Una generación de niños aterrorizados — Trauma, lesiones y muerte
| revcom.us
Toda una generación de niños en Gaza está siendo traumatizada, herida y asesinada por las interminables bombas israelíes. No pueden dormir. No pueden salir a jugar. Están aislados de la nutrición, la escuela, la comunicación y la atención médica. Y, al azar, mueren de forma horrible por las bombas israelíes.
El número de muertos por los ataques aéreos israelíes en Gaza era de 200. Entre ellos había 59 niños, según informó el 16 de mayo el Ministerio de Sanidad palestino, que añadió que el número total de heridos en la ciudad ha ascendido a 1.305.
El 17 de mayo, Save the Children, organización benéfica con sede en Londres que organiza la ayuda a los niños más desesperados en zonas de crisis de todo el mundo, emitió un comunicado en el que exponía que tres niños resultan heridos cada hora por los ataques aéreos israelíes a Gaza.
"Casi 60 niños han muerto en Gaza en una semana. ¿Cuántas familias más tienen que perder a sus seres queridos antes de que la comunidad internacional actúe? ¿Dónde pueden correr los niños cuando los ataques aéreos caen sobre sus hogares?", dijo Jason Lee, director de Save the Children en Gaza.
"Las familias de Gaza, y nuestro personal, nos dicen que están en un punto de ruptura: viven en un infierno sin dónde refugiarse y, al parecer, sin final. Ahora, los suministros básicos y la energía se están agotando, lo que agrava y alimenta aún más esta catástrofe humanitaria", añadió el director de la organización benéfica.
Las incursiones israelíes han dañado las líneas eléctricas en toda la ciudad, y se escasea el combustible -la única fuente de energía y electricidad en la Franja de Gaza. Las instalaciones sanitarias y las infraestructuras civiles podrían quedarse pronto sin la energía que necesitan para suministrar provisiones cruciales y tratamientos de emergencia. Los niños gravemente enfermos y heridos tampoco pueden salir de la ciudad bloqueada para recibir tratamiento.
El domingo 16 de junio, el Comité Internacional de la Cruz Roja (CICR) emitió una declaración similar, en la que condenó los bombardeos y afirmó que el "bombardeo" de Israel en Gaza está impidiendo al CICR y a otras organizaciones ayudar a los civiles heridos o afectados por los bombardeos.
"Para los habitantes de Gaza, el acceso a los hospitales y a otras infraestructuras vitales se ha vuelto muy complicado debido a los incesantes ataques aéreos y a los importantes daños que sufren las carreteras y los edificios", declaró Robert Mardini, director general del CICR. Según la ONU, los últimos daños en las infraestructuras también han dejado a 480.000 personas en Gaza con un acceso limitado o nulo al agua.