El brutal ejército de Suharto:
Made in USAObrero Revolucionario #957, 17 de mayo, 1998
En 1991, el ejército de Indonesia masacró a más de 270 civiles en la isla de Timor Oriental. Si bien Estados Unidos ha respaldado al gobierno del dictador Suharto desde el principio (1965), tras la masacre le tocó aparentar cierta distancia. Así que en 1992 el Congreso prohibió la participación de Indonesia en IMET, un programa internacional de entrenamiento militar del Pentágono.
Sin embargo, Estados Unidos siguió entrenando a las tropas de Indonesia, y especialmente a KOPASSUS, una unidad de comandos que tortura y asesina a civiles, y que han despachado contra las manifestaciones en la capital, Yakarta, durante los últimos meses. Militares yanquis expertos en contrainsurgencia le han enseñado a KOPASSUS guerra psicológica y reconocimiento.
El Pentágono afirma que, estrictamente hablando, no se ha violado la ley, pues el entrenamiento no es parte del programa IMET (prohibido por el Congreso). Forma parte de otro programa, J-Cet, menos conocido que IMET, que además de entrenar a KOPASSUS, adiestró al Ejército Patriótico de Ruanda en Africa en guerra psicológica y puntería.
El periodista Allan Nairn presenció la masacre en Timor Oriental por el ejército de Indonesia en 1991. Después lo golpearon salvajemente y lo expulsaron del país. En marzo del presente, The Nation sacó un artículo suyo sobre el entrenamiento militar del ejército de Indonesia.
Estados Unidos apoyó la invasión de Timor Oriental en 1991. Nairn informa que, poco después de la masacre, hubo una reunión secreta en Surabaya donde se aseguró a los militares de Indonesia que Washington "no abandona a los amigos en tiempos difíciles".
El gobierno de Indonesia protestó cuando el Congreso prohibió su participación en IMET. Como consecuencia, durante 1994 y 1995 se estableció un programa semejante pero más chico llamado E-IMET, que supuestamente enseñaba derechos humanos a las fuerzas armadas de Indonesia (ABRI). En 1995, el Congreso decidió que el entrenamiento militar de ABRI debía limitarse estrictamente a instrucción académica. Sin embargo, Nairn documenta que ABRI recibió instrucción sobre una amplia gama de tácticas violentas. Desde 1993 se han realizado por lo menos 41 operativos conjuntos de las FFAA de Indonesia y de Estados Unidos (guerra de contrainsurgencia, guerra psicológica y combate urbano) con la participación de los Boínas Verdes, la Fuerza Aérea y la Infantería de Marina.
Los expertos del Pentágono han entrenado a la guardia presidencial, a KOSTRAD (el Comando Estratégico del Ejército de Indonesia) y, sobre todo, a KOPASSUS, que se especializa en tortura, desapariciones y allanamientos. Según documentos del Pentágono, KOPASSUS participó en 20 de 28 operativos del ejército y la fuerza aérea desde 1992.
Desde la masacre de 1991 en Timor Oriental, se han realizado las siguientes operativos con KOPASSUS: Francotirador Nivel II (1993), Demolición y Operativos Aéreos (1993), Combate Cuerpo a Cuerpo (1994) y Operativos Aéreos Especiales, Ataques Aéreos y Técnicas Avanzadas para el Francotirador.
Nairn informa: "Un activista destacado de derechos humanos de Indonesia describió la labor de KOPASSUS como `espionaje, terror y contraterror'; es decir, hace provocaciones violentas. Dijo que hace dos meses, trasladaron los batallones de Aceh y Papua Occidental a Yakarta para contener las manifestaciones junto con unidades del ABRI. Su grupo cree que KOPASSUS tiene dos cárceles clandestinas (en Cibubur y Bogor) donde interroga a disidentes que ha secuestrado y `desaparecido'".
De hecho, los grupos de derechos humanos informan que la cantidad de "desaparecidos" está aumentando: gente secuestrada por las fuerzas de seguridad o grupos paramilitares, o que ha tenido que esconderse. Amnistía Internacional informa que ha habido un aumento dramático en la cantidad de presos políticos, y que actualmente hay por lo menos 140.
Los activistas dicen que el gobierno los somete a llamadas telefónicas en medio de la noche, vigilancia constante, y registros y golpizas. Un abogado de derechos humanos informó que estaba hablando con un compañero por teléfono cuando una tercera persona interrumpió la línea y amenazó con matarlo. Poco después recibió un fax con una hoz, un martillo y una calavera, y las palabras: "No sea héroe. Cuídese usted y cuide a su familia".
Un activista prominente, Pius Lustrilanang, fue uno de 50 activistas arrestados en los últimos tres meses. Lo soltaron el 2 de abril tras dos meses en la cárcel. Huyó del país y dice que las fuerzas de seguridad lo torturaron. Su descripción de las torturas se parece mucho a las de otras víctimas de KOPASSUS.
Lustrilanang dice que lo agarró un grupo de hombres armados el 4 de febrero en una parada de camión de Yakarta. Con los ojos vendados lo sacaron de la ciudad y lo metieron desnudo en una celda. Antes del primer choque eléctrico, un interrogador le dijo: "Aquí no hay leyes ni derechos humanos. La única opción es contestar nuestras preguntas. Unos salen vivos, otros no. Nunca encuentran los cadáveres". Lustrilanang estaba con otros 10 presos políticos, a quienes también interrogaron y torturaron con choques eléctricos: "Me torturaron para sacarme información.... Me hicieron preguntas sobre la constelación de la oposición y las alianzas entre dirigentes".
Dijo que nunca vio la cara de sus torturadores porque siempre tenían capuchas o máscaras, pero cree que lo secuestraron soldados y que lo tenían en una base militar. Amenazaron con matarlo y le dijeron que si quería seguir vivo cuando lo soltaron no debía decir palabra.
Con la nueva ola de represión, Estados Unidos ha redoblado el entrenamiento de las FFAA indonesias. Nairn dice:
"El 27 de julio de 1996, estallaron levantamientos contra el ejército en Yakarta por el allanamiento de paramilitares a la sede de Megawati Sukarno [líder de la oposición], con un saldo de 60 desaparecidos. Después, ABRI reprimió a las organizaciones no gubernamentales. En medio de todo eso, llegó un equipo de asesores yanquis del Comando de Operativos Especiales del Pacífico para adiestrar a KOPASSUS y otras unidades en guerra psicológica.
"Desde esa fecha hasta finales de 1997, hubo siete operativos adicionales con KOPASSUS; uno de ellos fue un adiestramiento en morteros para la unidad del coronel Slamat Sidabutar, comandante de las tropas que han ocupado a Timor Oriental. (La prensa internacional ha sacado fotos de tortura de civiles por dichas tropas.) La Infantería de Marina entrenó a la Fuerza de Contraterrorismo Denjaka en demolición y armas cortas, y dio un curso a la Infantería de Indonesia sobre operativos con barcos, reconocimiento, espionaje y allanamientos. El otoño pasado, al estallar la crisis financiera y, a su vez, una ola de protestas, el ejército estadounidense dio un curso de 26 días sobre operativos militares en terreno urbano a la Infantería y a KODAM Jaya, una de las principales unidades que reprime las protestas.
"Al parecer, Estados Unidos tiene un plan sistemático para fortalecer a KOPASSUS. Por ejemplo, ha estrechado vínculos con el ex comandante de KOPASSUS, el general Prabowo quien es el yerno de Suharto, socio (por medio de su esposa) de Merrill Lynch y patrocinador de la Sociedad Estados Unidos/Indonesia (un influyente grupo pro Suharto formado en 1994 que cuenta con el apoyo de ABRI, corporaciones estadounidenses y ex funcionarios del Pentágono, del Departamento del Estado y de la CIA). Prabowo es el comandante más conocido de Indonesia y el actual mando de KOSTRAD. Se le considera el probable sucesor de Suharto y recibe muchas visitas de altos funcionarios estadounidenses.
Desde el comienzo de la crisis el verano pasado, altos funcionarios del Pentágono se han reunido por lo menos dos o tres veces al mes con altos oficiales de ABRI. El secretario de Defensa, William Cohen, fue al cuartel general de KOPASSUS y pasó tres horas sentado al lado de Prabowo viendo las maniobras de los asesinos adiestrados por sus muchachos. No pidió moderación en la represión de las protestas. Cuando le preguntaron a un alto funcionario del gobierno estadounidense sobre el mensaje de esa visita, contestó: "Simplemente que Estados Unidos es un firme aliado de este ejército y lo ama".
Pero ahora que el mundo se ha enterado de la sangrienta represión y de las torturas de activistas políticos, Washington quiere distanciarse un poco de las FFAA indonesias y tapar su papel. El 8 de mayo, anunció la cancelación de los ejercicios militares conjuntos en marcha. Pero hay otros dos ejercicios programados para este año y un vocero del Pentágono dijo: "No hemos suspendido de modo definitivo nuestras actividades militares en Indonesia. Dada la actual situación, vamos a examinar futuros ejercicios caso por caso".
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