Obrero Revolucionario #1102, 13 de mayo, 2001, en rwor.org
En centenares de ciudades por todo el mundo; en zonas rurales de Nepal, Perú, Filipinas e India donde se está librando la guerra popular; en ghettos y universidades; en marchas por centros de gobierno y distritos comerciales; en reuniones ilegales y celebraciones de camaradas, millones de personas celebraron el 1º de Mayo, Día Internacional del Trabajador, un día para impulsar la lucha por la liberación.
Por todo el mundo hubo protestas contra el capitalismo global, que condenaron las instituciones y corporaciones imperialistas, del Fondo Monetario Internacional a McDonalds. Una creciente oposición al capitalismo se hizo sentir una vez más, cobrando fuerza de las protestas de Seattle, Praga, Cancún y Quebec contra la restructuración capitalista y la dominación imperialista. En Londres, un manifestante le dijo a la prensa: "Estoy aquí para combatir el poder de las instituciones financieras y el capitalismo, que están asfixiando y matando de hambre al tercer mundo".
En Estados Unidos, se vio una diversidad de actividades en muchas ciudades. Miles de inmigrantes y simpatizantes se lanzaron a la calle contra la condición de "ilegal" impuesta a tanta gente trabajadora. Por todo el país, fueron de acciones en la calle a reuniones en librerías revolucionarias para celebrar la publicación del Borrador del Programa del PCR,EU.
A continuación publicamos informes sobre el 1º de Mayo por todo el mundo, en parte de testigos oculares y en parte de la prensa burguesa.
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En Nueva York, se realizaron mítines en el distrito de la costura de Manhattan y en la plaza Union Square para reclamar la amnistía incondicional para todos los inmigrantes indocumentados y fin a la explotación de los trabajadores en los talleres de miseria. Una marcha se dirigió a la sede del Fondo Monetario Internacional.
En la mañana del 1º, unas 400 personas se congregaron frente a la bolsa de valores de Chicago (bautizado el "Templo de la avaricia") y realizaron una animada marcha del distrito financiero por el centro; pararon frente a varios símbolos del gobierno y del capitalismo/imperialismo internacional, como la alcaldía y las tiendas de compañías que operan talleres de miseria, como Nike y Gap. La marcha terminó en el lugar donde ejecutaron a los mártires de Haymarket hace más de un siglo. En la tarde, se formó una cadena humana de centenares de personas en la avenida Ashland para reclamar que Estados Unidos ponga fin al bombardeo de Vieques y que declare amnistía para todos los 11 millones de inmigrantes indocumentados en este país. Dorothy, una afroamericana que participó en la cadena humana, nos dijo: "Creo firmemente que nadie es ilegal. Tenemos que descartar palabras como esa... Tenemos que actuar globalmente y no restringir nuestra visión a lo que nos rodea".
En Long Beach, California, unos 200 chavos participaron en una marcha encabezada por una enorme manta que decía: "¡El capitalismo me robó la vida!". Llevaban cabezas de Jefferson, Washington y otras personas. Al llegar al centro, los atacaron unos cien agentes. La policía abrió fuego con balas de goma y arrestó a unos cien manifestantes. Tras el brutal ataque policial, la alcaldía anunció que Long Beach no es un centro de oposición al capitalismo. Un manifestante contestó: "¿Por qué Long Beach? ¿Por qué San Francisco? ¿Por qué Moscú? ¿Y por qué no Long Beach?".
En Louisville, Kentucky, hubo manifestaciones frente a varios símbolos corporativos. Cuando la policía atacó y arrestó a varias personas, los demás se dirigieron a protestar frente a la delegación policial. En Pittsburgh, Pensilvania, 150 manifestantes paralizaron el tráfico en el centro en una protesta contra el capitalismo global. Ocho fueron a parar a la cárcel. En Albany, Nueva York, los trabajadores migratorios y simpatizantes realizaron una manifestación frente al capitolio estatal. Centenares de personas participaron en marchas en Portland, Oregon y el distrito Mission de San Francisco.
En Londres, Inglaterra, miles de personas llenaron el principal distrito comercial a pesar de las amenazas de la policía. Un estandarte decía: "Un solo accionista es demasiado". Condenaron los centros corporativos e instituciones imperialistas por toda la ciudad. Pelearon con la policía varias veces. Las autoridades mandaron 9000 policías a acorralar las protestas del 1º en zonas pequeñas. Cerca de Oxford Circus, los manifestantes tiraron botellas y prendieron incendios. En el distrito financiero trataron de entrar a la fuerza a las oficinas de la compañía de contabilidad Pricewaterhouse. Los bancos y las compañías de la bolsa de valores avisaron a sus empleados que ese día no se pusieran traje ni llevaran portafolios. Al llegar a las oficinas del Banco Mundial, los manifestantes corearon: "¡Nuestro mundo no está a la venta! Que metan a la cárcel a los banqueros". Centenares de ciclistas paralizaron el tráfico para protestar contra la cultura del automóvil y la contaminación ambiental, y se dirigieron a la embajada estadounidense.
En Australia realizaron manifestaciones frente a la Bolsa de Valores de Sydney, Perth, Brisbane y Melbourne. La policía intervino para mantener abiertas esas instituciones capitalistas y estallaron luchas campales.
Tras un mitin del 1º de Mayo en Zurich, Suiza, la policía atacó a centenares de manifestantes con gas lacrimógeno, balas de goma y cañones de agua, y estos trabaron batalla.
En Estambul, Turquía, más de 20.000 personas desafiaron las amenazas de represión policial y marcharon por las calles en una potente declaración de solidaridad con los presos políticos que están en huelga de hambre. La marcha contó con el apoyo de los sindicatos legales y de varios partidos electorales, pero según los informes periodísticos una parte de la multitud empezó a corear lemas revolucionarios de apoyo al Partido Comunista de Turquía (Marxista-Leninista) (TKP [ML]), un partido maoísta. Se sentaron en la calle para solidarizarse con la huelga de hambre y la policía arrestó a varios. Dejaron flores en la calle en memoria de las 34 personas muertas por las autoridades durante las intensas luchas campales del 1º de Mayo de 1977. También hubo mítines en otras ciudades de Turquía y batallas callejeras en la región curda del este del país.
En Berlín, Alemania, la prohibición oficial y la movilización de policías de todo el país no pudo parar las acciones del 1º de Mayo Revolucionario en el barrio proletario de Kreuzberg. (El gobierno prohibió la manifestación revolucionaria pero dio permiso a un grupo nazi). Unos 5000 radicales y revolucionarios se lanzaron a la calle, y montaron y quemaron barricadas. La policía atacó con cañones de agua. Miles de personas montaron barricadas y trabaron batalla con la policía en Hamburgo y Francfort, la capital financiera alemana.
En Hong Kong, mujeres de Indonesia, Nepal, Filipinas, Sri Lanka y Tailandia protestaron contra la explotación de las trabajadoras domésticas.
En Seúl, Corea del Sur, 20.000 trabajadores y estudiantes pelearon con 15.000 policías. Condenaron los viles ataques contra los trabajadores automotrices en abril. Llevaban un enorme estandarte que decía: "Abajo Kim Dae-jung, quien arruinó la vida de los trabajadores".
En Pnom Penh, Camboya, miles de trabajadoras jóvenes participaron en una protesta contra la explotación de los 150.000 trabajadores de la costura.
En Yakarta, Indonesia, miles de trabajadores marcharon por la ciudad y protestaron contra la sede de varias instituciones imperialistas, como el Fondo Monetario Internacional y el Banco Mundial.
También hubo protestas contra el FMI en Quito, Ecuador; marchas de miles de trabajadores de transporte en Dhaka, Bangladesh; quema de banderas estadounidenses en Honduras; marchas en Colombo, Sri Lanka; una marcha de jóvenes radicales por el centro de Praga, República Checa; y una marcha contra sedes corporativas en Wellington, Nueva Zelanda (Aotearoa).
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