Dictadores, tiranos, carniceros...
¿y Moisés?

Bob Avakian

Obrero Revolucionario #1080, 27 de noviembre, 2000, en rwor.org

Ultimamente nos acosa una cacofonía de calumnias sobre la historia revolucionaria de nuestra clase, en particular la experiencia de la dictadura del proletariado: "Stalin fue un tirano, un carnicero... El genocida Mao Tsetung masacró a millones de personas". Para los comentaristas burgueses es un juego: "¿Cuántas millones de personas masacró Mao?" "Apuesto que fueron diez millones." "¡Pues yo apuesto que fueron veinte!". Así juegan los "eruditos" burgueses, echando un chingo de mentiras sobre los "horrores" del comunismo y la dictadura del proletariado. En otras charlas y escritos he analizado los problemas y errores de nuestra clase y sus líderes en cuanto al ejercicio de la dictadura sobre los explotadores derrotados y los nuevos explotadores que surgen. Pero, ¿qué me dicen de Moisés, cabrones? Nos vienen con el cuento de los diez mandamientos, el "Príncipe de Egipto" y todas esas babosadas pero, ¿qué me dicen de Moisés?

Inclusive en la Biblia, dice que los antiguos israelitas estaban hartos de muchos años de vida errante en el desierto. O sea, cuando Moisés subió a una montaña a recibir los Diez Mandamientos, los que lo esperaban abajo estaban hartos, y con razón, pues Moisés los llevó al desierto, donde no había qué comer (salvo en algunas ocasiones cuando gracias a un "milagro" recibieron alimentos y agua); pasaron hambre y sed, y el Moisés era un demente, y encima muy despiadado. Llevaban años siguiendo a ese tipo por el desierto y en un momento dado él los deja supuestamente para subir a conversar con la zarza ardiente, y esas chingaderas, y recibir unos mandamientos. Al regresar, descubre que han construido un ídolo y que lo adoran. ¿Qué hace? Lo hace añicos, funde el oro y lo mezcla con el polvo del ídolo y, según la misma Biblia, obliga a la gente a tomarse el oro. ¿A poco Stalin o Mao cometió semejante barbaridad?

Pero eso no es todo. La Biblia dice (porque no estoy inventando nada sino contándoles lo que dice) que Moisés ordena que "los que adoran a `ídolos falsos' se vayan para allá. Y los que adoran al `único dios verdadero' vénganse para acá". Luego dice: "Bien, los que están conmigo, los que adoran al `único dios verdadero', saquen la espada". Y según la Biblia, matan a 3000 gentes en un día porque adoraban a otro dios. ¡3000 gentes en un solo día! Y eso no lo digo yo, lo dice la misma Biblia. Hagamos unos cálculos: apenas quedaban unas docenas de miles de nómadas en el desierto con Moisés y mató a 3000; valga la redundancia, según la propia Biblia, de esas docenas de miles, mató a 3000 en un solo día. Si comparamos eso con la población de China durante el tiempo de Mao, sería como si Mao matara a 50 ó 75 millones en un solo día. Nadie--ni los más exagerados difamadores de la dictadura del proletariado--jamás ha dicho algo así. Por eso, digo: ¿qué me dicen de Moisés, cabrones?

Y Moisés hizo todo eso, ¿para qué? O sea, ¿al servicio de qué? ¿De qué relaciones sociales? Y, ¿de qué ideas (que apuntalan a esas relaciones sociales)?

Veamos los Diez Mandamientos. ¿Cuál es el primer mandamiento? Que no se debe adorar a ningún otro dios. Por eso, aplastaron y mataron a todo el que adorara a otro dios. Aquí he mencionado solo un incidente, pero en la Biblia hay muchísimos. Y, ¿qué implicaba el mandamiento de "honrar a padre y madre"? Que cualquier joven rebelde, cualquiera que golpeara a sus padres o inclusive les contestara ma... pues lo deberían matar a pedradas. Eso dice la Biblia. ¿Y el décimo mandamiento? Dice que uno no debe codiciar. ¿Codiciar qué? Los bienes ajenos, por ejemplo, los esclavos y esposa (o esposas) del vecino, así como su ganado y otras cosas. Esas son las relaciones sociales que Moisés defendía, y por las cuales cometió tantas barbaridades y masacró a toda esa gente. Su dictadura no respaldaba relaciones emancipadoras sino relaciones que esclavizaban. Por eso digo: ¿qué me dicen de ese cabrón Moisés?

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Lo anterior ilustra un punto fundamental: un nuevo sistema social tumba al viejo orden por la fuerza y además recurre a la fuerza para evitar que sus representantes vuelvan al poder, es decir, para evitar la restauración del viejo orden. La historia demuestra esa verdad, tanto en los levantamientos y revoluciones de las clases explotadoras (el caso de Moisés), como en la revolución y el nuevo estado dirigido por el proletariado y su vanguardia.

Pero nuestras metas revolucionarias son radicalmente distintas a las de las clases explotadoras y sus representantes, y nuestros métodos deben corresponder a esas metas. Por ejemplo, debemos examinar nuestros errores, los errores de nuestra clase y de nuestros líderes, como Stalin e incluso Mao. Debemos examinar la historia de nuestro movimiento y el movimiento de hoy con un espíritu crítico, como en todo. Pero en ese aspecto también nuestra perspectiva, nuestros métodos y objetivos son muy distintos a los de la burguesía y los revisionistas, y no tienen nada que ver con su manera de enfocar los errores de nuestra clase y nuestros líderes.

Mucha gente conoce el Libro Rojo, Las citas del Presidente Mao Tsetung, pero pocos saben que durante la Revolución Cultural, cuando los revolucionarios condenaban a los revisionistas y movilizaban a las masas contra ellos, estos publicaron un tal Libro Amarillo, un libro de citas de Liu Shao-chi, quien era el cabecilla de los revisionistas y el blanco de la Revolución Cultural. Como segundo líder del Partido Comunista (después de Mao), Liu pretendía conducir la sociedad por el camino capitalista. Por eso sacaron la babosada del Libro Amarillo de las citas de Liu Shao-Chi.

Una de esas citas se me quedó grabada en la mente: "Marx, Engels, Lenin, Stalin y el Presidente Mao han cometido muchos errores". Cuando leí eso, dije: "¿Qué me quieren decir con eso?". Porque si fuera el caso que Liu Shao-chi refutaba el planteamiento de que Marx, Engels, Lenin, Stalin y el Presidente Mao jamás cometieron ningún error, sería otra cosa. Pero no fue así. De plano lo que quería decir era que como todos ellos han cometido errores, no hay por qué prestar mucha atención a lo que dicen, a su dirección, a su análisis ni a sus aportes al desarrollo de la lucha, los cuales se concentran en sus obras. Todos han cometido muchos errores, así que no les hagamos caso. La burguesía y los revisionistas tratan los errores, es decir, nuestros errores, de igual modo. Desde luego, todos cometemos errores. Pero, ¿por qué decir algo que es tan evidente? ¿Qué es lo que realmente quieren decir?

Repiten hasta el cansancio la calumnia de que nosotros consideramos que los líderes del movimiento comunista son "infalibles", como si pensáramos que no han cometido errores ni pudieran hacerlo. De hecho, en la historia del movimiento comunista internacional ciertas corrientes no han tenido una actitud revolucionaria crítica, particularmente hacia nuestra causa y nuestros líderes. Debemos analizar esas experiencias y aprender de ellas. Pero jamás hemos afirmado que nuestros líderes son "infalibles", pues tal planteamiento choca con nuestra cosmovisión, y con nuestra metodología científica y revolucionaria.

Por cierto, hablando de gente supuestamente "infalible", ¿qué me dicen del papa? Dicen que el pinche papa es un gran hombre y la iglesia católica afirma que es infalible en cuestiones de religión y moral. ¿Por qué los comentaristas y eruditos, "ideólogos" y "filósofos" burgueses no critican eso? ¿Por qué no señalan que el papa es una idiotez y una monstruosidad? ¿Cuánto sufrimiento han causado el papa y la iglesia católica para las masas del mundo entero, y sobre todo para las mujeres?

¿Por qué alaban al papa y afirman que es un gran líder del pueblo? Porque eso beneficia a los imperialistas, porque ellos necesitan al papa, ideológica y políticamente. Así que no les molesta, como cuestión de "principios" (si es que les preocupan los principios), digo, no les molesta que se plantee que algunas personas son infalibles, pues lo que les importa--y lo que debe importarnos a nosotros--es: ¿a qué clase beneficia? ¿A qué intereses beneficia? ¿Hacia dónde conduce la sociedad? De plano, plantear que el papa es infalible (en cuestiones de religión y moral) es reaccionario y beneficia a la burguesía. En general, el planteamiento de que un individuo, cualquiera que sea, es infalible corresponde a la perspectiva de las clases explotadoras, y no a la perspectiva del proletariado y su lucha por eliminar la explotación y la opresión.

Nos calumnian: dicen que el comunismo (la teoría más revolucionaria y científica del mundo) es un dogma. Reitero que debemos analizar las tendencias a tratarlo como dogma y aprender de esas experiencias. Pero, ¿cómo se atreven a condenarnos por eso, cuando ellos fomentan la religión y el más burdo oscurantismo a diestra y siniestra. ¿Qué me dicen de tontos como Pat Robertson, Jerry Falwell y los demás fascistas cristianos que atacan verdades fundamentales como la teoría de la evolución? La burguesía y la prensa jamás dicen la verdad, no dicen que son una bola de dementes reaccionarios y, peor, reaccionarios teocráticos muy peligrosos. Al contrario, los pintan como participantes legítimos del discurso nacional y del proceso político burgués, "autoridades morales" y contendientes legítimos al liderazgo de esta sociedad.

Nuestro partido y otros del movimiento comunista internacional tenemos el compromiso de sacar un balance de la experiencia de nuestra clase y sus líderes--el aspecto abrumadoramente positivo y nuestros monumentales logros, así como el aspecto negativo e incluso errores graves--de acuerdo al método científico y la cosmovisión del marxismo-leninismo-maoísmo, para que nuestra lucha avance hacia la meta final. Ese es un elemento clave del proceso de unidad y lucha en las filas del Movimiento Revolucionario Internacionalista y las fuerzas revolucionarias del mundo. Pero, repito, nuestro enfoque y balance, inclusive en cuanto a los errores, son muy distintos y tienen un contenido totalmente distinto a los que condenan ciertos errores--y más, tergiversan y calumnian la historia de la lucha revolucionaria proletaria y particularmente los grandes logros de la dictadura del proletariado--porque no quieren que la gente capte la necesidad ni el papel de nuestra revolución histórico-mundial y liberadora.


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