¡LA BATALLA POR EL FUTURO
SE LIBRA DE AQUÍ EN ADELANTE!

¡CREES QUE SABES... PERO NO TIENES IDEA...EXACTAMENTE DE LO QUE BUSH TIENE PLANEADO... PARA TI... PARA NOSOTROS... PARA EL MUNDO... PARA NUESTRO FUTURO!

La neta, Bush y su grupo no son republicanos comunes y corrientes ni cristianos comunes y corrientes tampoco. Son fascistas cristianos, peligrosos fanáticos que apuntan a implantar una dictadura religiosa en este país y el mundo. Si se salen con la suya, y han llegado muy lejos, arrastrarán a la sociedad a una edad media tipo alta tecnología.

¡Los que comparan a Bush con Hitler tienen razón! Y no te esperes a que lleguen a tu comunidad hombres de bigotito cuadrado y soldados que marchan a paso de ganso, como los nazis. Este tipo de fascismo viene de otro modo, derechito de la Casa Blanca.

Cara a cara con el fascismo cristiano

Algunos dicen: "No podrán, no lo harían", no destriparían la democracia "clásica" de este país para aventarnos al fascismo. Pero veamos lo que han hecho... y lo que piensan hacer.

Bush cree que cumple una "misión encomendada por dios", y sus amigotes lo creen también. Hace poco el general del ejército William Boykin dijo que el pueblo iraquí es "la cara de Satanás", que el dios del cristianismo es el único verdadero y que "dios mismo" instaló a Bush en la Casa Blanca. Hizo una declaración pública vestido de uniforme (¡para colmo!) y cuando se prendieron protestas, ¡lo ascendieron! Durante muchos años, los fascistas cristianos se han afianzado en todo nivel del sistema judicial, el ejército y el Congreso. ¡PERO AHORA PIENSAN LLEGAR MÁS LEJOS!, y penetrar más a la cúpula del poder. El magistrado de la Suprema Corte Anthony Scalia y otros republicanos de peso quieren eliminar la separación de poderes entre la iglesia y el estado para que el gobierno apoye e imponga las creencias religiosas.

Bush ha lanzado una "cruzada" mundial. En nombre de "la lucha del bien y del mal", ha masacrado a docenas de miles de iraquíes (y quizá más) y todavía sigue la guerra. En nombre de "combatir el terror", justifica la tortura en prisiones como Guantánamo y la ejecución de presos heridos en Irak. Ese mentiroso sinvergüenza enarbola una nueva "doctrina" que le otorga el derecho de librar la guerra en cualquier momento, dondequiera que "haya una amenaza" y ¿quién sabe hasta dónde parará? Estados Unidos tiene a su haber una larga lista de crímenes monstruosos contra el mundo... y ¡AHORA PIENSAN IR MÁS LEJOS! Los imperialistas en el poder --todos, con Bush al núcleo- apuntan a un imperio global total. Bush cree en el Apocalipsis; cree que el Islam encarna "la maldad" y que él "lucha por dios". ¿Cuánta gente al otro lado del mundo y aquí mismo perderá su vida por esa demencia? Demencia respaldada por el imperialismo y al servicio de él?

Bush y sus compinches suprimen la ciencia. Se han apoderado de dependencias científicas. Fomentan el creacionismo contra la evolución y suprimen la investigación científica sobre asuntos de vida o muerte como el calentamiento global, la epidemia del SIDA y el uso en la medicina de células tronco. A no ser que sirva para sacar ganancias o fabricar armamento, el bushismo odia el espíritu científico de luchar por conocer el mundo. La ciencia pone en tela de juicio su interpretación dogmática de la Biblia que prepara a la población a sacrificarse por "dios y la patria" sin jamás preguntar ¿por qué?

Bush desmantela los derechos democráticos. Han detenido y deportado a docenas de miles de inmigrantes sin motivo o por infracciones leves y han metido a prisión a miles más sin cargos... por muchos años. El gobierno de Bush espía a los grupos políticos y religiosos. Reprime protestas pacíficas con gran envergadura y ¡hasta tanques! Privó descaradamente a centenares de miles de negros del derecho al voto en los últimos comicios. Todo esto y, ¡AHORA PIENSAN LLEGAR MUCHO MÁS LEJOS! Bush contempla más leyes fascistas y sus esbirros atacan a artistas e intelectuales que se atreven a desafiar las normas. El bushismo invade todo aspecto de la vida cotidiana, ¡y es muy posible que barra todititos los derechos!

La moral de Bush: Hipocresía y odio

Bush habla de "valores", pero si eres una joven soltera resuelta a decidir tu propio destino... o un gay que tiene orgullo... los fascistas cristianos te tienen en la mira. Han limitado severamente al derecho al aborto y procuran poner a la defensiva a las mujeres de inclinaciones independientes. Atizaron odio contra los gays como elemento clave de la campaña presidencial. ¡PERO AHORA VAN A LLEGAR MUCHO MÁS LEJOS! Bush piensa nombrar magistrados que prohibirán el aborto y proponer una enmienda constitucional contra el matrimonio gay. Además, estos fascistas atacan las tendencias más humanas del cristianismo que no comparten su intolerancia.

¿"Valores"? ¡Los bushistas tienen la moral de una turba de linchamiento! Si eres negro o latino, y sobre todo si vives en el infierno de los ghettos y barrios pobres de las ciudades de este país, tú también estás en las miras. ¡Hasta piensan barrer la seguridad social! Bush quiere que iglesias subsidiadas directamente por el gobierno y bajo su batuta se hagan cargo de los servicios de salud, la educación, el welfare e incluso las prisiones. Tales iglesias no "ayudarán a la gente"; la degradarán y le inculcarán la noción de que el hambre, vivir sin techo y los demás problemas son la consecuencia de sus "pecados" y no del sistema que la ha oprimido desde siempre. Pero es aún peor el proyecto fascista cristiano cabal (que, entre otras cosas, castigará con la pena de muerte muchos delitos menores, de acuerdo a la "moral" del Antiguo Testamento) con su lógica descaradamente genocida.

La hora de la resistencia

¿Crees que exageramos? Fíjate que más bien la tendencia ha sido subestimar la velocidad con la cual hacen todo esto y lo lejos que Bush piensa llegar. ¡Y ahora dicen que tienen un "mandato" para hacer todas sus barbaridades! Bush y su grupo trabajan en serio y se proponen llegar mucho más lejos de lo que casi todos se imaginan.

Y, ¿qué del "mandato"? ¡PURAS MENTIRAS! La voluntad del pueblo NO se ejerció en estas elecciones. Kerry no refutó las mentiras de Bush ni condenó sus burdos engaños y atrocidades... ni sus planes. No fue una contienda verdadera y no debemos concederle ni una triza de legitimidad a Bush.

Es inútil esperar cuatro años más para que otro demócrata decepcione y traicione al pueblo... ¡y a lo mejor será muy tarde! Ahora lo que necesitamos urgentemente es RESISTENCIA. Resistencia, en las palabras de Bob Avakian, el presidente del Partido Comunista Revolucionario, "que no se deje limitar por la política tradicional ni la noción de que representa 'la última palabra' o 'la voluntad del pueblo'. Necesitamos una resistencia que no busque apenas oponerse al monstruo de guerra y fascismo, sino PARARLO. Una resistencia que se gane a gente que tiene el coco lavado por esta demencia, pero cuyos intereses fundamentales se oponen a ella. Necesitamos una resistencia unida, pero que tenga espacio para sueños y debate".

Podemos avanzar, basándonos en la resistencia contra la guerra de Irak y las otras atrocidades de Bush. Pero la resistencia tiene que cobrar mucha fuerza y avanzar a pasos agigantados con grandes protestas contra la toma de posesión de Bush el 20 de enero. Al mundo entero debe quedarle totalmente claro que SÍ HAY "dos Américas" que se disputan el futuro.

La salida revolucionaria

El fascismo cristiano no surgió de la nada. Surgió del CAPITALISMO y tiene el apoyo de los capitalistas más importantes (aunque peleen entre sí).

¿Qué es el capitalismo? Hoy la población del mundo podría producir suficiente comida, vivienda y ropa para que todo el planeta tuviera una vida digna. Pero un puñado de capitalistas imperialistas globales controla los medios de hacerlo, y rige la ley de acumular más y más ganancias o ir a la quiebra. Por eso, la mitad del planeta vive con menos de $2 al día. Miles de millones pasan hambre. Multitudes tienen que migrar del campo a la ciudad y de sus países de origen hacia otras partes del mundo con la apremiante necesidad de encontrar trabajo, mientras que en este país dejan deteriorar a comunidades enteras. Ahora la demencia de Bush ha llevado todo esto a un nivel más terrible.

Pero, imaginemos otro futuro. Un futuro en que las masas conozcan y transformen conscientemente el mundo y no estén encadenadas por la tradición y la ignorancia. Un mundo sin racismo ni fronteras. Un mundo vibrante en que debatan y decidan colectivamente cómo dirigir la sociedad. Un mundo en que no tengan que angustiarse por cómo dar de comer a la familia ni la posibilidad de quedarse sin techo o abandonadas y enfermas en la tercera edad. Un mundo de abundancia, donde todos compartan en común los recursos de la sociedad. Un mundo donde además de producir los artículos de primera necesidad, las masas le entren al arte, a la cultura y la ciencia, ¡y lo hagan con mucho gusto! Un mundo sin la dominación de la mujer por el hombre, donde las relaciones entre todos se basen en respeto mutuo y amor a la humanidad. Un mundo que se preocupe por el ambiente y lo cuide.

Ese mundo es el comunismo, y podemos hacerlo realidad.

Una sociedad revolucionaria

¿Cómo lo hacemos? A través de la revolución, en que los explotados y oprimidos se alzan y derrotan la estructura de poder. Una revolución dirigida por la clase que no tiene nada más que su capacidad de trabajar y, sin embargo, trabaja colectivamente para hacer todo lo que hace andar al mundo. Una revolución en que esa clase suba al escenario de la historia y dirija a docenas de millones más, entre ellos los millones que odian el dominio cruel de Bush y los fascistas cristianos.

Las revoluciones no se dan de la noche a la mañana ni por casualidad. Pero cuando de repente surja una crisis profunda y cuando un partido revolucionario haya estado organizando y preparando a las masas para eso, y cuando millones de personas empiecen a pensar que necesitamos un cambio básico... y lleguen a ser un "pueblo revolucionario"... entonces es posible hacer realidad los sueños a plena luz del día. Claro, no hemos llegado a ese momento todavía, pero los cambios extremos que impone el bushismo fácilmente podrían llevar a tal crisis, y nuestro partido está haciendo el máximo esfuerzo para que surja un pueblo revolucionario que aproveche ese momento, en cuanto llegue.

Las masas han hecho este tipo de revolución antes, primero en Rusia y, posteriormente, en China, y lograron cambios asombrosos. Sin embargo, al final los guardianes del viejo orden derrotaron esas revoluciones y les dieron marcha atrás. Sobre la base de sus monumentales logros y también examinando a fondo e implacablemente sus aspectos negativos, Bob Avakian ha elaborado una visión y "modelo" radicalmente nuevo de la sociedad socialista.

La sociedad socialista permitirá a las masas resolver los problemas candentes de hoy. Hará trizas "la ley de las ganancias" y habrá trabajo, servicios de salud, vivienda digna y una educación estimulante para todos. Las comunidades serán centros donde el pueblo se una para resolver los problemas que agobian a la sociedad. Desde el primer momento, se luchará por eliminar el racismo y la supremacía blanca que son parte del tejido social del capitalismo estadounidense, así como las cadenas de opresión que todavía pesan tanto sobre la mujer. El país socialista no oprimirá a otros países; en vez, apoyará la revolución en el mundo entero.

Pero lo más crucial, la nueva sociedad desatará al pueblo a cambiar el mundo. El pueblo importará; de hecho, importará más que nada. Los que antes eran excluidos de trabajar con ideas harán precisamente eso: trabajarán con la mente y participarán en todo aspecto de la sociedad. La dirección de la sociedad se empeñará en estimular una diversidad de opiniones y actividad desde las bases y en todo. Fomentará el disentimiento y también oposición al propio gobierno; aprenderá todo lo que pueda del pueblo para hacer que la sociedad avance. Apreciará a los jóvenes por sus sueños, su osadía... y su impaciencia. Habrá fermento y agitación social y política, mucho más de lo que nos podemos imaginar hoy.

Ciertamente debe haber y habrá una dirección firme que se aferre al poder para el pueblo y guíe toda la lucha compleja y difícil. A través de todo el proceso, y a medida que se desarrollen otras revoluciones en todo el mundo, el gobierno irá incorporando a millones y millones de personas más a la administración de toda parte de la sociedad hasta que la división entre los que gobiernan y los gobernados se supere por fin en la sociedad comunista.

De acuerdo a la visión de Bob Avakian, el socialismo incorporará a los científicos, intelectuales y artistas. Seguirán haciendo su trabajo intelectual y artístico, y ampliando los conocimientos humanos, a la vez que van rompiendo los muros que los han separado de otros sectores de la sociedad, especialmente de los antes explotados y oprimidos. La dirección de la sociedad no tendrá temor a la tendencia de cuestionar todo o ver las cosas de otra forma. Por el contrario, la animará de una manera que ninguna otra sociedad pueda, porque sin un cuestionamiento vibrante y "espacio para respirar" el socialismo no será un lugar donde queramos vivir ni abrirá el camino hacia el comunismo.

En esta sociedad revolucionaria el pueblo tendrá el derecho a practicar su religión y asistir a la iglesia, o no, como prefiera. Pero las escuelas y el gobierno fomentarán el método científico de comprender y cambiar la realidad material. Sobre esa base se forjará una nueva moral que aprecie la vida de los pueblos del mundo, defienda la igualdad entre naciones y pueblos y entre mujeres y hombres, y desarrolle una orientación científica hacia el mundo. Valorará la lucha contra las relaciones de opresión que quedan, y no la resignación o capitulación ante ellas.

El choque de dos futuros

Dos futuros se confrontan hoy. ¿Los imperialistas lograrán imponer un futuro de tinieblas y sofocación? ¿Docenas de millones más sufrirán y morirán innecesariamente? ¿O se desatará el espíritu crítico de una manera que BENEFICIE inmensamente a la humanidad? ¿La sociedad avanzará por el rumbo revolucionario y acabará con el gran sufrimiento y miseria que el capitalismo impone al pueblo?

En otras palabras, ¿cuál visión prevalecerá: la de George W. Bush o la de Bob Avakian?

Corresponde a cada cual determinar la respuesta. Sabemos que la tarea es monumental y el tiempo apremia; indudablemente se trata de una lucha cuesta arriba. Pero estamos puestos para esto, totalmente puestos, además de optimistas.