Palestina:
El acuerdo de paz de la CIAObrero Revolucionario #984, 29 de noviembre, 1998
CIA: letras que evocan imágenes de las intrigas y crímenes del imperialismo yanqui por todo el mundo. El asesinato del líder nacionalista Patricio Lumumba en Congo... el golpe del asesino Suharto y la masacre de centenares de miles de indonesios... el golpe militar de Pinochet y la muerte de más de 30.000 chilenos...
Ahora, según el nuevo acuerdo firmado en octubre por Estados Unidos, Israel y Yasir Arafat, la CIA supervisará directa y abiertamente el "plan de seguridad" de Israel y la Autoridad Palestina. Nada más ese hecho demuestra que el nuevo acuerdo, como todo el "proceso de paz", no llevará justicia y liberación al oprimido pueblo palestino. Desde el principio, la meta de este "proceso de paz" ha sido suprimir su justa lucha, y proteger y fortalecer la dominación estadounidense de la región.
La realidad de la transferencia de territorios
El nuevo acuerdo se conoce como el "Acuerdo Wye", por el pueblo de veraneo de Virginia donde se llevaron a cabo las negociaciones entre Arafat y el primer ministro israelí, Benjamín Netanyahu, bajo la tutela de Washington. El presidente Clinton participó personalmente en las últimas sesiones.
El acuerdo estipula que Israel entregará más territorios a la Autoridad Palestina (de hecho, son territorios que debía haber transferido según un acuerdo firmado hace varios años en Oslo). También permitirá abrir un aeropuerto palestino en Gaza y pondrá en libertad a 750 presos palestinos (de un total de más de 3000 que actualmente están en cárceles israelíes).
Arafat dice que a la larga el acuerdo y todo el "proceso de paz" llevarán al establecimiento de un Estado palestino independiente. Pero echémosle un vistazo.
Actualmente, Cisjordania está dividida en tres zonas. La Zona A está bajo el "control total" de la Autoridad Palestina; la Zona B está bajo el "control conjunto" de Israel y la Autoridad; y la Zona C está bajo el control israelí. Antes de Wye, la Zona A abarcaba el 3% de Cisjordania, la Zona B el 24% y la Zona C el 72%.
Según el acuerdo, Israel transferirá otro 14% de la Zona B a la Zona A, y otro 13% de la Zona C a la Zona B. Si se llevan a cabo todas las transferencias, un 40% de Cisjordania estará bajo el control total o parcial de la Autoridad Palestina.
Pero la realidad es que los palestinos de Cisjordania siguen rodeados por un Estado opresor hostil armado hasta los dientes por los imperialistas. Esto no cambiará incluso si a la larga se establece un "Estado palestino". Por lo general, las zonas "autónomas" palestinas son pequeñas parcelas separadas que Israel puede aislar y atacar fácilmente. Además, Israel controla la economía de toda la región. Por ejemplo, monopoliza el agua que necesita la agricultura, la industria y la población. Muchos palestinos se ganan la vida trabajando en Israel, que frecuentemente cierra sus fronteras y no les permite entrar como "castigo colectivo". El aeropuerto palestino estará bajo la vigilancia de las FFAA israelíes, que podrán registrar aviones y cargamento a gusto.
El Acuerdo Wye no dice nada sobre los asentamientos israelíes, que siguen creciendo en Cisjordania. Muchos son de sionistas de la extrema derecha que se oponen a entregar territorio a los palestinos. Han recibido un montón de armas del ejército israelí, y están vinculados el uno al otro y a Israel por carreteras. Los colonos pueden viajar por esas carreteras bajo la vigilancia de soldados israelíes, pero a los palestinos les cuesta mucho trabajo (o es imposible) viajar de una zona de la Autoridad Palestina a otra.
Los palestinos de Cisjordania y Gaza tienen prohibido ir a Jerusalén, que consideran su ciudad capital. Por otro lado, los israelíes están construyendo más asentamientos en la ciudad y sus afueras.
Las zonas "autónomas" no son una auténtica forma de soberanía o autodeterminación. En vez, son como los bantustanes que estableció el gobierno de apartheid de Sudáfrica en zonas remotas y pobres para contener y suprimir la lucha popular. También son una fuente de mano de obra barata.
El "plan de seguridad"
Gran parte del Acuerdo Wye habla del "plan de seguridad". La Autoridad Palestina se comprometió a combatir más el "terrorismo" y el "tráfico de armas", lo que significa que le caerá encima con más fuerza a la oposición, especialmente a los grupos armados que se oponen a Israel y al "proceso de paz". También se comprometió a arrestar a 30 individuos nombrados por Israel por sus actividades políticas.
Además, el Acuerdo Wye le da a la CIA un papel abierto en la "supervisión" del "plan de seguridad". Con la intervención de la CIA, ¿cabe duda del papel de Arafat? El "proceso de paz" le ha asignado a Arafat y a la Autoridad Palestina el papel de capataces del pueblo palestino. Hoy la policía palestina lleva a cabo gran parte de la represión que antes realizaban las fuerzas militares y policiales israelíes. Con la presencia de la CIA, Estados Unidos dirigirá las operaciones de la policía palestina más directamente.
Los críticos de la Autoridad acaban presos y se han divulgado muchos informes de tortura. Washington y sus aliados le han dado a Arafat docenas de millones de dólares. Es una suma pequeña en comparación con los billones de dólares que le dan a Israel cada año, pero el dinero le permite a Arafat ampliar las fuerzas de seguridad. Y si la policía palestina no puede contener los grupos de la oposición o los levantamientos populares, las fuerzas israelíes están listas para intervenir.
Después de firmar el Acuerdo Wye, Arafat mandó arrestar a centenares de presuntos miembros de Hamas y la Jihad Islámica, y puso bajo arresto domiciliario al líder de Hamas.
En Wye, Arafat también se comprometió a tachar formalmente varias secciones de la Carta Nacional Palestina, entre ellas las que dicen que "Palestina es la patria del pueblo palestino árabe" y que "el pueblo palestino árabe posee el derecho jurídico a su patria y el derecho a determinar su propio destino". Hace mucho tiempo Arafat y sus aliados abandonaron la auténtica lucha de liberación. Pero tachar incluso la mención de una patria palestina en los documentos oficiales es una capitulación más rastrera al sionismo y al imperialismo. Clinton dijo que irá a la reunión especial en que se anunciarán esos cambios.
Una paz falsa
Después de firmar el acuerdo, los líderes de los colonos israelíes tildaron de "traidor" a Netanyahu. Los sionistas tienen desacuerdos muy intensos sobre el "proceso de paz", que en 1995 llevaron al asesinato del primer ministro Yitzak Rabin.
Pero por el momento, los más altos dirigentes sionistas creen que el "acuerdo de paz" es el camino que más les conviene. Esto se puede ver en el hecho de que poco antes de Wye, Ariel Sharon--un derechista de mucho peso, partidario del expansionismo sionista--se unió al gobierno de Netanyahu como secretario de Defensa. El mismo Netanyahu antes era un fuerte crítico del "proceso de paz".
En Palestina, Washington ofrece un plan de "paz". En el cercano golfo Pérsico, bate tambores de guerra e impone sanciones económicas que han matado a muchos iraquíes. La "paz" en Palestina y la guerra en el Golfo son los dos lados de la misma moneda. Son parte de la misma estrategia imperialista de la clase dominante yanqui.
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