Miles repudian la Escuela de Asesinos

Obrero Revolucionario #1083, 17 de diciembre, 2000, en rwor.org

En la Escuela de las Américas (llamada la Escuela de Asesinos), en el fuerte Benning, Georgia, enseñan métodos de contrainsurgencia, asesinato y tortura a militares de Latinoamérica. Cada año, en noviembre, se realizan protestas para que la cierren; este año se llevaron a cabo los días 18 y 19. A continuación publicamos una carta que recibimos de Veteranos de Vietnam contra la Guerra (Antiimperialistas) (VVAW AI).

Viajamos a Columbus, Georgia, para unirnos a las 12,000 personas que participaron en la décima protesta anual contra la Escuela de Asesinos. En medio de nuestra campaña para que se levante el embargo a Irak, y preparándonos para la oposición contra la intervención de Estados Unidos en Colombia, no podíamos estar ausentes este año. Había docenas de Veteranos por la Paz.

Durante el fin de semana se esclarecieron muchas cosas: en la Escuela de las Américas les enseñan a los militares a atacar enemigos "internos", no externos; si estuviéramos en Latinoamérica, cualquiera de los manifestantes sería blanco de los militares que "estudian" ahí; no les enseñan a combatir invasores (¡como Estados Unidos!), sino a la oposición, y el papel fundamental de los estudiantes de la nefasta escuela es defender la estructura de poder y de clase de su país.

A esta lucha se han unidos activistas contra la globalización y el movimiento religioso, y los que participaron en las protestas contra la Organización Mundial de Comercio decían que la Escuela de las Américas es el brazo armado del Fondo Monetario Internacional. Las estructuras de poder que defienden los egresados de la Escuela de las Américas responden a los intereses de Estados Unidos en esos países o regiones.

Fue un tremendo fin de semana. Solo una persona de nuestro contingente no se unió a los 3.600 manifestantes que entraron sin permiso a la base militar. Estaba lloviendo y hacía mucho frío, y nos cubrimos con bolsas de basura plásticas, ponchos, lo que fuera. Mientras leían los nombres de víctimas de la Escuela de las Américas, empezamos a entrar en la base militar en una marcha fúnebre contestando "presente" a cada nombre. Eramos muy variados: religiosas y sacerdotes mayores, activistas religiosos, estudiantes universitarios. Fueron contingentes numerosos de la Universidad Oberlin y de escuelas jesuitas. Al primero que arrestaron fue al padre Roy Bourgeois, ex combatiente de la guerra de Vietnam; el segundo fue el actor Martin Sheen. A unos se los llevaron en camillas porque se dejaron caer, y a otros, como los del contingente Arte & Revolución, se los llevaron arrastrados, boca abajo y esposados.

Lo nuevo este año fue el carácter más aguerrido de la desobediencia civil y la marcha del grupo Arte & Revolución. Cuando ese contingente estaba entrando a la base, los chavos de un contingente anterior se devolvieron a unírsele, ¡y lo alcanzaron!

Un grupo de afinidad de Missouri entró a la base desde un parque cercano vestidos de paramilitares con ametralladoras de cartón; llevaban presos a unos 20 "campesinos''. Apenas entraron en la base los pusieron en un círculo y los ametrallaron. En medio de gritos angustiosos, cayeron en una pila humana. La lluvia derritió la pintura roja que llevaban y formó un charco de sangre macabro.

Al mismo tiempo que se llevaba a cabo esa "masacre", seis monjas, cada una con un muñeco en los brazos, entró en la base, se tiró en el césped mojado y empezó a llorar por los muertos.

Durante la segunda fase de la marcha fúnebre la policía arrestó a tres chavos negros vecinos, y los interrogó y amenazó. Los tres viven en el complejo de apartamentos que está directamente frente al fuerte. Fueron por curiosidad, atraídos por la cantidad de gente, la música y el ambiente. Luego, luego, se unieron a la protesta y entraron en la base, pero cuando regresaban con cientos de manifestantes, la policía los arrestó. Su participación mostró la oposición de los vecinos al fuerte.

En total, hubo 2148 arrestos. A unos los llevaron en buses a un parque cercano y los dejaron ir; a otros los dejaron salir de la base voluntariamente.

Todos los que entraron en la base lo hicieron con orgullo y desafío. Muchos, entre ellos un pacifista que actualmente está en libertad condicional, corrió un fuerte riesgo, pero se escaparon de las garras de la policía militar. El compañero citado también se escapó. ¡Bien hecho, compañero!

Un ex combatiente (uno de los 27 del Presidio) que viajó con nosotros entrevistó a docenas de personas con el equipo de Independent Media Center. Luego nos dijo que muchos fueron por obligación moral; otros dijeron que sienten que aquí tienen muchos privilegios y se vieron en el deber de hacer algo. Muchos chavos dijeron que sentían la "obligación" de hacer algo en nombre de las víctimas del sistema. Predominó un alto nivel de internacionalismo, que tiene grandes perspectivas. Como ya se mencionó, la presencia de los activistas contra la globalización, la OMC, el FMI y las convenciones de los partidos republicano y demócrata tuvo un enorme impacto, especialmente en la juventud.

VVAW AI distribuyó 1.500 volantes sobre la situación en Colombia y el porqué de la intervención estadounidense (véase el No. 41 de nuestro boletín Stormwarning!) . Actualmente, hay más militares colombianos en la Escuela de las Américas que de cualquier otro país. Además, distribuimos aproximadamente 1.000 ejemplares de Stormwarning! y 800 copias de nuestra declaración contra el embargo a Irak.

Rogamos a todos que apoyen esta justa lucha y que redoblen la lucha contra la intervención estadounidense en Colombia. Exhortamos a todos los que protestan contra la globalización a que se unan a este movimiento como un solo puño.

En 1999, el Obrero Revolucionario entrevistó al padre Roy Bourgeois, líder de School of the Americas Watch. La entrevista está en rwor.org.


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