De última hora, 17 de marzo:
¡Se declaró el segundo juicio nulo!

Nuevas pruebas de la conspiración en contra de movimiento contra el fascismo

Los 9 de la autopista están de vuelta en la corte, ¡OTRA VEZ!, enfrentando años de cárcel por dar la alarma sobre el régimen fascista de Trump y Pence.

| revcom.us

 

De última hora: En el segundo juicio de dos de los 9 de la Autopista [#Freeway9], Alex y Chantelle, el jurado no podía llegar a un acuerdo sobre todos los seis cargos, y el lunes 16 de marzo el juez declaró un juicio nulo — ¡otra vez! ¡Ya basta! Llame al fiscal municipal de Los Ángeles Mike Feuer para exigir que se retiren los cargos: 213.978.8100, o tuitee a @Mike_Feuer.

Un escandaloso caso de persecución política está ocurriendo en este momento en Los Ángeles, en contra de cinco de los 9 de la autopista (#Freeway9): miembros de Rechazar el Fascismo y del Club Revolución que tomaron parte en las valientes acciones en 2017 con el fin de hacer sonar la alarma acerca del régimen fascista de Trump y Pence. Estos manifestantes bloquearon, dos veces, el tráfico de la hora punta de la mañana en la autopista 101 con una pancarta de 7 metros que declaraba “El régimen Trump y Pence tiene que marcharse”. Estas acciones fueron justas e inspiradoras, y a los #Freeway9 se les debería agradecer y celebrar. Pero en cambio ahora, por segunda vez, se encuentran objetos de persecución por parte de la fiscalía y amenazados con hasta tres años de cárcel.

Por casi dos años y medio, el Departamento de Policía de Los Ángeles (DPLA) y la oficina del fiscal municipal demócrata de Los Ángeles han atacado, espiado y procesado a estos héroes. Actualmente dos casos se van a ir a juicio como resultado de las acciones en la autopista 101. El año pasado tuvo lugar uno de los casos, el juicio de Alex y Chantelle, el que resultó en un juicio nulo, y los están procesando de nuevo. El juicio de otros tres acusados en el segundo caso, con los mismos cargos, está programado para luego este mes.

Aunque la fiscalía no logró condenarlos en el primer juicio, el proceso vengativo continúa con un nuevo juicio

En el juicio del año pasado, los acusados lucharon para sacar a la luz los aspectos políticos del juicio. Sus partidarios, que llenaron la sala del tribunal en momentos clave del juicio, llevaron camisetas con consignas como “¿Habrías condenado a Rosa Parks?”; “Trump = Hitler yanqui”; y “Niños en jaulas: ¿De qué lado estás?” Chantelle y Alex subieron al estrado y, desafiando los intentos de los fiscales de silenciar y restringir su mensaje, explicaron por qué se subieron a la autopista para interrumpir la vida rutinaria. También publicaron un artículo de opinión en el Los Angeles Times, “The LAPD spied on our group. Here’s why we shut down the 101 Freeway” [El DPLA espió a nuestro grupo. Explicamos aquí por qué bloqueamos la autopista 101], lo que llegó a millones de personas. El juicio terminó con un jurado en desacuerdo, con nueve de los doce jurados votando por la absolución. Esta fue una importante victoria, la que debió haber conducido de inmediato al fin del proceso contra los 9 de la autopista. Pero en cambio, el fiscal municipal Mike Feuer comenzó nuevos juicios con estos cargos injustos.

Uno de los acusados de los #Freeway9 lo expresó de esta manera: “¿Quiénes son los verdaderos criminales aquí? Acabamos de ver a los verdaderos criminales en la Casa Blanca salir impunes en una farsa de un juicio, en la que se suprimió la evidencia, y la verdad no importaba en absoluto. Estos criminales han hecho cosas horribles a los inmigrantes, los niños, las mujeres y las personas LGBTQ, y en sus guerras alrededor del mundo. Y nosotros, los que nos hemos puesto de pie en su contra, nos encontramos criminalizados y llevados a los tribunales durante dos años y medio por un demócrata, el fiscal Mike Feuer, quien por sus acciones está colaborando con estos fascistas. Imaginen los horrores que podrían haberse evitado si la gente hubiera respondido a nuestro llamado en 2017. ¡En lugar de ser celebrados por nuestra previsión y coraje, nos ha acosado y atacado el DPLA, somos el blanco de vigilancia inconstitucional y nos imponen interminables citas en la corte! Todo el mundo debe preguntarse, ¿De qué lado estás? ¡Liberen a los 9 de la autopista! ¡Retiren los cargos!”

Sale más información sobre el informante de los cerdos policías que trató de hacerles caer en trampas a los manifestantes

El caso de los #Freeway9 irrumpió en las noticias nacionales el año pasado cuando el Los Angeles Times y el Guardian informaron que el DPLA había enviado a un “informante confidencial” (es decir, un espía) de su División Antiterrorista a reuniones de Rechazar el Fascismo en una iglesia a pocos días de las acciones de protesta no violenta en la autopista. En respuesta a la revelación de este espionaje, el DPLA dijo que llevaría a cabo una “investigación”. En una reunión de una comisión policial, el jefe del DPLA anunció el resultado de la “investigación”: que su espionaje era legal y no necesitaba una “supervisión independiente” porque se trataba de una investigación de actividad “criminal” y no de vigilancia política. El jefe de los cerdos policiales presentó una narrativa totalmente falsa de acusaciones sin fundamento de actividad “criminal” en una zona completamente diferente de California, sin ofrecer ninguna evidencia. En otras palabras, el espionaje policial está perfectamente bien… “¡porque nosotros lo afirmamos!”

Más recientemente, durante el proceso previo al nuevo juicio, salieron a la luz porciones de grabaciones de audio del informante confidencial del DPLA en las reuniones de Rechazar el Fascismo. Uno de los abogados de los acusados informó en la sala del tribunal que en las grabaciones, se le puede escuchar al espía tratar repetidamente de atrapar a Rechazar el Fascismo. En la primera reunión en la que espió, en una discusión sobre la supremacía blanca, el espía dijo: “Ustedes me pueden dar un arma cuando quieran. A ellos les dispararé”. Además, el abogado dijo, “Alguien en la reunión respondió inmediatamente: ‘Esto no es lo que hacemos nosotros’”. Y este abogado informó que en la misma reunión, cuando uno de los asistentes dijo que “hay millones de personas que votaron por Trump y tenemos que lidiar con eso”, se puede oír al espía del DPLA decir, “No, tenemos que wreck [destruir/hacer pedazos] eso”, una vez más tratando de incitar la violencia. En cada caso, en la grabación se les puede oír a los miembros de Rechazar el Fascismo diciendo claramente que lo que el espía estaba tratando de incitar no era lo que hacía Rechazar el Fascismo, que RF convoca la protesta de masas no violenta. El abogado de los acusados estaba señalando que el motivo de este informante no era solamente sacar información sobre los planes para posibles delitos, sino que intentaba incitar y atrapar a otros para llevar a cabo actividad ilegal, actuando como un agente provocador.

Reprimiendo la expresión política para acelerar una farsa fascista de un juicio

Los jueces de los dos casos restantes de los #Freeway9 ya han denegado peticiones que argumentaban que los cargos deben retirarse porque esto es un caso de enjuiciamiento selectivo —en otras palabras, de persecución política— a pesar de la evidencia presentada que apoya el caso de la defensa de que la fiscalía trató a los acusados de #Freeway9 de manera diferente que otros casos de bloqueo de autopistas, y que esto se debió a las opiniones políticas que sostienen.

En este segundo juicio de Alex y Chantelle, la fiscalía ha presentado una petición indignante que pide al juez ¡que prohíba el uso de las palabras “Trump”, “fascismo” y “Primera Enmienda” en la corte (inclusive en el testimonio de testigos de la defensa); que prohíba todos los letreros, pancartas, camisetas y volantes; y que prohíba que nadie hablara de “injusticias sociales” dentro de 46 metros del juzgado! La defensa ha argumentado que esta petición por la fiscalía constituye un intento indignante de amordazar a los acusados, de impedir que presenten su defensa.

En la última audiencia, el viernes 6 de marzo, uno de los abogados de los #Freeway9 planteó estas preguntas: “¿Cuál es el papel que juega el Estado cuando el pueblo ejerce su derecho a disentir contra el gobierno?” y “¿Cómo respondió la policía a la acción no violenta del bloqueo de la autopista que llevó a cabo Rechazar el Fascismo?” Este tipo de vigilancia policial, autorizada en los niveles más altos del DPLA, “es perjudicial para la sociedad civil, inclusive para el derecho a realizar protestas políticas pacíficas y desobediencia civil no violenta”. El abogado señaló lo que ha salido a la luz no solo sobre el espionaje del DPLA contra Rechazar el Fascismo, sino sobre sus intentos de incitar a la actividad violenta. De ahí el abogado lo conectó con la historia del gobierno estadounidense y su vigilancia, encarcelación y asesinato de muchos activistas y líderes políticos.

La fiscalía tuvo el descaro de afirmar que la operación de espionaje y trampas del DPLA no era gran cosa ¡porque no encontraron lo que buscaban! Los abogados de los #Freeway9 respondieron que cuando la policía lleva a cabo esta clase de operaciones tiene efectos más grandes y muy dañinos para la sociedad. A aquellos que participan en protestas no violentas ¿los van a espiar, tachar de “terroristas” y preparar trampas para presentarles cargos? ¿Enfriará el disentimiento y silenciará las voces que de otra manera habrían denunciado los crímenes de su gobierno? ¿Se penalizará la actividad que la Primera Enmienda defiende?

Se necesita urgentemente a USTED para apoyar a estos acusados

Hay grandes cuestiones reflejadas en la persecución política de los #Freeway9. ¿Qué clase de ejemplo se daría si a aquellos que se oponen a los crímenes de este gobierno se les permitiera ser encarcelados bajo cargos falsos? ¿Cuáles serían las consecuencias para la humanidad si se criminalizaran las protestas de masas que se necesitan tan urgentemente en este momento? ¿Hasta dónde llegaría la expansión de los poderes policiales, ya que nazis estadounidenses están al mando, si la gente no trazara una raya aquí y ahora mismo?

 

Lea el texto de la película en español.
Vea unos cortos y las preguntas y respuestas de esta película en inglés.

¿Quién es la División de Delitos Mayores del DPLA, también conocida como la División Antiterrorista?

Un informe policial relacionado con el caso de los 9 de la Autopista revela que la División de Delitos Mayores del DPLA envió un informante confidencial a las reuniones de Rechazar el Fascismo para “recabar inteligencia” y grabar ilegalmente conversaciones sin el conocimiento de las personas con las que habló. La División de Delitos Mayores es parte de la Oficina de Contraterrorismo y Operaciones Especiales del DPLA.

Hay una historia larga, sórdida y asesina, de espionaje ilegal de parte del DPLA contra una amplia gama de individuos y organizaciones progresistas, radicales y revolucionarios que se inició en la década de 1950. En ese entonces, fue parte de la respuesta del gobierno de Estados Unidos al apoyo e influencia política de la Unión Soviética. Durante las décadas desde ese entonces, de manera ilegal el DPLA ha espiado, infiltrado e intentado desbaratar a los grupos que llevaban a cabo actividades políticas protegidas por la Constitución estadounidense. En 1970, el DPLA estableció la División de Inteligencia del Desorden Público (PDID, por sus siglas en inglés). Se divulgó que los agentes de la PDID se hicieron pasar por miembros estudiantiles de “grupos radicales” como Students for a Democratic Society (SDS, Estudiantes por una Sociedad Democrática) en la Universidad de California en Los Ángeles, así como grupos como el sindicato United Farmworkers (Trabajadores Agrícolas Unidos). Algún tiempo después, se descubrió que la PDID tenía más de 55.000 expedientes de inteligencia no solo sobre grupos radicales, sino decenas de miles de personas, desde figuras notables de Hollywood hasta periodistas, y que compartió estos registros con organizaciones derechistas. La Unión de Libertades Civiles de los Estados Unidos (ACLU) investigó las actividades ilegales de la PDID y descubrió a policías encubiertos que admitieron haber espiado ilegalmente a organizaciones políticas, incluido el Partido Comunista Revolucionario (PCR).

Veamos un resultado mortal de una de las operaciones ilegales de la PDID: En 1980, el comunista revolucionario Damián García junto con otros dos revolucionarios izaron la bandera roja sobre El Álamo en Texas, lo cual denunciaron como un símbolo de la conquista y dominación del imperialismo estadounidense. Veinte días después, Damián fue asesinado en un multifamiliar del Este de Los Ángeles mientras hacía trabajo revolucionario, impulsando el Primero de Mayo de 1980, por un individuo que declaró “odias al gobierno, yo soy el gobierno, tu bandera es roja, la mía es la rojiblanquiazul”. Luego ese mismo individuo fue asesinado de forma misteriosa, lo que quizá fuera un encubrimiento. Más tarde se descubrió que en el momento del asesinato de Damián, un policía encubierto del DPLA se encontraba a menos de dos metros de Damián. Este mismo cerdo había escrito informes internos para el DPLA que habían identificado a Damián como su “blanco” asignado basado en la afiliación política de Damián con el PCR.

En 1983, a la luz de las revelaciones del espionaje ilegal del DPLA y su persecución selectiva a organizaciones políticas e individuos, la presión obligó a que se disolviera la PDID y se creara una nueva división, la División Antiterrorista (ATD, por sus siglas en inglés). Pero la ATD incorporó funciones centrales de la PDID, además de aumentar la vigilancia, especialmente el espionaje electrónico. Cuando era jefe del DPLA, el infame Darryl Gates manejaba una operación de espionaje político internacional. En 1992, el PCR encabezó una batalla política para clausurar un campo de concentración secreto del Servicio de Inmigración y Naturalización (el precursor del ICE) en Pico-Union, un barrio densamente poblado de centroamericanos. El DPLA atacó brutalmente y arrestó a 21 personas durante una serie de protestas. Durante el enjuiciamiento a estos 21 manifestantes, los cargos se retiraron cuando el DPLA se negó a entregar los nombres de todos los agentes de la ATD que quizá estuvieran presentes durante las manifestaciones, así como cualquier documentación relacionada con la planeación de la ATD antes de las protestas. La ATD ahora se llama la División de Crímenes Mayores, misma que admite haber realizado espionaje policial ilegal contra Rechazar el Fascismo en relación con los 9 de la Autopista.

 

 

 

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