¡Criminal sistema encarcela a periodista revolucionario por defender a Mumia y reclamar justicia!
¡ALTO AL ATAQUE A C. CLARK KISSINGER!
Carl Dix
Obrero Revolucionario #1083, 17 de diciembre, 2000, en rwor.org
El 6 de diciembre, un juez federal de Filadelfia sentenció a 90 días de cárcel a C. Clark Kissinger, colaborador del Obrero Revolucionario, miembro fundador de ¡Rehusar & Resistir! y organizador dirigente del movimiento de justicia para Mumia Abu-Jamal! ¿Su "crimen"? Durante la Convención Nacional del Partido Republicano en agosto de 2000 dio un discurso político en Filadelfia. En su discurso "criminal", denunció ese "Baile de verdugos" y exhortó al pueblo a redoblar la lucha para defender a Mumia.
Declararon que tal discurso era un "delito" porque viola la libertad condicional de Clark, tras su arresto en una protesta frente a la Campana de la libertad en julio de 1999. Según las condiciones impuestas a Clark, no puede viajar sin permiso ni tener contacto con personas condenadas de delitos graves. Con estas dos condiciones, proponen impedir que Clark participe en el movimiento de justicia para Mumia.
En el juzgado, las autoridades dejaron bien sentado que este es un ataque político. Cuando los abogados de Clark dijeron que tenía el derecho de hablar en defensa de Mumia, el fiscal contestó: "Una vez que el Sr. Kissinger violó la ley, perdió sus derechos". El juez agregó: "¿Por qué mencionar la Primera Enmienda? Eso es algo que debe ver el tribunal de apelaciones. El único tema que debe ver este tribunal es si el acusado violó su libertad condicional". Para colmo, poco antes de anunciar la sentencia, el juez desató a los mariscales federales para atacar a los partidarios de Clark; arrestaron a dos y maltrataron a varios más.
Hay que derrotar este vil ataque. El movimiento de justicia para Mumia está en una encrucijada: el tribunal distrital federal podría fijar la fecha de las audiencias en cualquier momento; estas audiencias serán la última oportunidad para presentar las nuevas pruebas que echan por tierra el juicio chueco de 1982. No podemos permitir que nos quiten un importante activista del movimiento en estas circunstancias. Tampoco podemos permitir que lo hagan sin una fuerte resistencia por las consecuencias desalentadoras que tendría en los demás luchadores y en los que están por entrarle. Tenemos que hacer que se les salga el tiro por la culata, y atraer a mucha más gente a la lucha.
¡POLICIAS ASESINOS ANDAN SUELTOS;
REVOLUCIONARIO PRESO POR DEFENDER LA JUSTICIA!En 1985, las autoridades bombardearon la casa de MOVE y mataron a 11 personas, entre ellas cinco niños. La única persona hecha presa tras el bombardeo fue Ramona Africa, por el "crimen" de sobrevivir el ataque. En los años 90, la policía de Filadelfia mató a Donte Dawson, Moisés DeJesús, Anthony DiDonato y un sinnúmero más de personas inocentes y desarmadas. Ninguno de los asesinos fue a parar a la cárcel, pero sí a Clark Kissinger por dar un discurso.
El fiscal insistió repetidamente en sentenciarlo; dijo: "El tribunal tiene que castigar las actividades criminales y proteger al público". ¿De qué actividades "criminales" habla en el caso de Clark? Desde los años 60, Clark ha participado en el movimiento revolucionario. Lleva una década luchando incansablemente para parar la ejecución de Mumia Abu-Jamal y conseguir su libertad. Por sus creencias maoístas revolucionarias, ha luchado para forjar un movimiento amplio, diverso y resuelto. Ha llevado la batalla a los más amplios sectores posibles sin diluir la posición revolucionaria de Mumia ni las oportunidades y peligros para el pueblo y para las autoridades de esta batalla. El trabajo de Clark ha sido un elemento importante en el movimiento: para atraer y movilizar a una gran variedad de individuos y grupos.
Esto es precisamente lo que el gobierno quiere impedir. El movimiento de justicia para Mumia le ha dado duro y ha impedido que lo ejecutara y que lo callara. Para lograr sus propósitos, el gobierno tiene que minar la capacidad del movimiento para organizar poderosas manifestaciones en preparación para la audiencia federal.
He dicho muchas veces: "Tenemos que parar la ejecución de Mumia y conseguir su libertad porque necesitamos que él esté a nuestro lado construyendo un movimiento revolucionario que puede repeler todos los ataques del sistema". Asimismo, necesitamos que Clark Kissinger esté a nuestro lado para construir un movimiento capaz de conseguir la justicia para Mumia y el movimiento revolucionario en general. Por eso, tenemos que movilizarnos al máximo para combatir este ataque a Clark Kissinger: volverlo en su contra y así fortalecer nuestra lucha en defensa de Mumia.
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