Ser mujer en un mundo de dominación masculina…

¡Avivar las llamas del actual auge de lucha — Difundir esta cita de BA en todas partes!

30 de noviembre de 2017 | Periódico Revolución | revcom.us

 

En todas partes de este planeta… en cada esfera de la sociedad… entre todo sector social… tratan a las mujeres y niñas como algo menos que un ser humano. Es muy positivo el reciente auge de lucha de mujeres que rompen el silencio para desafiar la dominación, el acoso y asalto sexuales, y otras formas de abuso que sufren en muchas esferas de la sociedad. Hay que apoyarlo, y hay que extenderlo más ampliamente — para que extienda al fondo y active la participación de mujeres de las fábricas y los sembradíos, en los restaurantes y hoteles, en las prisiones y centros de detención, en las secundarias y los colegios, en cada rincón de esta sociedad. Debe profundizarse mucho más — haciendo que millones de personas cuestionen e investiguen las raíces de esta opresión y degradación, no en la “naturaleza humana” sino en la naturaleza del sistema de capitalismo-imperialismo que ahora domina el globo y de todas las anteriores sociedades divididas en clases. Además, debe apuntar mucho más alto — a crear un mundo en el que nunca más vuelvan a tratar a las mujeres y niñas como objetos sexuales, sacos de boxeo, reproductoras, o posesiones del hombre en ninguna forma, por medio de la revolución más completa en la historia de la humanidad, una revolución comunista genuina que emancipa a toda la humanidad.

Como parte de unirnos con este auge importante y avivar más las llamas, y para infundirle cada vez más con un conocimiento científico de las raíces de esta opresión sistémica y su resolución liberadora y realista por medio de una revolución real, instamos a los Clubes Revolución y a otros a difundir muy ampliamente la siguiente cita del líder revolucionario, Bob Avakian:

Mira a todas estas hermosas niñas en el mundo. Además de las demás atrocidades que he mencionado, respecto a las y los niños en los cinturones de miseria del tercer mundo, además de todos los horrores que se amontonarán en su contra —cientos de millones de personas tienen como destino vivir en medio de la basura y las aguas negras, una vida que les espera, incluso antes de nacer—, para colmo existe para las niñas el horror que conlleva el mero hecho de ser mujeres en un mundo de dominación masculina. Y eso es cierto no sólo en el tercer mundo. Además, en los países “modernos” como Estados Unidos las estadísticas apenas lo captan: los millones de mujeres que serán violadas; los millones más de ellas que de forma rutinaria serán menospreciadas, engañadas, degradadas y muy a menudo brutalizadas por parte de aquellos que se supone que son sus amores más íntimos; la forma en que tantas mujeres serán objeto de humillación, persecución y acoso cuando traten de ejercer sus derechos reproductivos a través del aborto o incluso a través del control de la natalidad; las muchas de ellas que se verán obligadas a ejercer la prostitución y la pornografía; y todas aquellas que —si no tienen ese destino concreto e incluso si consiguen algún éxito en este “nuevo mundo” donde se supone que no existen barreras para las mujeres— estarán rodeadas por todos lados y serán insultadas en cada momento por una sociedad y una cultura que degrada a las mujeres, en las calles, en las escuelas y en los lugares de trabajo, en el hogar, a diario en innumerables formas. 

—Bob Avakian, Lo BAsico 1:10

Lean esta cita a voz alta y adéntrense en ella con grupos de amigos y con desconocidos. En el pasado, revolucionarios la han llevado a mesas en comedores estudiantiles, leyéndola a voz alta y provocando conversaciones profundas con grupos de personas con las que nunca habían hablado antes. Esto —y más cosas semejantes— deben ocurrir en todas partes donde la gente se junte. Repartan tarjetas de mano de esta cita en programas públicos que tratan el asalto y el acoso sexuales y los derechos reproductivos. Llévenla a comunidades inmigrantes y proyectas de vivienda pública. Inyecten la verdad concentrada en esta cita en conversaciones en todas partes y, al hacerlo, permitan que la gente conozca al revolucionario más radical que viva en el planeta de hoy: Bob Avakian. Háganles saber del compendio que incluye esta cita: ¡A romper TODAS las cadenas! Bob Avakian sobre la emancipación de la mujer y la revolución comunista — compartan copias de ella si las tienen, o si no, accedan al enlace en los teléfonos de las personas. Usen esta cita para movilizar para los Mítines de Agravios que Rechazar el Fascismo está haciendo contra la degradación sexual — y léanla y repártanla ahí. 

En conclusión, escríbannos en revolution.reports@yahoo.com para contarnos de las repuestas que reciben, de qué tipo de preguntas surgen, y de otras ideas que tienen sobre cómo podemos avanzar aún más para romper las cadenas, y desencadenar la furia de la mujer como una fuerza poderosa para la revolución.

 

 

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