??La injusta extradición de Abdul Haqq
Obrero Revolucionario #934, 30 de noviembre, 1997
El 13 de noviembre, extraditaron al preso político Abdul Haqq de Nueva York a Cleveland (Ohio), donde lo acusan de un homicidio de hace 13 años que no cometió. Sin duda alguna, con esta injusta persecución política de quien es un hombre dedicado a la lucha de liberación negra, las autoridades quieren amenazar a otros. No se puede permitir que se salgan con la suya.
Atacan a activista revolucionario
Abdul Haqq, o simplemente "Haqq" como lo llaman sus amigos y camaradas, es musulmán y militante del Movimiento 12 de Diciembre, una organización nacionalista negra revolucionaria "que lucha por los derechos humanos, la autodeterminación y el socialismo". También es co-fundador del Movimiento de Hombres Negros contra el Crack.
Vivió varios años en Cleveland y se mudó a Nueva York a comienzos de los años 80. Ahí trabajó de vendedor ambulante en muchos barrios y es muy conocido por su dinámica personalidad.
Haqq fue uno de los "3 del Movimiento de Hombres Negros", tres compañeros acusados injustamente de poseer armas sin permiso en 1987, por lo cual pasó ocho años en la cárcel. Lo soltaron en marzo de 1996. A pesar de estar en libertad condicional (por lo que podían volver a meterlo a la cárcel), regresó en seguida a la lucha contra la opresión de los negros y fue uno de los organizadores del movimiento contra la epidemia de brutalidad policial.
En junio de 1996, Aswon Watson, un joven negro de 23 años, fue baleado 24 veces por la policía cuando estaba sentado en su carro con los brazos en alto. El Movimiento 12 de Diciembre llevó a cabo un simulacro de entierro y juicio en las calles de Brooklyn, y demandó que metieran a los policías asesinos a la cárcel. Además, organizó a los vecinos para vigilar a la policía.
Heridos por esas actividades, los agentes de la delegación 67 contraatacaron y arrestaron a los activistas más de 30 veces, por cosas ridículas como cruzar en medio de la calle o volantear.
Por su papel en esa lucha, el sistema le cayó encima a Abdul Haqq. Roger Wareham, su abogado y también miembro del Movimiento 12 de Diciembre, le dijo al OR: "Tenemos un video de la vigilancia policial, que la fiscalía tuvo que entregarnos durante la presentación de pruebas. En el video, un agente de la unidad de inteligencia ve a Haqq, lo describe y manda informar... a su superior. Al rato, arrestan a todos, pero Haqq ya se había ido y no lo agarran ese día".
No fue la primera vez que fracasaron. Pero en septiembre lo agarraron pasando películas políticas con un televisor portátil en una acera. Haqq le informó al encargado de supervisar su libertad condicional sobre el arresto. Pero este dijo que el informe "se perdió", así que lo volvieron a arrestar, supuestamente por violar su libertad condicional. Estuvo preso tres meses.
Otra prueba de un complot de alto nivel contra Haqq: un comandante de la delegación 67 asistió a una audiencia de rutina. Wareham dijo: "Prestaron mucha atención a agarrar a Haqq". A pesar de esto, el juez lo soltó el 12 de diciembre de 1996.
Poco después, salieron unos artículos muy sospechosos en la prensa de Nueva York. El Village Voice acusó al Movimiento 12 de Diciembre de "abogar por resistencia armada al DPNY" y el New York Post escribió: "Hay que prestarle mucha atención a la creciente retórica violenta, tanto como a la violencia contra los policías".
Traman un complot
En eso le tendieron una trampa a Haqq; el 19 de marzo, fue a una reunión con su supervisor de libertad condicional. Ahí lo esperaban agentes del equipo antiterrorista de Cleveland, que lo acusaron del homicidio de William Turner hace 13 años. Haqq dice que es inocente; de hecho, el día del homicidio estuvo en Nueva York.
¿Cuáles son las "pruebas" de la fiscalía contra Haqq?
Wareham: "En su declaración jurada, el detective [de Cleveland] dice que en febrero de 1997 un informante policial se le acercó y le dijo que, en la primavera de 1984 ó 1985, Abdul Haqq le confesó que lo mató [a Turner]. De la nada este tipo fue a la policía y le dijo eso. El detective explica que era informante, así que su versión es muy sospechosa desde la primera palabra. ¿Y por qué solo recordó eso en febrero de 1997 y no antes? Su respuesta no tiene sentido; por eso refuerza nuestra tesis de que la inventaron más bien en Nueva York. Es otro ataque de la delegación 67 contra Haqq, y sirve para parar la lucha por el asesinato de Aswon Keshawn Watson".
Wareham continuó: "Esa parece ser la esencia de su argumento: un informante policial les dijo que oyó a Haqq confesarle a una tercera persona (no a él) que mató a Turner. Además, dicen que dos testigos lo reconocieron en una foto 13 años después del homicidio. Eso es todo".
Esto huele a COINTELPRO (el programa de contrainteligencia de la policía política de los años 60, que supuestamente acabó hace años). Al ex Pantera Negra Geronimo JiJaga le hicieron algo similar: lo condenaron injustamente y lo metieron a la cárcel con solo el testimonio de un espía policial, a pesar de que las autoridades sabían que Geronimo estaba a cientos de kilómetros de donde ocurrió el homicidio. Por esa injusticia pasó 27 años en la cárcel, y solo salió este año.
La repentina mejora de la memoria del espía, tanto como la afirmación de las autoridades de Cleveland de que Haqq ha sido un sospechoso desde el comienzo, son muy sospechosas. El fiscal dijo que no acusó a Haqq antes porque no sabía donde estaba, aunque hubiera sido muy fácil localizarlo por computadora, pues estaba preso y después en libertad condicional en Nueva York.
Las autoridades de Ohio pidieron su extradición cuando estaba preso en la cárcel de máxima seguridad de Rikers Island, pero su abogado luchó por evitarlo.
El 14 de octubre, el juez anunció que no iba a fallar sobre los hechos del caso, sino solo sobre si Haqq estaba en Nueva York el día que murió Turner. Una testigo, Jacqueline Bernard, dijo que habló con Haqq el 3 de mayo de 1984 en Nueva York, pero el juez dijo que su testimonio no era una prueba "clara ni convincente", y mandó extraditarlo. El 30 de octubre un tribunal de apelaciones ratificó ese fallo y el 13 de noviembre se lo llevaron Cleveland.
***** Desde la cárcel, Haqq escribió: "Este sistema podrido sigue repitiendo su mortífera y mentirosa propaganda acerca de la supuesta guerra contra la droga, a pesar de las pruebas irrefutables de su propio papel en el narcotráfico. El 19 de marzo el FBI me secuestró y me acusó de un homicidio de 1984 en Cleveland, Ohio, que tanto la policía como Alá saben que no cometí. Es un ataque grueso, pero no pediré clemencia y tampoco se las daré".
Abdul Haqq no se deja desanimar. Cada vez que entra en un juzgado sin grilletes, saluda a sus partidarios con el puño en alto. Hay que defender a este compañero, y hacer conocer y parar el ultrajante complot contra él.
Se puede conseguir más información o unirse a la defensa de Abdul Haqq escribiendo a Abdul Haqq Legal Defensa Fund, P.O. Box 693, Lincolnton Station, New York, NY 10037, teléfono: (212)234-7788.
This article is posted in English and Spanish on Revolutionary Worker Online
http://rwor.org
Write: Box 3486, Merchandise Mart, Chicago, IL 60654
Phone: 773-227-4066 Fax: 773-227-4497
(The RW Online does not currently communicate via email.)