Una reunión con una abogada acerca de donar a BA en Todas Partes
16 de diciembre de 2013 | Periódico Revolución | revcom.us
De un lector:
Me reuní con una abogada negra de unos 40 años de edad y un eje de su trabajo es el cauce de la escuela a la prisión, en particular con relación a los niños minoritarios discapacitados.
Para concertar la cita, le di la declaración de misión del Instituto BA y la entrevista de Cornel West a Bob Avakian y le hablé muy brevemente de la campaña BA en Todas Partes — de que es una campaña para recaudar la clase de dinero para lograr lo que plantea la declaración de misión: hacer que se conozcan la obra y la visión de BA por toda la sociedad. Le dije que como resultado del trabajo de BA, existe una viable visión y estrategia para la revolución y una forma radicalmente diferente en que se podría organizar el mundo. Ella había escuchado la entrevista a BA en el programa de Michael Slate, y nos habíamos hablado anteriormente de BA y la Constitución para la Nueva República Socialista en América del Norte, poco después del veredicto en el caso de Trayvon Martin.
Cuando le expliqué de BA en Todas Partes y le pedí una reunión, ella quería saber para qué estábamos recaudando dinero. Le dije que no recaudamos dinero para un proyecto específico ahora, aunque sí hay varios proyectos para los que hemos recaudado dinero de modo más definido, tales como los 20.000 dólares que habíamos recaudado en el verano para las giras de las furgonetas que llevaron la campaña a los barrios de ciudades importantes. Parecía que eso le causó una buena impresión. Le dije que ahora estamos recaudando dinero para dar un salto general: un dinero para unas campañas nacionales de publicidad y promoción de las películas, para las giras de las furgonetas con unos voluntarios que viajen a varias partes del país, etc. Me preguntó cuánto tratábamos de recaudar, y le dije cientos de miles de dólares. Me aceptó salir a almorzar y hablar de esto para la otra semana.
Cuando nos reunimos, comencé por contarle de BA, su historia, el trabajo que había hecho, lo que su trabajo y su dirección abren en este momento en la historia y lo que se puede transformar cuando la gente por toda la sociedad se entere de esto y forcejee con lo mismo: la posibilidad concreta de una manera radicalmente diferente de organizar el mundo. En la conversación, hablé mucho y ella principalmente planteó preguntas. No estoy seguro de que las siguientes preguntas estén en el orden en que ella las planteó (ni estoy seguro de que mis respuestas siguieran las preguntas específicas o que tal vez ocurrieran en otras partes de la conversación), pero lo siguiente da una idea.
Algo que mencioné al hablar del trabajo de BA era su trabajo acerca de "la contradicción de George Jackson": lo que George Jackson reconoció en un sector de la juventud, aquellos que no creen que van a vivir hasta tener 18 o 21 años de edad y cómo hacer que esos jóvenes se aproximen a la lucha por una futura revolución. Hablé de las maneras en que el Partido Pantera Negra jaló por dos rumbos al respecto y que BA ha dedicado mucha atención a estudiar y forcejear en serio con eso a fin de solucionarlo.
Una pregunta que me planteó era algo como que: ¿cómo es que el partido va a construir este movimiento fuera de las estructuras existentes que lo confinarían a las condiciones actuales? Debí haberle preguntado más sobre lo que quería decir con esa pregunta. Supuse que se refería a las elecciones, así que expliqué que la meta no son las elecciones, pero la verdadera revolución por la cual estamos construyendo un movimiento, con la estrategia de luchar contra el poder, y transformar al pueblo, para la revolución. Al parecer, eso respondió en parte a su pregunta, pero luego la mencionó de nuevo al hablar de otra cosa.
Tras exponer mucho sobre la revolución y la nueva síntesis del comunismo, le pregunté qué pensaba. Me dijo que le gustaba todo lo que dije y que cree que eso es lo que hace falta, pero no podía ver cómo las personas pudieran tener suficiente criterio y reflexión como para adentrarse en esto. Dijo que hace falta un cambio radical. Le pregunté por qué, y dijo que cada mañana escucha la emisora de radio NPR y al oír el informe sobre la bolsa de valores, se pregunta por qué la gente no se enoja y se indigna porque la bolsa sigue subiendo y toda esa gente percibe mucha plata, pero que ella acaba de venir de una escuela donde los niños no pueden llevar los libros a casa porque no hay suficientes libros. Se indigna por la desigualdad y le inquieta la falta de indignación en masa. Hablé de la base para esta revolución en la realidad de lo que este sistema significa concretamente para el planeta y la gente en Estados Unidos y por todo el mundo y de que existe una potencial columna vertebral para la revolución entre aquellos cuya vida cotidiana ya es un horror y un caos. Hablé de que el funcionamiento de este sistema moldea las ideas y el modo de pensar de la gente, incluyendo los veredictos sobre el comunismo, y que algunas personas buscan la manera de llevar a cabo el cambio radical pero no consideran el comunismo, y que es preciso transformar esa situación — poniendo las cosas en claro por lo que respecta a la experiencia histórica y, de mayor importancia, llevarle a la gente la obra de BA en una forma en que pueda empezar a verla como algo legítimo y una alternativa concreta con organización, dirección y un movimiento para la revolución que está luchando por esto en el mundo.
En cierto punto mientras yo hablaba de la experiencia histórica de la revolución comunista en la Unión Soviética y China, ella dijo que no recuerda nada en lo que había aprendido sobre todo eso. Le dije que por lo general no nos han enseñado nada sobre el tema, y cuando sí lo hacen, se trata de calumnias y propaganda. Le enseñé el número especial del periódico [#323], lo que hojeó por unos minutos.
También me preguntó cómo medimos la influencia que estamos ejerciendo, la gente que se está transformando y está entrando en este movimiento. Le dije que una forma importante es el lectorado de la página web y el periódico — el número de personas que visitan la página web con regularidad y el número de suscripciones y el número de personas que adquieren el periódico cada semana, pero en particular aquellos que escriben informes y cartas a la página web acerca de las formas en que la gente en varias partes del país está participando en esto. Le dije que el periódico es la forma fundamental en que dirigimos a las masas, y que existe una fuerte base para esto en las prisiones donde 800 personas reciben el periódico cada semana, que el periódico publica a menudo cartas de presos en las que se puede ver concretamente las formas en que se está transformando su manera de pensar. Dio el ejemplo del papel que desempeña el periódico en los artículos sobre la lucha por lo que es cierto en oposición al criterio de basarse en "lo que todo el mundo sabe" — lo que ha sido un tema de discusión y lucha en las filas de la revolución y que una parte de ello se está desenvolviendo en la página web.
En cierto momento, me preguntó cuánto tiempo he estado participando en esto. Cuando le dije que 20 años, quería saber lo que es diferente ahora o por qué ahora creo que es posible que se realicen cambios. Comenté cómo han sido los tiempos, que este partido era el producto de la lucha de los años 1960, pero se forjó cuando ese auge de lucha ya se estaba menguando y luego se operaron cambios en escala mundial junto con una embestida ideológica contra el comunismo, que el partido empezó a acomodarse y BA convocó a los miembros a definirse y lanzó una revolución cultural al interior del partido, luchando por revolucionar al partido. De ahí hablé de lo que está pasando en el mundo ahora, las dificultades que los imperialistas estadounidenses enfrentan en rivalidad con otras potencias mundiales y las luchas intestinas en la cima sobre las maneras de lidiar con todo eso, con la reafirmación de la supremacía blanca a fin de mantener intacto el aglutinador social (y el peligro concreto del fascismo) con la cuestión de la intensificación de la opresión del pueblo negro en Estados Unidos la que se está volviendo más evidente incluyendo en la cultura en este período, pero también se está manifestando de manera concreta en el asesinato de Trayvon y por qué y cómo eso dio una sacudida en toda la sociedad.
Al final de la conversación, mencioné un comentario del comediante británico Russell Brand sobre Ocupar, de que cambió concretamente las cosas porque cambió el discurso, introdujo la idea del 1% y del 99% en lo que la gente está comentando y su manera de ver las cosas. Mencioné eso a manera de ejemplo de las formas en que podemos ejercer un impacto sobre toda la sociedad para cambiar el terreno de modo que sea más favorable para la revolución. Me preguntó por qué no tratamos de hacer una revolución durante Ocupar. Lo consideró una crisis importante en la que mucha gente participó, se ponía de pie y eso debió haber representado una oportunidad para que el partido le entrara y dirigiera una revolución. Le dije que eso no fue una situación revolucionaria, y una razón importante, entre otras, es porque la base de la sociedad no tuvo una participación de peso. Más bien fue una lucha importante de parte de los sectores de la clase media desilusionados y en algunos sentidos alienados, entre ellos muchos estudiantes y nunca sabemos qué tanto impacto ejercerá una sacudida dada y nosotros estábamos en medio de Ocupar y estábamos trabajando para introducir las ideas revolucionarias y llevar esa sacudida tan lejos como fuera posible (lo que incluía que nosotros fuéramos a organizar a las personas de la base a participar, como una fuerza revolucionaria y no sobre la base de Ocupar). Comenté la lucha que se dio al interior de Ocupar sobre la cuestión de la dirección en particular y que en ese movimiento la gente por lo general no estaba dispuesta a considerar la revolución. No entendía por qué excluyéramos la posibilidad de una revolución simplemente porque no participaban los de abajo de la sociedad — dijo algo como que jamás habrá una situación perfecta en que existen todos los elementos de una situación revolucionaria. Dije algo como que efectivamente no es posible hacer una revolución sin esa columna vertebral, y también señalé el ejemplo de cómo eran los años 1960 como contraste a algo que pudiera haberse convertido concretamente en una oportunidad de hacer una revolución.
En líneas generales planteó una pregunta sobre nuestra manera de ver el desarrollo de una crisis revolucionaria — como algo que sucede que es externo a nosotros o algo que sucede como resultado de lo que hacemos. Dijo eso al final de la conversación, así que le dije en pocas palabras que una crisis surge del funcionamiento del propio sistema, pero lo que nosotros hacemos podría acelerar y moldear una crisis revolucionaria y que en eso estamos trabajando.
En medio de la conversación le pedí una donación de $500. Al final le pregunté qué pensaba y me dijo que no podía donar $500, que tal vez iba a dar una donación, pero quería volver a casa y leer el número especial del periódico y reflexionar. Dijo que iba a leer el periódico esa misma noche, ya que tenía un poco de tiempo y no tenía que atender sus deberes de mamá. Además del número especial, le di Dando un paso hacia el futuro y la animé a verla de inmediato. Estoy a la espera de su decisión.
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