¡Amérikkka, maldita sea! ¡Cerdo policía que mató a Philando Castile sale impune!
24 de junio de 2017 | Periódico Revolución | revcom.us
El 16 de junio de 2017, una vez más tuvimos la oportunidad de ver este maldito sistema poner el sello de aprobación sobre otro asesinato por la policía — esta vez el de Philando Castile. El cerdo policía que lo asesinó salió impune.
El 4 de junio del 2017, Philando manejaba su carro en el que estaban también su novia Diamond Reynolds y el hijo de 4 años de ella, en un suburbio de St. Paul, Minnesota donde vivía. El policía Jerónimo Yáñez les paró. ¿Por qué? Porque Philando es negro y una de las luces de atrás del carro se había fundido y, según Yáñez, le parecía el sospechoso de un crimen. Mejor dicho, lo paró por ser negro — ¡por la 46a vez!
Philando no hizo nada ilícito, y además hizo todo lo que se supone que uno debería hacer cuando lo pararon. Le dijo a Yáñez que tenía permiso legal para portar un arma y que lo tenía en el carro. Cuando intentó acatar la órden de Yañez de que le mostrara su identificación, Yáñez abrió fuego y le disparó siete veces. Miles y miles de personas vieron a Philando morir porque Diamond Reynolds tuvo la valentía de transmitir en vivo la secuela de los balazos, a pesar de que ella tenía toda la razón de temer por su propia vida y la de su hija. En cuestión de segundos, Philando estaba muerto — asesinado por ser negro y estar vivo.
Nada de eso le importa al sistema de injusticia supremacista blanco de Amérikkka. Yáñez fue absuelto del cargo de homicidio involuntario porque afirmó que temía por la vida, y porque las leyes de este sistema justifican ese pretexto mentiroso — se las diseñaron para justificar los asesinatos policiales.
La ira popular se manifestó inmediatamente. La madre de Philando, Valerie Castile, se salió del tribunal apenas anunciaron el veredicto de “no culpable” y lo condenó:
“Mi hijo fue asesinado, y seguiré diciendo que fue homicidio, porque ¿dónde en este planeta dices la verdad, y eres honrado, y así y todo la policía de Minnesota te mata, aunque tengas puesto el cinturón de seguridad y estés en la presencia de una mujer y un bebe? Mí hijo jamás hubiera puesto en riesgo la vida de otra persona”.
Su hermana Allysza dijo: “Este sistema realmente está mal, y nos falló de verdad. Nos falló otra vez porque mi hermano era un hombre bueno. Nunca le oía ni siquiera alzar la voz. Ni siquiera gritar. Y el que ese hombre haya mentido desde el estrado, cayó en tres, cuatro, cinco mentiras distintas”.
La noche del veredicto, 2000 personas se lanzaron justamente a las calles de Minneapolis y St. Paul y bloquearon la autopista I-94 en ambos sentidos. Al día siguiente hubo protestas en Minneapolis, así como en Nueva York, Chicago, Oakland y Los Ángeles. (Ver aquí informes en inglés y fotos y videos de las protestas). Fue muy bueno y muy necesario que la gente inmediatamente se haya lanzado a las calles para protestar — y eso debe despertar mayores y más resueltas protestas en todo Estados Unidos contra el profundamente injusto veredicto que dejó impune al cerdo que asesinó a Philando Castile y en contra del asesinato y terror policial en general.
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¡BASTA! ¡Ya basta de un sistema que no puede funcionar sin que sus secuaces maten desenfrenados a cientos de personas cada año, principalmente negros y latinos, y que sus cerdos sean premiados por hacerlo! Ya basta de un sistema que no le puede hacer justicia a Oscar Grant, aunque su asesinato se grabó en video en el acto. Ya basta de un sistema que es incapaz de condenar a un cerdo grabado en video asesinando a Philando Castile. Ya basta de un sistema que es incapaz de enjuiciar a policías que son grabados disparando a Tamir Rice, un negro de 12 años de edad, por jugar en un parque; incapaz de enjuiciar a los policías grabados en video estrangulando a Eric Garner, un hombre negro, por no dejarse humillar en público; y así y así sucesivamente….
Y basta del sistema existente con su nuevo régimen plenamente fascista que pretende implementar esta pesadilla con esteroides, un régimen que dice que desatará sin frenos ni trabas a sus secuaces para cometer aún mayores crímenes contra el pueblo negro, y contra la humanidad, al mismo tiempo que pretende aplastar toda posibilidad de protestar y de resistirse.
¡Basta!
Como dijo Carl Dix del Partido Comunista Revolucionario en su declaración tras el veredicto de Philando Castile:
Es inadmisible que los policías se salgan con el suyo cuando matan. Y ahora el régimen fascista de Trump y Pence promete “soltarle la correa a la policía”, lo que quiere decir que se intensificará el terror y asesinato policial contra los negros, latinos y otra gente de color. Debemos actuar para DETENER este horror ¡ya! Y no tratar de conseguir que los gobernantes capitalistas aflojen un poco el azuzamiento de sus agentes armadas en las líneas del frente para que puedan aterrorizar y matar gente, sino que IMPEDIR que esto ocurra. Debemos llevar a las calles nuestra justa ira y rechazo a quedarnos de brazos cruzados mientras esto pasa en las calles. Y debemos hacerlo como parte de prepararnos y posicionarnos para una revolución real, una que derroque a este sistema porque así es la única manera de acabar con este horror, y con los demás horrores que este sistema impone a la gente en todo el mundo y en Estados Unidos.
¡Quédense en las calles! ¡Justicia para Philando!
¡Expulsar al régimen de Trump y Pence!
¡Revolución, y nada menos!
El papel de la policía no es de servir y proteger a la gente, es para servir y proteger el sistema que gobierna sobre la gente. De reforzar las relaciones de explotación y opresión, las condiciones de pobreza, miseria y degradación que el sistema ha impuesto sobre la gente y está determinado a mantenerla allí. La ley y el orden que representa la policía con toda su brutalidad y asesinato es la ley y el orden que refuerza toda esta opresión y locura.
Bob Avakian, Lo BAsico 1:24
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