Obrero Revolucionario #1109, 1 de julio, 2001, en rwor.org
Ya salió el Borrador del Programa del PCR. El partido invita a estudiar y debatir el plan de batalla para la revolución. En esta nueva serie, "Exploremos el Borrador del Programa del PCR", examinaremos diversos problemas sociales y cómo propone el borrador que el pueblo los resuelva mediante cambio revolucionario.
"El desarrollo del capitalismo en Estados Unidos se ha basado en la más salvaje opresión de los negros, amerindios, chicanos, puertorriqueños, hawaianos, asiáticos y otros pueblos oprimidos. Tal opresión continúa y, más aún, ha empeorado en muchos aspectos. Resolver esa situación será una primera prioridad de la revolución proletaria".
Borrador del Programa del PCR,EU, p. 91
Las autoridades dicen que la opresión racista es cosa del pasado, que las reformas jurídicas dan igualdad a todos y que por ello no es un problema urgente. Es decir, defienden la dura opresión existente.
Pero "tal opresión continúa y, más aún, ha empeorado en muchos aspectos". Un ejemplo es la segregación de la vivienda.
LA SEGREGACIÓN DE HOY
He aquí las conclusiones de unos estudios universitarios sobre el censo de 2000:
• Continúa una intensa segregación de la vivienda y ha subido en muchas regiones.
• Ha aumentado la segregación de los niños en todo el país.
• Millones de negros viven en comunidades urbanas donde hay muy pocos blancos, y en condiciones intolerables.
A partir de estudios de zonas metropolitanas, los investigadores calculan cuántos miembros hay de cada nacionalidad. Dividen la zona en distritos censales de 4000 a 6000 personas y analizan la distribución de las nacionalidades en cada distrito.
Establecen un "índice de segregación" (o "índice de disimilitud") de 1 a 10 y calculan cuánto tendría que crecer un grupo para alcanzar un patrón uniforme de vivienda en el distrito. Un índice de 0 quiere decir que las nacionalidades oprimidas tienen las mismas proporciones en el distrito que en la zona metropolitana. Un distrito con un índice de más de 40 se considera segregado; de más de 60, altamente segregado.
El censo de 2000 tiene un índice de 65.1, lo que el Instituto Brookings considera "hipersegregado".
El New York Times (4 de abril) comentó que "la población aún viven en comunidades muy segregadas".
Las diez principales zonas metropolitanas segregadas son: Nueva York, Newark, los condados de Nassau y Suffolk (Long Island), Milwaukee, Detroit, Chicago, Cleveland, Cincinnati, St. Louis y Miami.
El Chicago Sun-Times (18 de marzo) informa: "Chicago sigue siendo una de las ciudades más segregadas del país. A pesar de leyes de vivienda de combate al racismo y marchas de derechos civiles, los afroamericanos viven en sus barrios y los blancos en los suyos. Más de cuatro de cada diez chicagoenses viven en comunidades con más de 90% de una raza. Hace una década, eran cinco de cada diez. Casi 1,3 millones de personas, en su mayoría negras, viven en distritos uniraciales".
En muchos casos, la segregación se manifiesta en la división entre los suburbios y los centros urbanos. Más del 70% de los blancos y solo 40% de los negros viven en los suburbios.
Veamos ciertas tendencias a nivel nacional:
Primero, en los años 90, aumentó la segregación en al menos un tercio de las zonas metropolitanas, en especial en los estados centrales y el Noreste. En las zonas urbanas del Sur y el Oeste, el rápido crecimiento generó comunidades más mixtas.
Segundo, ha aumentado la diversidad de la población general, en gran parte por la migración.
Tercero, a nivel nacional bajó un poquito la segregación: de 69.4 en 1990 a 65.1 en 2000. ¿Las causas principales?: la migración de latinos y asiáticos a zonas principalmente blancas y negras, y la migración de una pequeña cantidad de negros a las zonas blancas. Muchos nuevos inmigrantes se han unido a los negros del fondo de la sociedad y las comunidades que tenían una mayoría negra se han vuelto más diversas y multinacionales.
Segregación de niños
"Aunque, en general, los negros y los blancos viven en zonas un poco más integradas que en 1990, aumentó la segregación de niños según el análisis de investigadores de la Universidad Estatal de Nueva York-Albany".
New York Times, 6 de mayo
El índice nacional de segregación de niños fue de 68,3 en 2000, un aumento significativo desde 1990 (65,5), con manifestaciones agudas en varias ciudades importantes. El New York Times dice: "En varias ciudades norteñas como Milwaukee, Detroit y Nueva York, la segregación de niños negros y blancos aumentó fuertemente en la última década, principalmente a causa de la huida de los blancos a los suburbios".
En Milwaukee, el 61% de los 60.000 alumnos de las escuelas públicas son negros; en 1990, eran 46% de 46.000 alumnos. Según un informe de 1999, en 19 de los principales distritos escolares del país, más del 75% de los alumnos son de color (negros, latinos, asiáticos) en 15 y más de 80% son de color en 13.
La segregación de vivienda quiere decir que los niños negros y blancos no van a las mismas escuelas, lo que tiene un efecto negativo en la educación y oportunidades para los niños negros.
Negros de muestra en zonas blancas
En 1960, el 61,8% de los distritos censales de las zonas metropolitanas tenían menos de un 1% de negros. El 17,2% de las comunidades no tenían ni un negro, a causa de las leyes y la violencia racistas.
Hoy, la mayoría de las comunidades blancas tienen unos cuantos negros y gente de color, la mayor causa del pequeño "descenso de segregación" en las cifras de 2000. En aproximadamente 45% de los distritos censales, la población es de uno a diez por ciento de negros. En las comunidades de gran mayoría blanca, ha aumentado la cantidad de personas de color (5%), si bien solo 1% de la cantidad de negros.
Casi no hay migración de los blancos a las zonas negras. Solamente un pequeño porcentaje de los negros han logrado penetrar la barrera "solo para blancos". En 1960, 6% de los negros vivían en comunidades de gran mayoría blanca; ahora la cifra es de 13,5%... 40 años después de la supuesta eliminación de la segregación.
Según el censo del 2000, 23% de los barrios de las zonas metropolitanas todavía son "solo para blancos", con menos de 1% de negros.
Más ghettos
"El descenso de la segregación resulta de la integración de distritos censales antes 100% blancos y no de la integración de distritos censales de 80% o más de negros... El descenso no representa en absoluto la eliminación de los distritos con alto porcentaje de afroamericanos. Entre 1990 y 2000, no cambió la cantidad de distritos con más de 80% de negros".
"Racial Segregation in the 2000 Census: Promising News"
"El blanco promedio sigue viviendo en una comunidad muy distinta a las comunidades donde vive el negro, el latino o el asiático promedio".
John R. Logan, sociólogo, Universidad Estatal de Nueva York
El New York Times (4 de abril) concluyó que hoy, el "habitante negro promedio de la ciudad" vive en una comunidad con 75,5% de minorías, en donde tres de cada cinco habitantes son negros".
Muchos negros prefieren vivir en las comunidades negras porque tienen amistades, tienen casa propia, el ambiente y otras razones. Pero, en esta sociedad, con gran frecuencia sigue imponiéndose la segregación de los negros. Las familias negras están consciente del hostigamiento y los ataques que sufrirán si se mudan a zonas blancas.
Sí existen comunidades prósperas y estables de negros. Pero la segregación de la vivienda se entrelaza con muchas formas más de negarles igualdad y oportunidades a los negros: a las comunidades con gran población negra les niegan servicios de salud, escuelas dignas, préstamos para mantenimiento de casas, transporte público, entradas a carreteras, servicios sociales, mantenimiento de parques, llenado de baches, etc.
Para la juventud hay menos programas y actividades fuera de la escuela, y por su pinta la chota los trata como "enemigos públicos".
¿CUÁL ES EL PROBLEMA?
Las cifras confirman que en los más de 40 años que han pasado desde el movimiento de derechos civiles y de leyes de combate a la discriminación de inquilinos, la segregación sigue siendo profunda y opresiva, en especial en grandes zonas urbanas donde vive tanta gente de las nacionalidades oprimidas.
El borrador tiene un subtítulo intrigante en la página 87: "El imperialismo no puede abolir la opresión nacional"; dice:
"La situación de las nacionalidades oprimidas en Estados Unidos es terrible. Sufren discriminación constante solo por el color de la piel o el idioma. Como miembros del proletariado (y la mayoría son proletarios), se rompen el lomo en los trabajos más agobiantes y peligrosos por salarios de miseria, o no encuentran trabajo. Tienen las peores viviendas, lo peor de un sistema pésimo de salud, lo peor del sistema educativo y demás servicios sociales... En los últimos años, los imperialistas han zampado a las cárceles a montones de jóvenes de las nacionalidades oprimidas... Por otra parte, han inundado las comunidades y escuelas de matones racistas uniformados... Hoy los capitalistas tienen miles de leyes contra la discriminación, pero en realidad manda otra ley: la ley de las ganancias, que deforma la sociedad conforme a los intereses del capitalismo.
"La opresión de los negros y otras nacionalidades oprimidas no es simplemente una cuestión de racismo; fundamentalmente es una cuestión de opresión de naciones y grupos nacionales enteros, lo cual es esencial para el funcionamiento del sistema capitalista en Estados Unidos. Es un pilar de la sociedad capitalista y de la dominación del imperialismo yanqui del mundo entero.
"Los imperialistas sacan mucha ganancia de la opresión nacional. La mayoría de los miembros de las nacionalidades oprimidas pertenecen al proletariado y son super-explotados debido a la opresión nacional que sufren. Es decir, la segregación sistemática, la falta de oportunidades y la discriminación permiten a los capitalistas pagarles sueldos de miseria y sacar superganancias. Esa superexplotación de un sector deprime la situación de toda la clase trabajadora".
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Esta sección del borrador saca una profunda conclusión con enormes implicaciones:
"Por todas esas razones y más, los imperialistas no podrían eliminar la opresión nacional ni la supremacía blanca, aunque quisieran. Como escribe Bob Avakian, presidente del PCR: `En términos sociales y políticos, sería imposible cortar la opresión nacional del tejido social de este país y recomponerlo porque sin esa opresión, se deshilacharía, o sea, se rasgaría completamente el tejido social que existe, que es producto de la historia del dominio capitalista en Estados Unidos. Evidentemente, nosotros como representantes del proletariado revolucionario lo aplaudiríamos, pero la clase dominante imperialista no puede hacer más que rechazarlo rotundamente'".
¿CUÁL ES LA SOLUCIÓN?
Si el sistema capitalista imperialista no puede abolir la opresión nacional, ¿cómo la aboliremos? El borrador propone abolir esta intolerable opresión con la revolución proletaria.
En la Parte I, página 18, dice:
"...la revolución proletaria debe eliminar con urgencia la terrible situación de esas masas, y acabar la desigualdad y el racismo. Todo eso no se puede hacer de la noche a la mañana, pero sí se puede hacer mucho".
A continuación presenta una visión global de la manera de abolir la opresión nacional.
Luego, a partir de la página 87, el apéndice de la Parte II, "Eliminar la opresión nacional y la supremacía blanca", elabora.
Recomendamos que la lectora o el lector lea esas secciones para conocer en detalle cómo el camino revolucionario cambiará radicalmente las condiciones en que vive el pueblo. Aquí presentamos unos pasajes de relevancia para la abolición de la segregación y las intolerables condiciones en que viven las nacionalidades oprimidas:
Página 17: "Un principio de la economía socialista será `empezar por los más necesitados', es decir, dar prioridad a reconstruir y mejorar los ghettos, los barrios pobres y las zonas rurales necesitadas".
Páginas 18-19: "Por ejemplo, la discriminación se prohibirá inmediata y enérgicamente en el empleo, la vivienda y todas las demás esferas. Además de `empezar por los más necesitados', como ya vimos, el nuevo estado brindará los recursos, apoyo y dirección necesarios para superar todas las desigualdades entre nacionalidades y todas las barreras a la participación plena e igual en todas las esferas y todos los niveles de la sociedad.
"La dictadura del proletariado acabará con el aparato policial que impone un reino de terror sistemático en los ghettos y barrios pobres, y castigará a esos hampones a sueldo.
"Se prohibirá la segregación en comunidades, escuelas, etc., y se alentará la integración. El proletariado también apuntará contra todo el chovinismo nacional y las ideas racistas que la burguesía le achaca a `la naturaleza humana'. Aplastará a los que organicen cualquier clase de movimiento o ataque racista. También movilizará a las masas para que paren en seco a los que no son parte de un movimiento organizado pero siguen repitiendo las mentiras racistas tan comunes en este país y para que, por medio de lucha, los ayuden a superar esa ignorancia.
"En términos generales, el proletariado fomentará educación y lucha para destapar y extirpar el profundo y venenoso racismo heredado del capitalismo. A esto contribuirá la gran unidad que se forjará en la lucha revolucionaria para tumbar al imperialismo, así como el mayor contacto entre gente de distintas nacionalidades que resultará de la integración de centros de trabajo, vivienda y escuelas".
Página 88: "Por ejemplo, respecto a la reconstrucción de vecindarios después de la toma del poder, los militantes del partido y gente consciente de clase lucharán con los que no capten la urgente necesidad de esa tarea. Darán el ejemplo de sacrificios personales y trabajo voluntario para construir y reparar los barrios más necesitados. Si no fuera así, la base del poder proletario sufriría porque los oprimidos pensarían con razón: Nada ha cambiado, ¡los oprimidos siempre abajo!".
Página 88: "El nuevo estado socialista tomará medidas especiales e inmediatas para borrar la desigualdad social. A diferencia del capitalismo, que impone la discriminación sistemática y prohíbe la participación de las nacionalidades oprimidas en muchas esferas de la sociedad, el nuevo estado proletario brindará los recursos, apoyo y dirección necesarios para superar todas las desigualdades entre nacionalidades y todas las barreras a la participación plena e igual en todas las esferas y todos los niveles de la sociedad. Eso será completamente distinto a las simbólicas e hipócritas medidas de la burguesía, pues el proletariado reconocerá la crucial importancia de superar completamente el legado de la discriminación y opresión nacional, y brindará el respaldo del poder y la fuerza moral de la dictadura del proletariado".
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El borrador explica cómo las medidas revolucionarias se aplicarán en las comunidades, en el contexto de la organización del poder y del nuevo estado socialista:
Página 19: "El proletariado es partidario de establecer un estado socialista unificado en el mayor territorio que sea posible, pero esa unidad debe ser sentida, no a la fuerza, y debe respetar los legítimos derechos de los pueblos oprimidos. La nueva dictadura proletaria respetará el derecho de los negros, los chicanos y los amerindios a la autonomía (es decir, al autogobierno en las zonas donde los han concentrado) dentro del estado socialista. Los principios generales del autogobierno serán: promover igualdad, no desigualdad; fomentar unidad, no división entre distintos pueblos; y eliminar, no estimular, la explotación. El nuevo estado asignará recursos y dará ayuda para promover el desarrollo de las zonas autónomas.
"Los negros, que se constituyeron como nación oprimida en el Sur del país (en la región llamada Black Belt), tendrán además el derecho a la autodeterminación, es decir, el derecho de separarse y formar una república afroamericana. Aunque el proletariado no es partidario de esa separación en las circunstancias que se pueden prever ahora, se opone firmemente a decidir esto por medio de la fuerza, como lo hacen los imperialistas, y se apoyará en las masas, especialmente las masas negras, para resolverlo.
"Dar tierra y autonomía a las naciones oprimidas no implica que tendrán que vivir en esas zonas, pues sería una nueva forma de segregación. En cambio, el estado proletariado les garantizará el derecho a la autonomía como parte de la orientación de promover igualdad entre diferentes naciones y pueblos, y alentará la unidad y la integración.
"Por otra parte, el estado socialista estimulará el desarrollo de comunidades, centros de trabajo, escuelas y otras instituciones donde viva y trabaje gente de todas las nacionalidades, donde se forjen profundas relaciones de amistad y apoyo mutuo. Esto se dará en el contexto de la lucha general para revolucionar la sociedad, y eliminar y erradicar todas las desigualdades y las divisiones opresivas".
Página 91: "Dar tierra y autonomía a las nacionalidades oprimidas NO implica que tendrán que vivir en esas zonas, pues eso sería una nueva forma de segregación. De hecho, muchísimas personas de esas nacionalidades desearán vivir, trabajar y luchar hombro a hombro con las demás nacionalidades en otras zonas del nuevo estado socialista multinacional, donde participarán en la lucha sin precedentes por rehacer la sociedad y, como parte de eso, eliminar la opresión nacional. Si bien el estado proletario es partidario de la integración y la unidad, respetará plenamente el derecho a la autonomía a fin de fomentar la plena igualdad entre distintas naciones y nacionalidades".
Fuentes
"Racial Segregation in the 2000 Census: Promising News", Edward L. Glaeser, Universidad Harvard e Instituto Brookings, y Jacob L. Vigor, Universidad Duke, abril de 2001, edición del Instituto Brookings
"Analysis of Census Finds Segregation Along With Diversity", Eric Schmitt, New York Times, 4 de abril de 2001, análisis de un estudio hecho por investigadores de la Universidad Estatal de Nueva York-Albany
"Segregation Growing Among U.S. Children", Eric Schmitt, New York Times, 6 de mayo de 2001, análisis de estudio hecho por investigadores de la Universidad Estatal de Nueva York-Albany
"Chicago still trying to break racial boundary", Scott Forner, Chicago Sun-Times, 18 de marzo de 2001
Borrador del Programa del Partido Comunista Revolucionario, EU, mayo de 2001, RCP Publications, en la internet: rwor.org
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