Cuando se haga la revolución, ¿cómo cambiarán las cosas?

El imperialismo significa guerra, ejércitos de ocupación y la innecesaria y horrible matanza de millones

Pero, ¿qué haría de manera diferente la Nueva República Socialista en América del Norte?

Todo.

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Comenzando con el propósito mismo del estado. El Preámbulo de la Constitución para la Nueva República Socialista en América del Norte, de la autoría de Bob Avakian, establece desde el principio que el objetivo de esta República es “la abolición final de todas las relaciones explotadoras y opresivas entre los seres humanos y de los conflictos antagónicos destructivos que surgen de esas relaciones”.

Más adelante dice:

Todo eso es un proceso y un objetivo que en lo fundamental y en el análisis final, sólo se podrán lograr a escala global con el avance al comunismo por todo el mundo. La orientación y los principios de este estado, encarnados en la presente Constitución, son internacionalistas: si bien presta la debida atención a satisfacer, sobre una base cada vez más amplia, las necesidades materiales, intelectuales y culturales de los habitantes en este estado y a fomentar la mayor transformación de esta sociedad para seguir arrancando de raíz las desigualdades sociales y los aspectos que queden de explotación y opresión, el estado socialista debe darle la prioridad fundamental al avance de la lucha revolucionaria y el objetivo final del comunismo por todo el mundo y adoptar y llevar a cabo políticas y acciones que concuerden con esta orientación internacionalista y la pongan en práctica.

Tomemos una pausa para pensar acerca de esa última parte. ¿Pensaste acerca de lo que dice? El nuevo estado socialista debe darle prioridad fundamental al avance de la lucha revolucionaria, y al objetivo final del comunismo, en todo el mundo. Y este nuevo estado debe adoptar y ejecutar políticas y acciones que “concuerden con esta orientación internacionalista”.

Así que, ¿a qué “se parecen” esas políticas y acciones? Repasemos la sección sobre Relaciones Internacionales, Artículo I, Sección 2, punto E.

1. Durante siglos, el desarrollo de los Estados Unidos de América como un poderoso estado capitalista imperialista se caracterizó y se basó en la expansión por medio de la esclavitud, la conquista, la dominación y el saqueo, en dimensiones genocidas, extendiendo por estos medios su sistema de explotación por buena parte de América del Norte y en grandes partes del mundo con consecuencias devastadoras para aquellos que fueron víctimas directas de su fuerza arrasadora de opresión y para la humanidad en general. La derrota y el desmantelamiento del estado imperialista de los Estados Unidos de América, de sus tentáculos de gran alcance de sofocante opresión y su maquinaria de muerte y destrucción masiva, habrá asestado un tremendo golpe a favor de la liberación del pueblo en todas partes del mundo y fortalecerá enormemente la base para realizar mayores avances y saltos en la lucha revolucionaria por todo el mundo hacia la meta final del comunismo. No obstante, queda por hacerse mucho más para obtener mayores victorias así como para defender lo que ya se ha ganado, y la Nueva República Socialista en América del Norte debe asumir ese reto y esa responsabilidad.

Así que desde el principio, éste es un estado que —a diferencia de los que tenemos ahora— va a decir la verdad sobre la verdadera historia y naturaleza de Estados Unidos y el sistema que lo ha manejado. Desde el principio se dedicará a superar ese legado. Señala: hacer caer esta bestia que cabalga sobre la espalda de la gente del mundo, cuando surjan las condiciones para hacerlo, será un enorme paso en sí para que la gente de todo el mundo logre su liberación.

La Constitución continúa dando una idea de lo que significará llevar más allá esa responsabilidad.

2. En sus relaciones internacionales, la Nueva República Socialista en América del Norte dará prioridad para superar el terrible legado de explotación y depredación de los Estados Unidos de América imperialistas y para contribuir todo lo que pueda al avance hacia un mundo en el que finalmente hayan terminado toda conquista, saqueo y dominación y toda explotación. Tratará las relaciones en la arena internacional, incluyendo aquellas con los otros estados, en concordancia con estos principios y prioridades. En lo más fundamental, la Nueva República Socialista en América del Norte debe ser una base y fuente de apoyo y de inspiración para la revolución mundial. (En esta conexión y en relación a lo siguiente, ver también la parte C anterior en este Artículo y el Artículo IV.) Esto se expresará, ante todo y en primer lugar, en el apoyo a las fuerzas, los movimientos y las luchas revolucionarios en todo el mundo con el objetivo de avanzar a un mundo comunista como el principio-guía fundamental.

Así que, a diferencia de la forma en que el régimen imperialista de Estados Unidos, o encabezado por los republicanos o por los demócratas, utiliza su terrible poder represivo para someter a golpes a las personas y mantenerlas encadenadas a una vida de explotación brutal y pulverizadora, incluidos 160 millones de niños pequeños en África, Asia y América Latina, este estado —la Nueva República Socialista en América del Norte— apoyará a la gente en todas partes en su lucha por liberarse de esas cadenas.

Pero, ¿qué hará la Nueva República Socialista con respecto al hecho de que la revolución no triunfará de una sola vez en todas partes, y todavía habrá potencias imperialistas en el mundo —potencias que amenazarán al nuevo estado socialista? Mantendrá relaciones — pero de acuerdo a sus propios términos.

3. Las relaciones con los estados que siguen siendo imperialistas y con otros estados reaccionarios en cualquier momento dado no deben estar en conflicto fundamental y deben estar subordinadas al desarrollo y la transformación de la Nueva República Socialista en América del Norte en el camino del socialismo y sobre todo el avance de la lucha revolucionaria en todo el mundo hacia la meta del comunismo. Los tratados y los acuerdos concernientes al comercio y otros aspectos de las relaciones entre los estados deben estar en conformidad con esta orientación y estos principios. (Como se expone en la Sección 1 de este Articulo, todos los tratados y acuerdos similares suscritos por el gobierno de la Nueva República Socialista en América del Norte deben ser aprobados por la Legislatura central, por un voto de una mayoría de la mitad más uno y cuando sean aprobados tienen efecto y fuerza de ley.)

Al mismo tiempo, como señala el punto 4: “Con los otros estados socialistas que existan, o que surjan, la Nueva República Socialista en América del Norte tendrá la orientación de desarrollar relaciones de apoyo y ayuda mutua, y esfuerzos mutuos para ayudar a la lucha revolucionaria en todo el mundo”.

Eso es algo muy importante con que contar para las personas que no han obtenido la libertad, que les da inspiración y las fortalece: una comunidad mundial de repúblicas socialistas, todas las que se esfuerzan por llegar a un mundo libre de explotación y opresión, y que apoyan esa lucha en todas partes.

Finalmente, en lo que respecta a las nacionalidades y las regiones que han sido mantenidas sometidas dentro de lo que era Estados Unidos, aquí también la política será diametralmente distinta a la forma en que opera el sistema actual. En futuros artículos, hablaremos de aspectos de este último punto.

5. Con respecto a las desigualdades entre las nacionalidades y las regiones (así como otras desigualdades) en la Nueva República Socialista en América del Norte como resultado del desarrollo histórico y el funcionamiento de los Estados Unidos de América imperialistas, la Nueva República Socialista en América del Norte le dará una prioridad importante, en el desarrollo de la economía, en la estructura y el funcionamiento del gobierno y, en otras maneras, a la superación de esta desigualdad como una parte crucial de desarrollar este nuevo estado socialista en conformidad con los principios y los objetivos establecidos aquí y en otras partes de la presente Constitución.

Así que, ¿en qué sería diferente? No sería un poder estatal que causa estragos en todo el mundo, saqueando a la gente y expoliando el medio ambiente, haciendo caer el terror sobre las personas cuando se atrevan a levantarse o incluso cuando los gángsteres de poca monta que las gobiernan se resisten al gran gángster en Estados Unidos... No. Esto es un poder estatal orientado a crear un mundo completamente nuevo, dedicado a la emancipación de la humanidad y al fin definitivo de los conflictos sociales antagónicos. Una comunidad mundial de seres humanos.

Así que, ¿qué mundo de diferencia causaría el poder estatal revolucionario en el ámbito de las relaciones internacionales?

La diferencia entre día y noche.

De Declaración de año nuevo de Bob Avakian

Un año nuevo, la necesidad urgente de un mundo radicalmente nuevo —
Para la emancipación de toda la humanidad

Es un hecho que no existe en ningún otro lugar, en ningún documento de fundación o guía real o propuesto de ningún gobierno, nada que se parezca no sólo a las protecciones sino a las disposiciones para el disentimiento y la efervescencia intelectual y cultural que están encarnadas en esta Constitución, mientras que ésta tiene, en su núcleo sólido, una cimentación en la transformación socialista de la economía, con el objetivo de abolir toda explotación, y la correspondiente transformación de las relaciones sociales e instituciones políticas, para arrancar de raíz toda la opresión, y la promoción, por medio del sistema educativo y en la sociedad en su conjunto, de una orientación que “habrá de capacitar a las personas en buscar la verdad dondequiera que ésta conduzca, con un espíritu de pensamiento crítico y curiosidad científica y de esta manera aprender continuamente acerca del mundo y estar mejor capacitadas para contribuir a cambiarlo en conformidad con los intereses fundamentales de la humanidad”. Todo esto desencadenará y desatará una tremenda fuerza productiva y social de seres humanos con la capacidad e inspiración de trabajar y luchar juntos para satisfacer las necesidades fundamentales de la gente —con transformar la sociedad de manera fundamental y con apoyar y ayudar a la lucha revolucionaria por todo el mundo—, hacia el objetivo final de un mundo comunista, sin toda explotación y opresión, mientras que al mismo tiempo aborde la crisis ambiental y ecológica verdaderamente existencial, con sentido y de manera integral, lo cual es imposible hacer bajo el sistema del capitalismo-imperialismo.

 

 

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