Obrero Revolucionario #919, 17 de agosto, 1997
El 4 de agosto, 185.000 trabajadores de United Parcel Service se declararon en huelga. Es la huelga nacional de más trabajadores en esta década.
Es una huelga contra una compañía que ha llegado a simbolizar la "reestructuración" que se está operando en toda la economía. La gerencia de UPS ha aplicado a raja tabla técnicas para intensificar el trabajo, reducir sus costos de mano de obra y devorar a su competencia. Los métodos de UPS se han generalizado a toda la industria de correos. La competencia ha producido tanta presión para los trabajadores, que ha llevado a casos extremos de balaceras en oficinas de correos. El año pasado UPS registró ganancias de $1 billón y entradas de $22,4 billones.
Fortune, la revista para gente que tiene fortunas, puso a UPS en la lista de las cinco "corporaciones más admiradas". Pero cada clase tiene sus motivos de admiración.
En los centros de procesamiento de correo de UPS, no hay muchos admiradores. Ahí UPS obliga a miles y miles de clasificadores y cargadores a trabajar toda la noche a un ritmo febril para preparar los paquetes que se distribuirán al día siguiente. Es un trabajo peligroso, sucio y difícil, que es peor por el constante ándele, ándele, ándele de los supervisores y cronometradores. El billón de dólares de ganancia de UPS se acumuló con lesiones de espalda y agotamiento de los trabajadores.
Los cargadores tienen que empacar en camiones hasta 2000 paquetes por hora. Nuevas tecnologías de computación siguen minuto a minuto a los conductores que reparten paquetes, acelerándolos todo el tiempo. En los programas de capacitación de UPS les enseñan cómo saltar del camión, cómo doblar el dinero e incluso cómo agarrar las llaves del camión para entregar paquetes a la mayor velocidad posible.
La mayor causa de furia para todos los trabajadores es la extrema disparidad del sistema salarial doble. El 60% de los trabajadores (100.000 de los huelguistas) son trabajadores "de tiempo parcial" y realizan las pesadas tareas de clasificar y cargar. Por lo general ganan de $8 a $11 por hora, la mitad del salario de los trabajadores de tiempo completo, que ganan unos $20 por hora.
Por todo el país la semana pasada los trabajadores de tiempo parcial decían: "No tenemos una vida de tiempo parcial ni hijos de tiempo parcial; no podemos subsistir con trabajo de tiempo parcial".
Los trabajadores de tiempo completo también ven los peligros de ese sistema salarial doble y han visto que trabajos y departamentos que antes se reservaban para los trabajadores mejor pagados ahora se los dan a trabajadores subpagados. La compañía contrata dos o tres trabajadores de tiempo parcial en vez de contratar uno de tiempo completo. La existencia de extremas diferencias de salarios amenaza el ingreso y el futuro de todo mundo.
Cuando se sometió a votación la huelga, 95% de los trabajadores del sindicato (afiliado a los Teamsters) autorizó la huelga a partir del 31 de julio para exigir aumentos salariales para los trabajadores de tiempo parcial y que miles de ellos sean contratados de tiempo completo.
La huelga ataca el sistema salarial doble que se les ha impuesto a muchos trabajadores en la última década. Tiene el poder de 185.000 trabajadores unificados que pueden trastornar un medio de transporte crucial en la economía nacional.
Los trabajadores de UPS se han lanzado a la lucha, lo que merece un aplauso. Una victoria de ellos afectaría a todos los trabajadores del país. Es necesario que los trabajadores y la gente progresista entiendan los puntos de esta lucha y apoyen a los huelguistas.
"Si no operáramos con trabajadores de tiempo parcial a los salarios que les pagamos, habríamos quebrado".
Kenneth Sternad, vocero de UPS
El éxito de UPS se gestó dividiendo a los trabajadores en dos "niveles". Desde hace varias décadas, la gerencia organizó el proceso de producción de su distribución comercial de correo de manera que pudiera tener un "núcleo" de trabajadores calificados de tiempo completo y un "pool" de trabajadores temporales y de tiempo parcial. Esto le permite contratar a muchos trabajadores en tiempos de gran volumen de paquetes, como en las navidades, y cesarlos cuando pasa la avalancha...o echarlos más fácilmente si no aceptan lo que les caiga encima.
En ciertos sectores, especialmente para los estudiantes universitarios, UPS tenía la reputación de ser un buen trabajo de verano...hasta que la compañía impuso un ritmo de trabajo mortal. Los huelguistas cuentan que en las entrevistas de trabajo les dicen que los trabajos de carga tienen que ser de tiempo parcial "porque una persona no puede trabajar a ese ritmo más de cinco horas". O sea que UPS exprime un día entero de trabajo de sus cargadores, pero solo les paga por cinco horas. Los trabajadores de tiempo parcial solo tienen un descanso de 10 minutos en su turno.
El sistema salarial de dos niveles aumentó en 1982 cuando la compañía exigió el derecho de tener dos niveles salariales y la dirección de la Hermandad Nacional de Teamsters aceptó. En muchas industrias las compañías hicieron demandas similares en la década pasada: prometieron que no bajarían el nivel de sus trabajadores actuales, pero exigieron el derecho de contratar nuevos trabajadores con menos salarios y prestaciones.
Tan pronto entró en vigor ese nuevo contrato sindical, surgió una gran brecha salarial. A los nuevos empleados de tiempo parcial les pagaban de $8 a $9 por hora ($4 menos que a los de tiempo completo).
De 1982 en adelante, los salarios de los trabajadores de tiempo completo de UPS se estancaron. Los aumentos a duras penas cubrían el alza del costo de la vida. Pero los trabajadores de tiempo parcial no han recibido ningún aumento en 15 años. En la práctica eso es un recorte en el salario real, pues los precios siempre aumentan. Hoy, teniendo en cuenta la inflación, ganan un tercio de lo que ganaban hace 15 años. Los trabajadores de tiempo parcial todavía ganan en promedio $9 y pico por hora, mientras que la mayoría de los conductores de tiempo completo gana casi $20 por hora.
En 1986, el 42% de los trabajadores sindicalizados de UPS eran de tiempo parcial; hoy son el 60%.
Esta estructura favorece enormemente a la compañía. Tiene a miles de personas en una situación de constante inseguridad, pobreza y a merced de los caprichos de las ganancias corporativas.
Muchos de los trabajadores de tiempo parcial de UPS figuran oficialmente entre los 10 millones de "trabajadores pobres" del país: que tienen trabajo pero no ganan lo suficiente para techo y comida. Muchos trabajadores de tiempo parcial podían vivir así cuando eran solteros, pero cuando tienen familia no les alcanza. El gobierno calcula que lo mínimo para subsistir (la "línea oficial de pobreza") son $8000 al año para una persona sola y $15.580 para una familia de cuatro personas.
Unos 10.000 trabajadores de UPS trabajan más de 35 horas a la semana pero ganan salarios de tiempo parcial porque oficialmente trabajan en dos puestos. Angela Schenburn, de 38 años, describió su situación a un periódico sindical: lleva tres años trabajando en el centro de UPS de Madison Heights, Michigan. Empieza a las 3:40 a.m. a cargar cajas en los camiones. Después, para su segundo "trabajo", se pone el uniforme de UPS y reparte paquetes de entrega inmediata. Normalmente trabaja de 40 a 50 horas cada semana, pero como tiene dos trabajos "de tiempo parcial" solo gana $10 y $10.50 por hora.
La paralización de UPS es demasiado grande para que la clase dominante la pase por alto. Con la integración de alta tecnología de la producción entre compañías, el transporte rápido es crucial y constituye un talón de aquiles. La interrupción de entrega de paquetes ha tenido un impacto inmediato en la economía, empezando con el comercio. Esta huelga puede tener un impacto grande en toda la economía.
La competencia de UPS no puede absorber la mayoría de su carga. UPS está tratando de continuar sus servicios poniendo a trabajar en turnos dobles a los supervisores, pero informa que solo está entregando el 10% de los paquetes...y eso podría ser una exageración. La fuerza de trabajo de UPS es tan grande que a los capitalistas les costará trabajo contratar a tiempo suficientes rompehuelgas para reemplazarlos.
Desde el primer día de la huelga, la gerencia le pidió a la Casa Blanca que ordenara a los trabajadores reintegrarse a sus puestos. Públicamente UPS dice que el punto principal del conflicto es que la compañía quiere quitarle a los Teamsters el control de las pensiones. Es una táctica nada sutil para recordarle al público y a los huelguistas la historia de corrupción gangsteril de los Teamsters con las pensiones.
La prensa nacional ha empezado una campaña diaria antihuelga con informes de cómo afecta a los pequeños comerciantes, los servicios médicos, etc. Le dice constantemente al público que se concentre en las "inconveniencias" de la huelga para sí mismo. Es una maniobra cínica para presentar a los huelguistas como enemigos del "consumidor normal".
En los últimos tiempos no habido muchas huelgas grandes en Estados Unidos y mucha gente, especialmente joven, no sabe por qué es importante apoyar a los trabajadores en huelga. Desde un punto de vista comunista, la situación de UPS es un claro ejemplo de cómo exprime y roba al pueblo el sistema de esclavitud asalariada, de que este sistema es caduco, y de que hay que tumbarlo. Cuando los trabajadores se lanzan a la huelga contra su explotación, hay que apoyarlos.
La clase trabajadora no es un grupo de "consumidores" de este o aquel producto de mierda. Somos millones de proletarios y gente trabajadora del mundo entero. Cuando alguien se alza a luchar, tenemos que solidarizarnos. Igualmente, a los millones de la clase media también les conviene luchar contra el downsizing de toda esta sociedad.
Los huelguistas de UPS están luchando contra injusticias BASICAS. Está bien y es correcto que trastornen la rutina industrial hasta que los traten con justicia. Los trabajadores hacemos todo y tenemos el derecho de suspender nuestro trabajo para luchar por el cambio.
Todas las clases están prestando atención a ver cómo se desarrollará la huelga. La Casa Blanca todavía no ha intervenido, pero es posible que lo haga si la huelga se prolonga. Al cierre de esta edición, siguen las negociaciones aunque el sindicato y la gerencia dan la impresión de que han avanzado poco. Los Teamsters tienen reputación de negociar "duro" y muchos trabajadores de UPS tienen fuertes esperanzas de que su nuevo presidente, Ron Carey, apoye sus demandas. Sin embargo, no está claro por ahora qué planes e intenciones tienen los Teamsters. Una cosa que anunciaron es que el fondo nacional de huelga solo podrá darle $55 por semana a los huelguistas.
La primera semana de la huelga se caracterizó por unidad y entusiasmo. Muy pocos trabajadores sindicalizados han entrado a trabajar, aunque la prensa les ha dado mucha publicidad a esos rompehuelgas. Los pilotos de UPS (altamente pagados) también están en huelga por su propia parte.
En Somerville, Masachusets, los huelguistas se han puesto a impedir que los supervisores saquen camiones de reparto y la policía ha arrestado a más de una docena. En Ohio se informó que un camión de reparto recibió un disparo en la autopista. Asimismo, por todo el país hubo informes de confrontaciones en los piquetes de huelga. Ya han empezado manifestaciones de apoyo de otros trabajadores, activistas y gente progresista a esta importante huelga.
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