La cumbre de la ONU y la Huelga de la Juventud por el Clima

4 millones de jóvenes, por todo el planeta:
¡Exigimos el derecho a un futuro, para toda la humanidad!

A los gobernantes del globo: ¡AL CARAJO!
¿¡¿Qué vamos a hacer AHORA?!?

3 de octubre de 2019 | revcom.us

 

Cuatro millones de jóvenes y adolescentes salen en huelga y se toman las calles en todas partes del mundo, con la exigencia de que se haga algo YA para salvar al planeta. Inspirados con un sentido de desafío, misión y responsabilidad, quieren escuchar soluciones y ser parte de soluciones. Quieren ver que las personas actúen, a fin de cambiar ese futuro.

Greta Thunberg, la activista por el clima de 16 años de edad, como parte de su poderosa y contundente denuncia a los líderes del mundo, dijo: “Me han robado mis sueños y mi niñez con sus palabras huecas, y sin embargo soy una de las más suertudas. La gente está sufriendo, la gente está muriendo, ecosistemas enteros están colapsando. Estamos en el umbral de una extinción masiva y de lo único que ustedes pueden hablar es del dinero y cuentos de hadas del crecimiento económico. Qué montón de descarados”. Es una posición que se basa en la claridad científica y moral.

La cumbre de la ONU¹, como siempre, no hace nada, no logra nada. Declaran: ¡Que se jodan!

El presidente de Brasil, Jair Bolsonaro, que está en un duelo con Trump por la declaración más fascista, surrealista del año, le dijo a la Asamblea General de la ONU que las selvas del Amazonas, los mismos pulmones del planeta, que se esfumaron en llamas en el verano reciente, resultaron “casi sin tocar”. Le echa la culpa a la “prensa mentirosa y sensacionalista” por propagar noticias falsas — y además rechazó y puso en ridículo la idea de que las selvas del Amazonas sean “una herencia de la humanidad”.

Narenda Modi, el líder fascista de la India², ofreció ante la ONU algunas palabras “almibaradas”, a la vez que su gobierno se ha fijado una meta de expandir la producción de carbón en casi un 50%, o sea, un millón de millón de toneladas en el año entrante, con su invitación a las corporaciones extranjeras a facilitar el loco afán de producir carbón.

Por la calle de la cumbre de la ONU, un cónclave de las 13 corporaciones más grandes de combustibles fósiles se reunía para argumentar que sí les “importa” y que están haciendo algo al respecto. Prometen un nuevo mundo feliz con tecnologías de secuestración del carbono que lo recolectarán como aspiradora, o sea, una bola de tonterías de relaciones públicas para poder seguir perforando cada vez más profundamente y en partes aún más remotas del planeta. Según el New York Times, “…desde 2018, las grandes compañías petroleras han invertido al menos 50 mil millones de dólares en proyectos de combustibles fósiles —como el proyecto de Shell en Canadá de 13 mil millones para obtener gas natural licuado, y el proyecto entre BP, Chevron, Exxon Mobil y Equinor de 4.3 mil millones para un proyecto en aguas profundas para producir petróleo en Azerbaiyán— los que no serían económicamente viables si el mundo tuviera que cumplir con la meta de 1,5 grados [para impedir que la temperatura global aumente más de 1,5 grados centígrados]”.

El mismo Trump tuiteó burlonamente contra Thunberg, dando luz verdad a una ráfaga de calumnias asquerosas que se difundió por el Internet. Con burlas y sorna, tuiteó: “Ella parece ser una niña muy feliz que esté contando con un futuro brillante y maravilloso. ¡Cómo me alegra!” (mientras que Mein Trumpf retuiteó un corto del discurso de la adolescente). Estados Unidos, bajo el régimen fascista de Trump y Pence, ha venido expandiendo la producción del carbón y el petróleo, eliminando las ya debiluchas protecciones ambientales y censurando y atacando a la ciencia climática.

Peor de lo que se imagina… y tenemos que tomar las cosas en nuestras propias manos

En un nuevo libro, The Uninhabitable Earth [La tierra inhabitable], David Wallace-Wells hace sonar la alarma científica de que “la crisis climática es peor, mucho peor, de lo que se imagina”. Estas respuestas y no respuestas que se vieron la semana pasada de parte de los gobernantes capitalistas e imperialistas del mundo y de los titanes capitalistas corporativos son “peores, mucho peores de lo que se imagina”. Nos están diciendo que van a contaminar, que van a devastar al planeta y que francamente no les importa un comino el futuro de la humanidad y del planeta Tierra.

Los gobernantes de este sistema no atenderán, y no pueden atender, las razones. (Lea en español o vea en inglés este corto, “La destrucción del planeta por el capitalismo-imperialismo”, del discurso filmado de Bob Avakian Por qué nos hace falta una revolución real y cómo concretamente podemos hacer la revolución.)

Las personas DEBEMOS tomar las cosas en nuestras propias manos — para actuar al servicio de los intereses de la humanidad y del planeta. Para que los desafiantes jóvenes que se tomaron las calles no aflojen el paso y que más bien se pongan al frente, y reten y movilicen a otros en el torbellino de lucha… para que los científicos no se dejen intimidar sino más bien redoblen sus esfuerzos para proyectar y luchar por la verdad… para que los activistas y las personas de conciencia que se preocupan por el planeta no se dejen acorralar en los callejones sin salida de la elecciones burguesas y otros caminos sin salida sino que opongan una resistencia aún más.

Mire el mundo de hoy. La destrucción del medio ambiente. Los jóvenes en los barrios pobres de las ciudades desprovistos de un futuro, “dados por culpables” por ser negro, latino o de otro color, hostigados y baleados por la policía, una enorme cantidad de personas en las cárceles. Las mujeres violadas, golpeadas y asesinadas, privadas de su humanidad básica y de su pleno potencial como seres humanos. Las personas despreciadas, intimidadas, brutalizadas por ser gay o simplemente por ser “diferente”. Millones de niños se mueren al año de inanición y enfermedades. Los inmigrantes expulsados de su patria, forzados a vivir a las sombras, explotados, deportados, arrebatados a sus hijos. Las masacres y la esclavitud a nombre de uno u otro dios. Las guerras, la tortura y el masivo espionaje oficial.

Las cosas son así a causa del sistema que nos domina y declara su “derecho especial” de gobernar sobre el mundo. Un sistema así es un sistema el que nadie debe soportar ni con el que nadie debe acomodarse. Es necesario barrerlo de la faz de la tierra. Y es posible hacerlo.

— Bob Avakian (del Mensaje de Año Nuevo de 2014, corregido)

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1. Las Naciones Unidas es un organismo de los gobiernos del mundo donde los supuestos líderes internacionales toman importantes decisiones. Como tal, no es más que un organismo de los jefes de estos estados opresivos del capitalismo-imperialismo y una herramienta de su dominación y rivalidad mundial. [volver]

2. Como signo de los tiempos y lo que en realidad significa la “filantropía corporativa”, Modi incluso recibió un premio de Bill Gates por sus esquemas para expandir el acceso a “sanitarios”, a pesar de las protestas de los defensores de los derechos humanos y otros activistas. Entre sus muchos crímenes: (a) se revocó la autonomía de la región de mayoría musulmana de Cachemira, prácticamente encerrando ahí a siete millones de personas; (b) en el estado de Assam, una campaña represiva dejó a dos millones de musulmanes sin estado; (c) en 2005, cuando era el ministro en jefe del estado indio de Gujarat, presidió el linchamiento de más de mil musulmanes. [volver]

 

La destrucción del planeta por el capitalismo-imperialismo (en inglés)

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Lea el texto de este corto en español aquí.

De la Gira Nacional “Organícense para una Revolución REAL” en la Ciudad de Nueva York, 26/09/2019.