Revolución #205, 27 de junio de 2010


Un mensaje a los participantes en el Foro Social Estadounidense

En las últimas semanas, ha sido fácil detectar la ola de entusiasmo e inspiración que ha estado creciendo para el Foro Social Estadounidense (FSE) en Detroit del 22 al 26 de junio.

Mientras millones de barriles de petróleo salen a borbotones en el Golfo de México, miles de activistas están viajando en bicicleta a Detroit… desenchufándose del uso de combustibles fósiles y reuniéndose para soñar con un mundo sin éstos y sin las guerras provocadas por éstos…

Mientras el ejército estadounidense desate muerte desde el cielo sobre la gente de todo el Medio Oriente… miles están reuniéndose para vivir la idea de que la vida humana tiene el mismo valor en cada rincón del planeta…

Mientras expulsan a una cantidad sin precedente de pobres y negros, en particular mujeres negras, a la calle, sus hogares cerrados con tablas, activistas de vivienda están preparándose para construir ciudades de carpas o reparar casas destartaladas y devolverlas a sus habitantes…

Mientras también declaran la ilegalidad de enseñar la verdad sobre cómo Estados Unidos le robó Arizona a México así como ser de ascendencia mexicana, los inmigrantes y las personas nacidas en Estados Unidos están reuniéndose para conocer la historia y cultura unos de otros y para organizar desobediencia a estas leyes fascistas anti-inmigrante…

Mientras nos bombardean cada día con la cultura que refuerza la alienación, el egoísmo y la ignorancia… los artistas están desencadenando su imaginación y compartiendo sus destrezas para embellecer una ciudad decaída, forjar comunidades con morales diferentes y celebrar la lucha y la alegría de crear un mundo distinto…

Es vigorizante detectar la ola de trabajo duro e ideas nuevas, de sueños y esperanza que está llevando a Detroit a decenas de miles de activistas y los aspirantes a activistas. Además, es refrescante ver desmentidas las ideas de que “éste es el mejor mundo posible” y de que por el exceso de apatía o egoísmo que la gente padece, no hace nada al respecto.

Desafortunadamente, mientras nos reunimos, todos sabemos que las atrocidades que nos han unido siguen multiplicándose… más desperdicios tóxicos echados al aire y a los mares… más familias y niños desalojados… más mujeres brutalizadas y violadas, de las guerras civiles del Congo a las universidades y hogares en el “tan civilizado” Estados Unidos… más campesinos forzados a abandonar sus tierras y atravesar fronteras militarizadas en la lucha desesperada para sobrevivir… más guerras… más tortura… más pesadillas para la humanidad, aparentemente sin fin.

Todo eso, porque el sistema capitalista imperialista tiene fuerte dominio de la economía global, defendido por su poder estatal muy represivo y enormemente violento. Este sistema continuará frustrando y a veces reprimiendo violentamente a aquellos que sueñan con un futuro mejor y trabajan para éste, mientras que detente el poder estatal.

Esto no quiere decir que los esfuerzos e ideas de nosotros que estamos reuniéndonos no tienen significado ni impacto.

Todo lo contrario. Debido precisamente a lo desesperadamente que la humanidad necesita un mundo radicalmente diferente, es muy valioso que las personas estén reuniéndose para intercambiar y forcejear con ideas y para explorar y compartir nuevos modelos de comunidad e interacción con el medio ambiente. Es difícil concebir que se podría arrancar algo mejor de esta pesadilla sin compartir, esforzarse, descubrir, trabajar duro y alegrarse de parte de las decenas de miles de personas reunidas esta semana. Todos los que se interesen en un mundo mejor deberían aprender y recibir estímulo de todo esto y continuarlo.

Pero existe un modelo que se ha practicado y ha resultado muy liberador, un modelo rico en logros, lecciones e importancia para el mundo de hoy, un modelo que casi brilla por su ausencia en la bulla, discusiones planeadas y forcejeo antes del Foro y que se anticipa en el Foro. Ese modelo es el de la auténtica revolución comunista.

Ahora, si no eres un lector regular de este periódico, es probable que la gran mayoría de lo que has oído acerca de “la revolución comunista” tenga poco que ver con la realidad. Así que déjalo a un lado y hazte las siguientes preguntas:

Si existiera un modelo en que los campesinos y los trabajadores antes explotados tomaran y reestructuraran la economía, la agricultura y el sistema de salud de su país para que sirvieran a las necesidades del pueblo, en lugar de servir a la exportación y las ganancias de particulares, y en el transcurso de 27 años (de 1949 a 1976) aumentara la expectativa de vida de 32 a 65 años para una cuarta parte de la población del mundo, ¿no cabría examinarlo?

¿Y que si este modelo no permaneciera ahí sino que transformara radicalmente la cultura y las actitudes humanas, haciendo añicos miles de años de ignorancia y tradiciones opresivas? ¿Y que si esto reemplazara la actitud común de que “casarse con una mujer es como comprar una yegua; la montaré y la azotaré como quiera” por una cultura vibrante que promoviera las ideas de “todo lo que un hombre puede hacer una mujer puede hacer también” y “¡las mujeres sostienen la mitad del cielo!”? ¿Y que si este modelo extendiera la educación de forma masiva y la tasa de alfabetismo de mil millones de personas aumentó de apenas el 15% al 80% para que pudieran participar los anteriormente excluidos del trabajo intelectual, incluso ayudando a administrar y dirigir la sociedad?

¿Y que si en esta lucha grande y liberadora, la dirección revolucionaria no hubiera trabajado para atrincherarse y consolidar el poder para sí mismo (que la opinión común dice que toda dirección hará), sino que luchara en cada etapa para hacer que millones defendieran y participaran en el poder estatal revolucionario que hizo posible todo esto? ¿Y que si esta dirección se esforzara en cada etapa para alentar la participación de millones de personas para supervisar a los que dirigían la sociedad y para asumir la responsabilidad y contaran con capacitación y que se desencadenara su capacidad de hacer, de participar cada vez más para administrar la transformación constante de la sociedad hacia la liberación? ¿Y que si esto elevará la conciencia de las personas para que vieran que la meta es la emancipación de la humanidad en todo el mundo?

Esta experiencia realizada por casi mil millones de personas de una nación anteriormente oprimida y saqueada por el imperialismo en el transcurso de 27 años muy ricos en experiencias ¿no ameritaría un profundo examen? ¿No sería un modelo como éste, donde se lograron las cosas más liberadoras que nunca antes habían sido imaginadas y donde también se quedó corto y asumió enfoques y tuvo resultados que minaron la meta de la liberación, algo que todos los que están soñando y trabajando hacia un mundo mejor tienen que chequear profundamente y del cual aprender?

De hecho, todas esas cosas se lograron durante la primera etapa de las auténticas revoluciones comunistas en el mundo, o sea, la experiencia de la Unión Soviética de 1917 a mediados de los años 50 y en la China bajo Mao Tsetung de 1949 a 1976 (antes de que el capitalismo fuera restaurado en ambos países). Todo esto alcanzó su más alta cima durante la Revolución Cultural de China la cual no era, como la burguesía reclama, un baño de sangre destruye-cultura de parte de Mao hambriento de poder, sino un esfuerzo dirigido por Mao el cual por diez años no solamente logró impedir la restauración del capitalismo en China sino que lo hizo mediante la participación más grande de las masas y la revolucionarización de la sociedad por parte de los anteriormente oprimidos que nunca antes había sido alcanzada.

Sí, han enterado y difamado esa experiencia, el mismo sistema capitalista y sus representantes a los cuales esas revoluciones derrocaron han regado mentiras sobre ellas y las han distorsionado. Pero esto solo puede recalcar la importancia de aquellos que se oponen a los crímenes y al sistema de capitalismo para que investiguen seria y profundamente.

Pero eso no es todo. Se ha resumido la rica experiencia de esas revoluciones y se le ha extraído lecciones, tanto las lecciones y los avances como las deficiencias y errores, y se han combinado esas lecciones con los grandes cambios en el mundo desde ese entonces, así como las experiencias y las ideas desarrolladas en otras esferas del esfuerzo humano, para forjar una nueva visión de la sociedad socialista. Se han hecho importantes avances en el método y enfoque para comprender y transformar la realidad, incluida la sociedad. Además, se ha aplicado todo esto a las cuestiones de cómo una revolución podría triunfar concretamente en un país tan poderoso como lo es Estados Unidos. Se ha combinado todo esto en una nueva síntesis de la revolución y el comunismo y todo esto tiene tremendas implicaciones para la lucha de la humanidad por liberarse.

La persona que ha hecho este trabajo es Bob Avakian.

Como lo plantea el Manifiesto del Partido Comunista Revolucionario: “…en la nueva síntesis desarrollada por Bob Avakian, se halla una analogía a lo que hizo Marx al comienzo del movimiento comunista: establecer en las nuevas condiciones que existen, después del fin de la primera etapa de revolución comunista, un marco teórico para el renovado avance de esa revolución”

Es un enorme aporte para la humanidad que alguien haya hecho este trabajo de rescatar y construir sobre la experiencia de la auténtica revolución comunista. Y el que este líder experimentado y probado esté dirigiendo enérgicamente a un partido revolucionario en las entrañas del imperialismo hoy cambia el juego por lo que se refiere a las posibilidades de plasmar la revolución en nuestra vida.

Así que nosotros te invitamos y te retamos, mientras te reúnas para aprender de las ideas, experiencia y sueños de otras personas reunidas y para compartir los suyos, a que incluyas un examen con los ojos abiertos y frescos de esta experiencia tan liberadora y de las posibilidades incluso más grandes para el futuro, a partir de tu interacción y discusión de esta nueva síntesis y su propia aplicación de la misma.

Muchos de nosotros que estamos construyendo el movimiento para esta revolución estarán en el Foro Social Estadounidense. Tenemos muchas ganas de aprender de tu experiencia e ideas… sus más grandes esperanzas, y sus ideas más atrevidas… y tenemos ganas de compartir contigo nuestro análisis de la revolución que necesitamos y de la dirección que tenemos.

Ven a chequear uno de nuestros seminarios u otras actividades en las que estaremos participando que están enumeradas en revcom.us. De mayor importancia, consigue una de las obras de Bob Avakian anunciadas en las páginas centrales de este periódico.

Otro mundo SÍ es posible. ¡Reunámonos y demos un salto colectivo en hacer esto real!

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