución y la ciencia.

Aunque rechazan nuestra posición comunista, tienen mucha unidad con nosotras porque todos somos de la "comunidad basada en la realidad". Muchos son de Nueva York, que los derechistas llaman "Sodoma".

¿De quiénes son los jóvenes?


En un momento, cuando estamos platicando con unos jóvenes demócratas que trabajan para el canal Fox News Channel, el joven de Alabama se nos acerca y nos pregunta: "Oigan, chicas comunistas. ¿No tienen literatura para nosotros?".

Le damos unos ejemplares del Obrero Revolucionario y lo escuchamos. Dice que odia el capitalismo pero que piensa que el comunismo es igualmente malo. Nos explica que dios debe gobernar porque "todos los sistemas humanos están predestinados a fracasar". Dice que el capitalismo es un sistema de avaricia que deja en la pobreza a los que trabajan más duro, y que el comunismo es un sistema en que el gobierno controla todo, incluso el pensamiento.

Sonríe cuando le digo que si así fuera, yo tampoco sería comunista. Hablamos de lo que son el comunismo y el socialismo, y de los nuevos planteamientos del presidente Bob Avakian del PCR. Tiene muchas preguntas, entre ellas cómo trataríamos a los cristianos después de una revolución. Él no es lo que pensábamos y nosotras no somos lo que él esperaba tampoco. Pura discordancia cognoscitiva por todos lados.

Él y su amiga me impresionan mucho. Son jóvenes proletarios que no ven futuro. Tenía tantos problemas que poco después de la prepa decidió suicidarse. Está muy confundido sobre lo que es el ateísmo. Dice: "Era ateo también. Odiaba a dios".

Pero conoció a una chava y decidió no matarse. Fue la primera persona que no lo juzgó, y lo acercó a la religión. Dice que sintió amor y cariño cuando aceptó a Jesús en su corazón y que no quería experimentar más la alienación y confusión que tenía antes.

Me dice que quiere participar en una milicia cristiana. Cuando le pregunto por qué, su amiga responde en voz alta: "Me arrestaron mil veces así que decidí mandar a la mierda la ley".

Los dos me hacen pensar en los chavos del Medio Oriente, que son muy rebeldes, pero los atrae el fundamentalismo islámico porque es la fuerza "de oposición" más potente que ven. Estos jóvenes de la Florida odian el gobierno, el capitalismo e incluso la mayor parte de la iglesia, pero los atraen las fuerzas más opresivas del país.

Hablamos mucho de la ciencia, de lo que es y lo que no es. Nos dicen: "Deben explicar eso a los demás. No lo saben".

Otra vez en Nueva York


Cuando regresamos a Nueva York, nos llama el canal Fox News y nos entrevistan los programas Hannity & Colmes y Fox & Friends.

Son los mismos programas que han presentado la versión de una enfermera totalmente desprestigiada y a un adivino que decía que Terri Schiavo estaba consciente.

Defendemos la ciencia, la razón y el estado de derecho, y decimos que el mundo no tiene que ser así, pero lo que más les interesó a los televidentes fue que somos comunistas. En la internet se debatió si Fox escogió a unas comunistas para desacreditar la opinión de la mayoría.

En realidad, se han oído muy pocas voces de oposición a los fascistas cristianos. Es un crimen que los demócratas han estado pasivos y callados. Jesse Jackson pidió que mantuvieran viva a Terri Schiavo. Unos médicos se hicieron oír valientemente, pero no se movilizaron fuerzas organizadas. Le toca a los comunistas. Como dijo un televidente: "¿Qué significa que un 'puñado de comunistas' están más conectados con el pueblo estadounidense que el presidente?"

Del New York Times del 28 de marzo, informe sobre Terri Schiavo desde el hospicio:

"Dos mujeres de Nueva York llegaron en la tarde con carteles en blanco donde iban a escribir los lemas: 'Que la Edad Media se quede en el pasado' y 'Necesitamos moral, pero no la moral "tradicional'. Una, Sunsara Taylor, vocera de la Brigada de la Juventud Comunista Revolucionaria, dijo que ella y su colega, Debra Sweet, una militante del derecho al aborto, iban a pasar dos días para que se oyera 'el otro lado'.

"'Lo que vamos a decir es que no queremos una teocracia', dijo la señorita Taylor. 'No queremos que este país se acerque paso a paso al fascismo cristiano'.

"La señorita Sweet dijo que reconoce a varias personas que ha visto protestando frente a las clínicas de aborto por todo el país. 'Así se pasan la vida', dijo".